ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe
Heb 11:1 Ahora bien,
la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.
Esta
frase debe ser meditada y estudiada con detenimiento, no podemos pasar sobre
ella como lo hemos hecho siempre, debemos permitir que su significado y esencia
calen en lo más hondo de nuestro ser. Pues si encontramos revelación, nuestra
vida puede ser trasformada para entender lo que la fe significa y lo que ella
permite en la vida del creyente. Traduciendo el original podemos encontrar más
significado, la fe es la sustancia de aquel en quien se confía, y sin confianza
no hay fe, una prueba tangible de aquello no es visible para los ojos, pero si
lo es para el corazón.
Heb 11:2
Gracias a ella fueron aprobados los antiguos.
Esta fuerte convicción fu la que
permitió que aquellos que creyeron fueran aprobados en medio de la prueba.
Heb 11:3
Por la fe entendemos que el universo fue formado por la palabra de
Dios, de modo que lo visible no provino
de lo que se ve.
Es la fe la que nos permite
entender la verdad de lo eterno, el cómo, el porqué, no se necesita de un
cuando, esa es solo una respuesta superficial, las verdaderas preguntas son el
cómo, el porqué, y el para qué. Como la palabra (rhema) completó o perfeccionó
lo creado, de modo que lo eterno da sentido a lo terrenal.
Heb 11:4
Por la fe Abel ofreció a Dios un sacrificio más aceptable que el de
Caín, por lo cual recibió testimonio de
ser justo, pues Dios aceptó su
ofrenda. Y por la fe Abel, a pesar de estar muerto, habla todavía.
Es la fe esa sustancia de lo eterno
que motivo a Abel a actuar de manera diferente, a ofrecer un sacrificio que
implicaba una mayor sacrificio y entrega, valorando más lo eterno que lo
terrenal, entregando lo mejor de sí mismo, por encima del sacrificio terrenal y
superfluo de Caín. Eso fue lo que justifico ante Dios y por lo cual Dios acepto
su ofrenda, y es esa misma sustancia de lo eterno la que permanece y por la
cual habla según comenta el escritor.
Heb 11:5
Por la fe Enoc fue sacado de este mundo sin experimentar la muerte; no fue hallado porque Dios se lo llevó, pero antes de ser llevado recibió testimonio
de haber agradado a Dios.
Esa misma sustancia le permitió a
Enoc trascender lo terrenal sin experimentar la muerte y agradar a Dios.
Heb 11:6
En realidad, sin fe es imposible
agradar a Dios, ya que cualquiera que se
acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo
buscan.
Sin esa sustancia, que nos permite
confiar, que da sustento a lo eterno en nuestro ser, es imposible agradar a
Dios, pues no basta solo con creer, se necesita una confianza que surge de una
relación personal y continua que nos lleva a confiar en que él es real, que
nuestra existencia depende de él, y que su recompensa es maravillosa entre
quienes le buscan con entrega y fervor.
Heb 11:7
Por la fe Noé, advertido sobre
cosas que aún no se veían, con temor
reverente construyó un arca para salvar a su familia. Por esa fe condenó al mundo y llegó a ser
heredero de la justicia que viene por la fe.
Noé confió con su corazón, aunque
sus ojos no veían lo que habría de acontecer, y con amor reverente construyo un
arca conforme al diseño de Dios, y esa confianza le convirtió en heredero de la
justificación que habría de venir por medio de Cristo.
Heb 11:8
Por la fe Abraham, cuando fue
llamado para ir a un lugar que más tarde recibiría como herencia, obedeció y salió sin saber a dónde iba.
Heb 11:9
Por la fe se radicó como extranjero en la tierra prometida, y habitó en tiendas de campaña con Isaac y
Jacob, herederos también de la misma
promesa,
Heb 11:10 porque esperaba la ciudad de cimientos
sólidos, de la cual Dios es arquitecto y
constructor.
Heb 11:11 Por la fe Abraham, a pesar de su avanzada edad y de que Sara
misma era estéril,* recibió fuerza para tener hijos, porque consideró fiel al que le había hecho
la promesa.
Heb 11:12 Así que de este solo hombre, ya en decadencia, nacieron descendientes numerosos como las
estrellas del cielo e incontables como la arena a la orilla del mar.
Por esa sustancia Abraham fue
llamado para ir y recibir una herencia, se radicó como extranjero. No espero
recibir lo terrenal como herencia, sino lo eterno, y aun en lo terrenal también
vio el cumplimiento de su paternidad que trascendió lo espiritual hasta lo
terrenal.
Heb 11:13 Todos ellos vivieron por la fe, y murieron sin haber recibido las cosas
prometidas; más bien, las reconocieron a lo lejos, y confesaron que eran extranjeros y
peregrinos en la tierra.
No todos vieron el cumplimiento de
las promesas que recibieron en lo terrenal, porque entendieron que lo eterno
trasciende lo terrenal, y pudieron vivir como peregrinos.
Heb 11:14 Al expresarse así, claramente dieron a entender que andaban en
busca de una patria.
Heb 11:15 Si hubieran estado pensando en aquella patria
de donde habían emigrado, habrían tenido
oportunidad de regresar a ella.
Heb 11:16 Antes bien,
anhelaban una patria mejor, es
decir, la celestial. Por lo tanto,
Dios no se avergonzó de ser llamado su Dios, y les preparó una ciudad.
Sus vidas expresaron una convicción
con la que dieron a entender que buscaban en lo eterno su verdadero origen.
Heb 11:17 Por la fe Abraham, que había recibido las promesas, fue puesto a prueba y ofreció a Isaac, su hijo único,
Heb 11:18 a pesar de que Dios le había dicho: "Tu descendencia se establecerá por
medio de Isaac."*
Heb 11:19 Consideraba Abraham que Dios tiene poder
hasta para resucitar a los muertos, y
así, en sentido figurado, recobró a Isaac de entre los muertos.
Como podemos notar todo en la vida
del creyente, es por fe y para fe, Abraham es prueba de ello, luego de haber
recibido la promesa de su hijo Isaac, su confianza fue probada para entender
que Dios es Dios de vivos y aun de aquellos que prueban la muerte de la carne,
reconociendo el poder de Dios y su soberanía.
Heb 11:20 Por la fe Isaac bendijo a Jacob y a
Esaú, previendo lo que les esperaba en
el futuro.
Por fe Isaac profetizo sobre sus
hijos lo que habría de suceder en sus vidas terrenales.
Heb 11:21 Por la fe Jacob, cuando estaba a punto de morir, bendijo a cada uno de los hijos de José, y adoró apoyándose en la punta de su bastón.
Por esa sustancia divina presente
en su ser, Jacob al final de sus días terrenales declaro bendiciones sobre los
hijos de José a quien creía muerto desde muy joven y se apoyó en el borde de su
cama para adorar, reconociendo el poder de Dios y su sentido de propósito para
la vida de sus hijos. En Gen 48:8-20 encontramos lo que sucedió, Israel que era
el nombre de Dios para Jacob, el desobediente, y el cual hace referencia a su
conexión con Dios, siempre que le encontramos nombrado como Israel su obrar era
diferente a cuando se le llama Jacob. Las escrituras comentan lo sucedido y
como Jacob en vez de bendecir primeramente a su primogénito, bendice al menor.
Heb 11:22 Por la fe José, al fin de su vida, se refirió a la salida de los israelitas de
Egipto y dio instrucciones acerca de sus restos mortales.
José comprendió por revelación
divina que con el fin de su vida Dios visitaría a su pueblo (Gen 50: 24-25), y
ellos tendrían que salir a la tierra que él les había prometido, por lo que
pidió que sus restos mortales fueran llevados de Egipto a Israel.
Heb 11:23 Por la fe Moisés, recién nacido, fue escondido por sus padres durante tres
meses, porque vieron que era un niño
precioso, y no tuvieron miedo del edicto
del rey.
Fue esa sustancia divina la que
motivo a los padres de Moisés para que fuera escondido, y luego liberado en las
aguas.
Heb 11:24 Por la fe Moisés, ya adulto,
renunció a ser llamado hijo de la hija del faraón.
Heb 11:25 Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios
a disfrutar de los efímeros placeres del pecado.
Heb 11:26 Consideró que el oprobio por causa del Mesías
era una mayor riqueza que los tesoros de Egipto, porque tenía la mirada puesta en la
recompensa.
Heb 11:27 Por la fe salió de Egipto sin tenerle miedo a
la ira del rey, pues se mantuvo firme
como si estuviera viendo al Invisible.
Heb 11:28 Por la fe celebró la Pascua y el rociamiento
de la sangre, para que el exterminador
de los primogénitos no tocara a los de Israel.
Por medio de la fe fue que Moisés
reconoció la riquezas de lo eterno y pudo renunciar a ser llamado hijo de la
hija de faraón, prefirió el maltrato y el exilio, considero un privilegio el
oprobio por causa del Mesías y sin miedo salió de Egipto actuando como quien ve
lo eterno antes que lo terrenal, y por esa misma fe instauro la pascua como un
tiempo de salvación que con el tiempo se cumpliría no solo para con su pueblo,
sino también para con la humanidad.
Heb 11:29 Por la fe el pueblo cruzó el Mar Rojo como
por tierra seca; pero cuando los
egipcios intentaron cruzarlo, se
ahogaron.
Por esa confianza el pueblo hebreo
cruzo el mar rojo, la fe siempre está relacionada con el actuar, con el
entendimiento, con la palabra y con la revelación de lo que habría de venir.
Heb 11:30 Por la fe cayeron las murallas de
Jericó, después de haber marchado el
pueblo siete días a su alrededor.
Fue la fe la que le permitió al
pueblo creer y confiar en la victoria ante unas murallas impenetrables para el
hombre, para que siguiendo el diseño que se le había confiado a Josué pudieran
obedecer y ver respuesta a sus plegarias.
Heb 11:31 Por la fe la prostituta Rahab no murió junto
con los desobedientes,* pues había recibido en paz a los espías.
Rahab obro por fe, confiando en
Dios antes que en los hombres y esa confianza que puso sobre Dios para
salvación de ella y los de su casa, es tipología de la misma fe con la que Dios
sigue alcanzando el corazón del hombre para salvarle.
Heb 11:32 ¿Qué más voy a decir? Me faltaría tiempo para hablar de
Gedeón, Barac, Sansón,
Jefté, David, Samuel y los profetas,
Quien escribió hebreos conocía muy
bien las escrituras del antiguo testamento y como ellas revelaban el propósito
de Dios por medio de la fe. Usa varios ejemplos de hombres y mujeres, cuyas
vidas fueron trasformadas por la fe y como esa fe trastorno todo lo que les
rodeaba. Gedeón se enfrentó a los madianitas, Barac escucho a Débora e hizo lo
que Dios le encomendó, Sansón recibió una fuerza sobrenatural con la cual obro,
Jefte combatió a los amonitas y entrego su ofrenda convenida al Señor, David
confronto al gigante, resistió a Saúl y reino sobre Israel, Samuel ungió reyes,
los confronto, y sirvió a Dios con devoción, junto a todos los profetas que le
siguieron.
Heb 11:33 los cuales por la fe conquistaron
reinos, hicieron justicia y alcanzaron
lo prometido; cerraron bocas de leones,
Heb 11:34 apagaron la furia de las llamas y escaparon
del filo de la espada; sacaron fuerzas
de flaqueza; se mostraron valientes en
la guerra y pusieron en fuga a ejércitos extranjeros.
Heb 11:35 Hubo mujeres que por la resurrección
recobraron a sus muertos. Otros, en cambio,
fueron muertos a golpes, pues
para alcanzar una mejor resurrección no aceptaron que los pusieran en libertad.
Heb 11:36 Otros sufrieron la prueba de burlas y
azotes, e incluso de cadenas y cárceles.
Heb 11:37 Fueron apedreados,* aserrados por la
mitad, asesinados a filo de espada. Anduvieron fugitivos de aquí para allá, cubiertos de pieles de oveja y de cabra, pasando necesidades, afligidos y maltratados.
La fe dio a hombres comunes la
posibilidad de obrar maravillas y obras que parecían imposibles a los ojos de
los hombres. Victoria, justicia y libertad se concibieron desde la fe. La fe
abrió el medio para que aquellos seres pudieran experimentar el poder
sobrenatural de Dios, que obro de diferentes maneras sobre los hombres que el
escogió para mostrar al mundo su gloria y majestad. Todos ellos dieron
testimonio de la verdad por medio de la fe y esta abrió sendas asombrosas por
las que ellos pudieron andar.
Heb 11:38 ¡El mundo no merecía gente así! Anduvieron sin rumbo por desiertos y
montañas, por cuevas y cavernas.
Heb 11:39 Aunque todos obtuvieron un testimonio
favorable mediante la fe, ninguno de
ellos vio el cumplimiento de la promesa.
Heb 11:40 Esto sucedió para que ellos no llegaran a la
meta* sin nosotros, pues Dios nos había
preparado algo mejor.
Todo aquel que vive por fe, se
somete voluntariamente a la voluntad de su Señor, para alcanzar la verdadera
vida y libertad que solo son asequibles por la fe, esa sustancia que fue
preparada desde el comienzo por Dios para que todos pudiéramos alcanzarla y
disfrutarla mediante Cristo. Este capítulo, es sin lugar a dudas la explicación
doctrinal acerca de la fe, más extensa y maravillosa que podemos encontrar, al
ahondar en el significado de cada palabra podemos encontrar mayor revelación y
descubrir gloriosas respuestas a nuestras inquietudes.
ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe
Heb 11:1 Ahora bien,
la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.
Esta
frase debe ser meditada y estudiada con detenimiento, no podemos pasar sobre
ella como lo hemos hecho siempre, debemos permitir que su significado y esencia
calen en lo más hondo de nuestro ser. Pues si encontramos revelación, nuestra
vida puede ser trasformada para entender lo que la fe significa y lo que ella
permite en la vida del creyente. Traduciendo el original podemos encontrar más
significado, la fe es la sustancia de aquel en quien se confía, y sin confianza
no hay fe, una prueba tangible de aquello no es visible para los ojos, pero si
lo es para el corazón.
Heb 11:2
Gracias a ella fueron aprobados los antiguos.
Esta fuerte convicción fu la que
permitió que aquellos que creyeron fueran aprobados en medio de la prueba.
Heb 11:3
Por la fe entendemos que el universo fue formado por la palabra de
Dios, de modo que lo visible no provino
de lo que se ve.
Es la fe la que nos permite
entender la verdad de lo eterno, el cómo, el porqué, no se necesita de un
cuando, esa es solo una respuesta superficial, las verdaderas preguntas son el
cómo, el porqué, y el para qué. Como la palabra (rhema) completó o perfeccionó
lo creado, de modo que lo eterno da sentido a lo terrenal.
Heb 11:4
Por la fe Abel ofreció a Dios un sacrificio más aceptable que el de
Caín, por lo cual recibió testimonio de
ser justo, pues Dios aceptó su
ofrenda. Y por la fe Abel, a pesar de estar muerto, habla todavía.
Es la fe esa sustancia de lo eterno
que motivo a Abel a actuar de manera diferente, a ofrecer un sacrificio que
implicaba una mayor sacrificio y entrega, valorando más lo eterno que lo
terrenal, entregando lo mejor de sí mismo, por encima del sacrificio terrenal y
superfluo de Caín. Eso fue lo que justifico ante Dios y por lo cual Dios acepto
su ofrenda, y es esa misma sustancia de lo eterno la que permanece y por la
cual habla según comenta el escritor.
Heb 11:5
Por la fe Enoc fue sacado de este mundo sin experimentar la muerte; no fue hallado porque Dios se lo llevó, pero antes de ser llevado recibió testimonio
de haber agradado a Dios.
Esa misma sustancia le permitió a
Enoc trascender lo terrenal sin experimentar la muerte y agradar a Dios.
Heb 11:6
En realidad, sin fe es imposible
agradar a Dios, ya que cualquiera que se
acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo
buscan.
Sin esa sustancia, que nos permite
confiar, que da sustento a lo eterno en nuestro ser, es imposible agradar a
Dios, pues no basta solo con creer, se necesita una confianza que surge de una
relación personal y continua que nos lleva a confiar en que él es real, que
nuestra existencia depende de él, y que su recompensa es maravillosa entre
quienes le buscan con entrega y fervor.
Heb 11:7
Por la fe Noé, advertido sobre
cosas que aún no se veían, con temor
reverente construyó un arca para salvar a su familia. Por esa fe condenó al mundo y llegó a ser
heredero de la justicia que viene por la fe.
Noé confió con su corazón, aunque
sus ojos no veían lo que habría de acontecer, y con amor reverente construyo un
arca conforme al diseño de Dios, y esa confianza le convirtió en heredero de la
justificación que habría de venir por medio de Cristo.
Heb 11:8
Por la fe Abraham, cuando fue
llamado para ir a un lugar que más tarde recibiría como herencia, obedeció y salió sin saber a dónde iba.
Heb 11:9
Por la fe se radicó como extranjero en la tierra prometida, y habitó en tiendas de campaña con Isaac y
Jacob, herederos también de la misma
promesa,
Heb 11:10 porque esperaba la ciudad de cimientos
sólidos, de la cual Dios es arquitecto y
constructor.
Heb 11:11 Por la fe Abraham, a pesar de su avanzada edad y de que Sara
misma era estéril,* recibió fuerza para tener hijos, porque consideró fiel al que le había hecho
la promesa.
Heb 11:12 Así que de este solo hombre, ya en decadencia, nacieron descendientes numerosos como las
estrellas del cielo e incontables como la arena a la orilla del mar.
Por esa sustancia Abraham fue
llamado para ir y recibir una herencia, se radicó como extranjero. No espero
recibir lo terrenal como herencia, sino lo eterno, y aun en lo terrenal también
vio el cumplimiento de su paternidad que trascendió lo espiritual hasta lo
terrenal.
Heb 11:13 Todos ellos vivieron por la fe, y murieron sin haber recibido las cosas
prometidas; más bien, las reconocieron a lo lejos, y confesaron que eran extranjeros y
peregrinos en la tierra.
No todos vieron el cumplimiento de
las promesas que recibieron en lo terrenal, porque entendieron que lo eterno
trasciende lo terrenal, y pudieron vivir como peregrinos.
Heb 11:14 Al expresarse así, claramente dieron a entender que andaban en
busca de una patria.
Heb 11:15 Si hubieran estado pensando en aquella patria
de donde habían emigrado, habrían tenido
oportunidad de regresar a ella.
Heb 11:16 Antes bien,
anhelaban una patria mejor, es
decir, la celestial. Por lo tanto,
Dios no se avergonzó de ser llamado su Dios, y les preparó una ciudad.
Sus vidas expresaron una convicción
con la que dieron a entender que buscaban en lo eterno su verdadero origen.
Heb 11:17 Por la fe Abraham, que había recibido las promesas, fue puesto a prueba y ofreció a Isaac, su hijo único,
Heb 11:18 a pesar de que Dios le había dicho: "Tu descendencia se establecerá por
medio de Isaac."*
Heb 11:19 Consideraba Abraham que Dios tiene poder
hasta para resucitar a los muertos, y
así, en sentido figurado, recobró a Isaac de entre los muertos.
Como podemos notar todo en la vida
del creyente, es por fe y para fe, Abraham es prueba de ello, luego de haber
recibido la promesa de su hijo Isaac, su confianza fue probada para entender
que Dios es Dios de vivos y aun de aquellos que prueban la muerte de la carne,
reconociendo el poder de Dios y su soberanía.
Heb 11:20 Por la fe Isaac bendijo a Jacob y a
Esaú, previendo lo que les esperaba en
el futuro.
Por fe Isaac profetizo sobre sus
hijos lo que habría de suceder en sus vidas terrenales.
Heb 11:21 Por la fe Jacob, cuando estaba a punto de morir, bendijo a cada uno de los hijos de José, y adoró apoyándose en la punta de su bastón.
Por esa sustancia divina presente
en su ser, Jacob al final de sus días terrenales declaro bendiciones sobre los
hijos de José a quien creía muerto desde muy joven y se apoyó en el borde de su
cama para adorar, reconociendo el poder de Dios y su sentido de propósito para
la vida de sus hijos. En Gen 48:8-20 encontramos lo que sucedió, Israel que era
el nombre de Dios para Jacob, el desobediente, y el cual hace referencia a su
conexión con Dios, siempre que le encontramos nombrado como Israel su obrar era
diferente a cuando se le llama Jacob. Las escrituras comentan lo sucedido y
como Jacob en vez de bendecir primeramente a su primogénito, bendice al menor.
Heb 11:22 Por la fe José, al fin de su vida, se refirió a la salida de los israelitas de
Egipto y dio instrucciones acerca de sus restos mortales.
José comprendió por revelación
divina que con el fin de su vida Dios visitaría a su pueblo (Gen 50: 24-25), y
ellos tendrían que salir a la tierra que él les había prometido, por lo que
pidió que sus restos mortales fueran llevados de Egipto a Israel.
Heb 11:23 Por la fe Moisés, recién nacido, fue escondido por sus padres durante tres
meses, porque vieron que era un niño
precioso, y no tuvieron miedo del edicto
del rey.
Fue esa sustancia divina la que
motivo a los padres de Moisés para que fuera escondido, y luego liberado en las
aguas.
Heb 11:24 Por la fe Moisés, ya adulto,
renunció a ser llamado hijo de la hija del faraón.
Heb 11:25 Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios
a disfrutar de los efímeros placeres del pecado.
Heb 11:26 Consideró que el oprobio por causa del Mesías
era una mayor riqueza que los tesoros de Egipto, porque tenía la mirada puesta en la
recompensa.
Heb 11:27 Por la fe salió de Egipto sin tenerle miedo a
la ira del rey, pues se mantuvo firme
como si estuviera viendo al Invisible.
Heb 11:28 Por la fe celebró la Pascua y el rociamiento
de la sangre, para que el exterminador
de los primogénitos no tocara a los de Israel.
Por medio de la fe fue que Moisés
reconoció la riquezas de lo eterno y pudo renunciar a ser llamado hijo de la
hija de faraón, prefirió el maltrato y el exilio, considero un privilegio el
oprobio por causa del Mesías y sin miedo salió de Egipto actuando como quien ve
lo eterno antes que lo terrenal, y por esa misma fe instauro la pascua como un
tiempo de salvación que con el tiempo se cumpliría no solo para con su pueblo,
sino también para con la humanidad.
Heb 11:29 Por la fe el pueblo cruzó el Mar Rojo como
por tierra seca; pero cuando los
egipcios intentaron cruzarlo, se
ahogaron.
Por esa confianza el pueblo hebreo
cruzo el mar rojo, la fe siempre está relacionada con el actuar, con el
entendimiento, con la palabra y con la revelación de lo que habría de venir.
Heb 11:30 Por la fe cayeron las murallas de
Jericó, después de haber marchado el
pueblo siete días a su alrededor.
Fue la fe la que le permitió al
pueblo creer y confiar en la victoria ante unas murallas impenetrables para el
hombre, para que siguiendo el diseño que se le había confiado a Josué pudieran
obedecer y ver respuesta a sus plegarias.
Heb 11:31 Por la fe la prostituta Rahab no murió junto
con los desobedientes,* pues había recibido en paz a los espías.
Rahab obro por fe, confiando en
Dios antes que en los hombres y esa confianza que puso sobre Dios para
salvación de ella y los de su casa, es tipología de la misma fe con la que Dios
sigue alcanzando el corazón del hombre para salvarle.
Heb 11:32 ¿Qué más voy a decir? Me faltaría tiempo para hablar de
Gedeón, Barac, Sansón,
Jefté, David, Samuel y los profetas,
Quien escribió hebreos conocía muy
bien las escrituras del antiguo testamento y como ellas revelaban el propósito
de Dios por medio de la fe. Usa varios ejemplos de hombres y mujeres, cuyas
vidas fueron trasformadas por la fe y como esa fe trastorno todo lo que les
rodeaba. Gedeón se enfrentó a los madianitas, Barac escucho a Débora e hizo lo
que Dios le encomendó, Sansón recibió una fuerza sobrenatural con la cual obro,
Jefte combatió a los amonitas y entrego su ofrenda convenida al Señor, David
confronto al gigante, resistió a Saúl y reino sobre Israel, Samuel ungió reyes,
los confronto, y sirvió a Dios con devoción, junto a todos los profetas que le
siguieron.
Heb 11:33 los cuales por la fe conquistaron
reinos, hicieron justicia y alcanzaron
lo prometido; cerraron bocas de leones,
Heb 11:34 apagaron la furia de las llamas y escaparon
del filo de la espada; sacaron fuerzas
de flaqueza; se mostraron valientes en
la guerra y pusieron en fuga a ejércitos extranjeros.
Heb 11:35 Hubo mujeres que por la resurrección
recobraron a sus muertos. Otros, en cambio,
fueron muertos a golpes, pues
para alcanzar una mejor resurrección no aceptaron que los pusieran en libertad.
Heb 11:36 Otros sufrieron la prueba de burlas y
azotes, e incluso de cadenas y cárceles.
Heb 11:37 Fueron apedreados,* aserrados por la
mitad, asesinados a filo de espada. Anduvieron fugitivos de aquí para allá, cubiertos de pieles de oveja y de cabra, pasando necesidades, afligidos y maltratados.
La fe dio a hombres comunes la
posibilidad de obrar maravillas y obras que parecían imposibles a los ojos de
los hombres. Victoria, justicia y libertad se concibieron desde la fe. La fe
abrió el medio para que aquellos seres pudieran experimentar el poder
sobrenatural de Dios, que obro de diferentes maneras sobre los hombres que el
escogió para mostrar al mundo su gloria y majestad. Todos ellos dieron
testimonio de la verdad por medio de la fe y esta abrió sendas asombrosas por
las que ellos pudieron andar.
Heb 11:38 ¡El mundo no merecía gente así! Anduvieron sin rumbo por desiertos y
montañas, por cuevas y cavernas.
Heb 11:39 Aunque todos obtuvieron un testimonio
favorable mediante la fe, ninguno de
ellos vio el cumplimiento de la promesa.
Heb 11:40 Esto sucedió para que ellos no llegaran a la
meta* sin nosotros, pues Dios nos había
preparado algo mejor.
Todo aquel que vive por fe, se
somete voluntariamente a la voluntad de su Señor, para alcanzar la verdadera
vida y libertad que solo son asequibles por la fe, esa sustancia que fue
preparada desde el comienzo por Dios para que todos pudiéramos alcanzarla y
disfrutarla mediante Cristo. Este capítulo, es sin lugar a dudas la explicación
doctrinal acerca de la fe, más extensa y maravillosa que podemos encontrar, al
ahondar en el significado de cada palabra podemos encontrar mayor revelación y
descubrir gloriosas respuestas a nuestras inquietudes.