martes, 3 de noviembre de 2020

ESTUDIO BÍBLICO HECHOS 21



ESTUDIO BÍBLICO 
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

Act 21:1  Después de separarnos de ellos,  zarpamos y navegamos directamente a Cos.  Al día siguiente fuimos a Rodas, y de allí a Pátara.
Act 21:2  Como encontramos un barco que iba para Fenicia,  subimos a bordo y zarpamos.
Act 21:3  Después de avistar Chipre y de pasar al sur de la isla,  navegamos hacia Siria y llegamos a Tiro,  donde el barco tenía que descargar.
Los viajes de Pablo implicaban largos trayectos a pie, en barco lo que genera un gran desgaste y cansancio, pero Pablo no se amilana ante la tarea, siguiendo la guía del Espíritu Santo.
Act 21:4  Allí encontramos a los discípulos y nos quedamos con ellos siete días.  Ellos, por medio del Espíritu, exhortaron a Pablo a que no subiera a Jerusalén.
Sus viajes también estaban plagados de encuentros con discípulos quienes seguramente se regocijaban al encontrar a su apóstol en el ejercicio de su llamado, así mismo él cómo su maestro. Los discípulos proféticamente por medio del Espíritu Santo exhortaron a Pablo para que no subiera Jerusalén pues era una clara advertencia de lo que le esperaba al apóstol allí.
Act 21:5  Pero al cabo de algunos días,  partimos y continuamos nuestro viaje.  Todos los discípulos,  incluso las mujeres y los niños,  nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad,  y allí en la playa nos arrodillamos y oramos.
Antes de viajar o hacer algo la iglesia siempre oraba, pues encomendaba sus planes a Dios y confiaba en su voluntad para realizarlos. Esto muestra un alto grado de dependencia para con Dios.
Act 21:6  Luego de despedirnos,  subimos a bordo y ellos regresaron a sus hogares.
Act 21:7  Nosotros continuamos nuestro viaje en barco desde Tiro y arribamos a Tolemaida,  donde saludamos a los hermanos y nos quedamos con ellos un día.
Era común que Pablo se quedara junto a otros discípulos que seguramente querían aprender más de él. Así que le pedían que se quedara algunos días con ellos para compartir y aprender.
Act 21:8  Al día siguiente salimos y llegamos a Cesarea,  y nos hospedamos en casa de Felipe el evangelista,  que era uno de los siete
Act 21:9  y tenía cuatro hijas solteras que profetizaban.
Aquí encontramos a Felipe quien se ha ganado por su empeño en evangelizar a toda esta región el título de evangelista. También es mencionado como uno de los siete, algunos creen que es una referencia a Hechos 6:5 como uno de los que ayudaron, otros creen que hace alusión a los discípulos que aun vivían y otros que era una referencia al número de ancianos de esta región. Además, se nos comenta que tenía ya para esos días cuatro hijas que profetizaban, una clara evidencia de la continuidad del don profético en medio de la iglesia algo que no todos aceptan.
Act 21:10  Llevábamos allí varios días,  cuando bajó de Judea un profeta llamado Ágabo.
Ahora nos encontramos con otro punto bien interesante, la aparición de un profeta. Hay una gran discusión por parte de algunas denominaciones sobre el si los ministerios de la iglesia siguieron o terminaron con los apóstoles y la primera iglesia. Este es otro punto a favor de la continuidad de los ministerios, pues podemos encontrar a un personaje cuyo ministerio era el profético y por el cual era reconocido por todos, así como hace un momento encontramos a Felipe siendo llamado el evangelista por su ministerio para con la iglesia.
Act 21:11  Éste vino a vernos y,  tomando el cinturón de Pablo,  se ató con él de pies y manos,  y dijo:  --Así dice el Espíritu Santo:  'De esta manera atarán los judíos de Jerusalén al dueño de este cinturón,  y lo entregarán en manos de los gentiles.'
El hombre que se llamaba Ágabo y era conocido como profeta por la iglesia expone por revelación divina el futuro de Pablo, quien habría de sufrir cárceles y ataduras por el nombre de Cristo. Esta profecía pudo ser corroborada como verdadera por la iglesia posterior a su entrega, lo que nos muestra que la profecía es un don vivo dentro de la iglesia neotestamentaria, pero que se daba bajo la guía del Espíritu Santo y con la seriedad que ello implicaba. Recordemos que la profecía no le dice que debe hacer, solo le revela lo que sucederá si sube a Jerusalén, así que la decisión sigue siendo de Pablo de hacerlo o no, de modo que la profecía jamás debe manipular el libre albedrio de la persona u obligarle a hacer algo. Esta es una profecía que revela el futuro inmediato de Pablo, pero la profecía también tenía la intensión de exhortarle para que viera claramente las consecuencias de seguir con su empeño de dar a conocer la verdad.
Act 21:12  Al oír esto,  nosotros y los de aquel lugar le rogamos a Pablo que no subiera a Jerusalén.
Sabiendo lo que sucedería por revelación divina la iglesia allí reunida junto a Pablo le pide que no suba a Jerusalén, pues sabían que Pablo tenía la firme intención de ir a ese lugar sin importar las consecuencias.
Act 21:13  --¿Por qué lloran?  ¡Me parten el alma!  --respondió Pablo--.  Por el nombre del Señor Jesús estoy dispuesto no sólo a ser atado sino también a morir en Jerusalén.
Fue tal el impacto de la profecía que soltó Ágabo que muchos de los que estaban allí y amaban a Pablo no querían verle sufrir tal humillación y desolador futuro. A lo que Pablo responde que se siente abrumado ante su reacción. Mas él tenía la clara convicción de hacer lo que Dios le había enviado a hacer. L disposición de Pablo para ir hasta las últimas consecuencias nos muestra la firme convicción de Pablo de entregar su vida por causa de su amor por Cristo.
Act 21:14  Como no se dejaba convencer,  desistimos exclamando:  --¡Que se haga la voluntad del Señor!
Nadie pudo convencer la férrea convicción de Pablo a pesar de su duro futuro por enfrentar. Así que decidieron dejar el asunto bajo la voluntad de Dios. Nadie quiere que un hermano en la fe sufra y menos uno cercano, por lo que debemos confiar como hombres de fe en la voluntad buena, perfecta y agradable de Dios sin importar lo que nuestro hermano(a) pueda llegar a tener que enfrentar.
Act 21:15  Después de esto,  acabamos los preparativos y subimos a Jerusalén.
Así que terminado el asunto en Cesarea y a pesar de las advertencias proféticas se dispusieron para enfrentar lo inevitable. Muchas veces Dios permite que conozcamos nuestro futuro por sueños y profecía para que sepamos a que atenernos y no vernos confundidos ante la prueba de nuestra fe. Así que debemos prestar atención a las señales por las que Dios quiere hablarnos de lo que ha de acontecer para seguir firmes en nuestro propósito de adorarle siempre.
Act 21:16  Algunos de los discípulos de Cesarea nos acompañaron y nos llevaron a la casa de Mnasón,  donde íbamos a alojarnos.  Éste era de Chipre,  y uno de los primeros discípulos.
El hermano Mnasón es mencionado como uno de los primeros discípulos, aunque no sabemos si de Cristo, de Pablo o de algún apóstol en particular, algunos se inclinan a pensar que fue uno de los primeros convertidos de Pablo. Quien termina por alojarle en Jerusalén y brindarle lo necesario para su estadía junto a los discípulos que le acompañan. La iglesia vivía en la práctica la hospitalidad, pues siempre estaban atentos a las necesidades de sus líderes, apóstoles y maestros para brindarles lo que estuviera a su alcance para ayudarles en su propósito.
Act 21:17  Cuando llegamos a Jerusalén,  los creyentes nos recibieron calurosamente.
La koinonia (comunión) entre los creyentes era más que evidente, mostrándose siempre fervorosa en el amor al prójimo.
Act 21:18  Al día siguiente Pablo fue con nosotros a ver a Jacobo,  y todos los ancianos estaban presentes.
Pablo se encuentra con el apóstol Jacobo uno de los que eran considerados columnas de la iglesia en Jerusalén, junto a Pedro y Juan (Gal. 2:9). En la reunión también podemos ver que no solo estaba él sino que le acompañaban todos los ancianos o referentes de la fe en Jerusalén. La iglesia tempranamente empieza a conformarse como una estructura que se cimentaba en los ancianos (lideres firmes y de testimonio que conocían la palabra y el mensaje predicado por los apóstoles), quienes luego recibirían el liderazgo de los apóstoles para dirigir y guiar a la iglesia.
Act 21:19  Después de saludarlos,  Pablo les relató detalladamente lo que Dios había hecho entre los gentiles por medio de su ministerio.
Pablo les comparte a sus hermanos en la fe lo que Dios ha hecho por medio de su ministerio, lo que nos recuerda que Pablo en ningún momento se toma alguna atribución por lo que ha hecho, pues entiende que todo es por la gracia de Dios. Obras como sanidades, evangelismo, enseñanza y poder de Dios fueron evidentes a todos durante todo su ministerio, así que quienes estaba con el fueron testigos y no le permitirían llegar a mentir o autoexaltarse más allá de la verdad.
Act 21:20  Al oírlo,  alabaron a Dios.  Luego le dijeron a Pablo:  "Ya ves,  hermano,  cuántos miles de judíos han creído,  y todos ellos siguen aferrados a la ley.
Escuchar a Pablo debió ser algo sorprendente debido a la cantidad de historias y relatos de sus viajes. A lo que sigue la intervención de los hermanos que se hallaban en Jerusalén quienes le comentan que todos los convertidos del judaísmo aún persisten en el apego que tienen de la ley y sus costumbres.
Act 21:21  Ahora bien,  han oído decir que tú enseñas que se aparten de Moisés todos los judíos que viven entre los gentiles.  Les recomiendas que no circunciden a sus hijos ni vivan según nuestras costumbres.
Al parecer a oídos de ellos habían llegado las enseñanzas de Pablo quien según ellos les recomendaba a los nuevos convertidos judíos apartarse de las enseñanzas de Moisés no siguiendo el ritual de la circuncisión, ni vivir en las costumbres judías.
Act 21:22  ¿Qué vamos a hacer?  Sin duda se van a enterar de que has llegado.
Estos creyentes parecen más interesados en agradar a los creyentes judíos que estaba n a favor de que los nuevos convertidos siguieran todas las costumbres judías. Algo que luego fue aclarado en una discusión entre el apóstol Pedro y Pablo.
Act 21:23  Por eso,  será mejor que sigas nuestro consejo.  Hay aquí entre nosotros cuatro hombres que tienen que cumplir un voto.
Tratando de que Pablo no quedara expuesto ante los judíos que defendían la postura judaizante, le envían a llevar a cuatro hombres para que cumplan un voto que pertenecía claramente a las tradiciones judías, como una forma de congraciarse con ellos.
Act 21:24  Llévatelos,  toma parte en sus ritos de purificación y paga los gastos que corresponden al voto de rasurarse la cabeza.  Así todos sabrán que no son ciertos esos informes acerca de ti,  sino que tú también vives en obediencia a la ley.
Aquí terminamos por comprender el propósito por el que Pablo fue enviado a cumplir con un voto tradicional judío, para que los que habían oído que Pablo no seguía las tradiciones pensaran que todo eso era falso.
Act 21:25  En cuanto a los creyentes gentiles,  ya les hemos comunicado por escrito nuestra decisión de que se abstengan de lo sacrificado a los ídolos,  de sangre,  de la carne de animales estrangulados y de la inmoralidad sexual."
Parece ser que unas enseñanzas eran para judíos convertidos y otras para los gentiles convertidos, pues a los judíos se quería que continuaran con sus tradiciones y lo ordenado por la ley. No se nos deja saber hasta qué punto Pablo estuvo de acuerdo con ellos o no, pero lo cierto es que termino por hacerlo, aunque sabia y entendía que ya no estaba bajo la ley sino bajo la gracia. Es probable que la explicación a obedecer este mandato de la iglesia fuera por lo que escribió luego a los Corintios, miremos: 1 Corintios 9:20Me he hecho a los judíos como judío, para ganar a los judíos; a los que están sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la ley) como sujeto a la ley, para ganar a los que están sujetos a la ley. La iglesia en Jerusalén parece haber establecido un código para los creyentes gentiles obligándoles a estos a abstenerse de lo sacrificado a los ídolos, de todo aquello que contuviera sangre, de comer de aquellos animales que hubieran muerto por estrangulación, y los comportamientos sexuales que se apartaban de la moral judía.
Act 21:26  Al día siguiente Pablo se llevó a los hombres y se purificó con ellos.  Luego entró en el templo para dar aviso de la fecha en que vencería el plazo de la purificación y se haría la ofrenda por cada uno de ellos.
Como hombre sujeto a la autoridad eclesial Pablo lleva a estos hombres para que cumplan sus rituales de purificación en el templo, algo que seguramente sabia era osado debido a su estatus de convertido que todos ya sabían.
Act 21:27  Cuando estaban a punto de cumplirse los siete días,  unos judíos de la provincia de Asia vieron a Pablo en el templo.  Alborotaron a toda la multitud y le echaron mano,
Act 21:28  gritando:  "¡Israelitas!  ¡Ayúdennos!  Éste es el individuo que anda por todas partes enseñando a toda la gente contra nuestro pueblo,  nuestra ley y este lugar.  Además,  hasta ha metido a unos griegos en el templo,  y ha profanado este lugar santo."
El ritual duraba siete días en el templo lo cual terminó por exponerlo a unos judíos que le reconocieron y de inmediato alborotaron el lugar para echarle mano. Sus argumentos en contra de Pablo eran que este hombre se había convertido en un instigador en contra del pueblo judío, así como alguien que había profanado el templo al entrar a este con griegos, cosa que era totalmente falsa.
Act 21:29  Ya antes habían visto en la ciudad a Trófimo el efesio en compañía de Pablo,  y suponían que Pablo lo había metido en el templo.
Todo porque habían visto a Pablo junto a Trófimo un hombre de Éfeso que le acompañaba todo el tiempo, por lo que suponían que también lo había metido al templo, lo cual no era cierto de ninguna manera.
Act 21:30  Toda la ciudad se alborotó.  La gente se precipitó en masa,  agarró a Pablo y lo sacó del templo a rastras,  e inmediatamente se cerraron las puertas.
Tal fue lo acontecido que toda la ciudad sufrió el alboroto porque todos se precipitaron en masa para sacar a Pablo del templo.
Act 21:31  Estaban por matarlo,  cuando se le informó al comandante del batallón romano que toda la ciudad de Jerusalén estaba amotinada.
Act 21:32  En seguida tomó algunos centuriones con sus tropas,  y bajó corriendo hacia la multitud.  Al ver al comandante y a sus soldados,  los amotinados dejaron de golpear a Pablo.
Pablo recibió tal golpiza que el escritor menciona que estuvieron por matarle si no es porque llega el comandante romano del batallón junto con sus soldados.
Act 21:33  El comandante se abrió paso,  lo arrestó y ordenó que lo sujetaran con dos cadenas.  Luego preguntó quién era y qué había hecho.
Act 21:34  Entre la multitud cada uno gritaba una cosa distinta.  Como el comandante no pudo averiguar la verdad a causa del alboroto,  mandó que condujeran a Pablo al cuartel.
Act 21:35  Cuando Pablo llegó a las gradas,  los soldados tuvieron que llevárselo en vilo debido a la violencia de la turba.
Act 21:36  El pueblo en masa iba detrás gritando:  "¡Que lo maten!"
El punto alcanzo tal nivel de violencia que la gente seguía a Pablo para que lo mataran los romanos, quienes al no saber cuáles eran los verdaderos cargos por los que lo querían matar se lo llevaron al cuartel.
Act 21:37  Cuando los soldados estaban a punto de meterlo en el cuartel,  Pablo le preguntó al comandante:  --¿Me permite decirle algo?  --¿Hablas griego?  --replicó el comandante--.
Act 21:38  ¿No eres el egipcio que hace algún tiempo provocó una rebelión y llevó al desierto a cuatro mil guerrilleros?
Act 21:39  --No,  yo soy judío,  natural de Tarso,  una ciudad muy importante de Cilicia --le respondió Pablo--.  Por favor,  permítame hablarle al pueblo.
Act 21:40  Con el permiso del comandante,  Pablo se puso de pie en las gradas e hizo una señal con la mano a la multitud.  Cuando todos guardaron silencio,  les dijo en arameo:
Al recuperarse de la golpiza Pablo pudo hablar con el comandante quien descubre que este hombre habla griego y no es quien se imaginaba, un rebelde egipcio guerrillero, por lo que le pidió la oportunidad de poder hablar frente a la multitud para hablar en su defensa. Es interesante notar que fueron los romanos quienes protegieron la vida de Pablo impidiéndoles a los judíos matarle, a veces Dios usa a nuestro adversario para hacer cumplir su propósito.