PREDICA DOMINICAL - EL MENSAJE DE LA CRUZ

PREDICA DOMINICAL

Por: Camilo A. Sastoque M.

Ministerio Unidad de la Fe

EL MENSAJE DE LA CRUZ

1Co 1:18   Me explico:  El mensaje de la cruz es una locura para los que se pierden;  en cambio,  para los que se salvan,  es decir,  para nosotros,  este mensaje es el poder de Dios.

INTRODUCCIÓN

El mensaje de la cruz es un mensaje que carece de lógica, por eso muchos lo tildan de locura, para otros es falta de entendimiento o estupidez, pero el mensaje sigue y seguirá siendo el mismo, un mensaje que deja afuera a la razón, y que solo opera en los elegidos por Dios para ser alcanzados por la salvación.

Este es un mensaje poderoso, trasformador, más que cualquier filosofía o forma de pensar, más poderoso que cualquier otro mensaje que haya escuchado la humanidad, a Dios le ha placido que sea este el mensaje por el cual los perdidos son llamados y no otro, porque sabe que este mensaje confronta a la lógica de manera directa, no es fácil de comprender para un erudito, para un filósofo, el mensaje de la cruz, porque este mensaje va directo al corazón de los que se humillan, pero opera de manera contraria en los que viven bajo la desobediencia, solo despierta el orgullo, la vanidad y a vanagloria de aquellos que se creen superiores en su manera de pensar y así vive gran parte de la humanidad, hablando de humildad, pero son duros para escuchar, lentos para discernir la verdad que se halla en medio de quien reconoce su necesidad de aprender siempre, aun cuando el mensaje raye en la locura.

DESARROLLO

Debe ser así, porque el mensaje no tiene que ser entendido, tiene que tener cierta locura en sí, porque solo los que pierden la cordura del sistema o no se sientes conformes en El, pueden comprender un llamado que no atiende a la razón, sino que atenta directamente contra ella, como un ser divino quiere entregarse por amor?, cuando todas las deidades conocidas por el hombre no son capaces de hacerlo, solo buscan su propio beneficio?, como Dios es capaz de entregar a su único hijo en una cruz?, haciéndose  maldición en un madero (Gálatas 3:13), parece locura, pero en parte es una locura que proviene del amor.

Nadie que se diga cuerdo, o intelectual, puede entender el sentido del amor, el amor es muy loco, como ser capaz de entregarlo todo por aquel a quien se ama, no hay justificación, no hay comprensión, solo el amor puede actuar de esta manera, en el no hay sentido, o que enamorado le encuentra sentido a la vida sin su amado o amada, quien enamorado piensa para actuar, no!, se actúa con entrega, con pasión, y hasta algunas veces impulsivamente, pero este es el amor emocional, pasional un amor eros, mientras que el amor ágape, es un amor con entendimiento, con comprensión, que sabe que se entrega sin cuestionamientos, ni egoísmo, solo opera en aquellos que piensan de manera diferente a como piensa este mundo, por eso ellos pueden ser llamados locos, porque son capaces de dejarlo todo por su amado, porque hacen locuras y son capaces de entregar su vida por llevar un mensaje que ls puede costar todo.

Pero este es el mensaje de la cruz, un mensaje difícil que te confronta con tu pecado, con la necesidad de encontrar al redentor, con la necesidad de comprender el amor que se te ha dado, y con la necesidad de venir a la cruz para despojarte de ti mismo, si no hay cruz, no hay crecimiento espiritual, nos convertimos en parásitos espirituales, que buscan las bendiciones sin ser capaces de rendirlo todo ante el Señor, que buscan su propio beneficio en vez de entregar sus egos en la cruz, para que el poder que opera a través de ella, les permita despojarse de su naturaleza carnal, y les lleve a una relación de mayor profundidad con Dios.

La cruz es un punto en donde Dios unió los cielos y la tierra, donde lo carnal se unió con lo divino, y donde lo terrenal se unió con lo espiritual, para que por medio de este medio podamos ser transformados a imagen de nuestro Señor Jesucristo (2Co 3:18), venciendo a las tinieblas y operando en la luz de Dios.

CONCLUSION

La cruz no es un amuleto, no es algo para venerar, en cambio es un lugar al que todo creyente debe ir, sabiendo que ha de renunciar a si mismo, claro este es un mensaje difícil de comprender, quien en sus cinco sentidos, o e su sano juicio, quiere entregarlo todo a un ser que no ve, a un Dios que murió crucificado, no el mundo no busca este tipo de mensajes, busca mensajes esperanzadores en medio de la dificultad, busca grandes motivadores, busca grandes hombres para aprender de ellos, pero pocos se rebajan a comprender el sacrificio que fue llevado en la cruz, un único sacrificio (Heb 10:12), no necesitas seguir sacrificándote, haciendo cosas para agradar a Dios, solo necesitas venir a Cristo, dejar que la cruz opere en tu vida, algunas veces te permitirá sufrir tal cual Cristo tuvo que hacerlo, pero luego de haber sufrido por un tiempo, Dios nos restaurara, fortalecerá, establecerá y afirmara 1Pe 5:10  para dar gloria a Su nombre.

La cruz no es un mensaje sencillo de predicar porque solo da resultados a quien la ha vivido, no es un mensaje que convenza las mentes, es un mensaje que confronta los corazones, al decirles que Cristo se hizo maldición por nosotros, recibió el castigo que merecíamos y anulo el acta de decretos que se hallaba sobre nuestras vidas, ahora Cristo en la Cruz ha traído vida a nuestros espíritus, la muerte ya o puede operar en nosotros como lo hace en los hijos de desobediencia, y la libertad que ahora tenemos y gozamos en El, nos permite disfrutar de todo lo que vivimos.

Que la cruz no sea un mensaje más, desde los pulpitos, que la cruz sea el mensaje, que podamos decir como Pablo, 1Co 2:2   Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo,  y a éste crucificado. que la crucifixión de Cristo pueda ser entendida en nuestros corazones, para que la gracia opere con poder en nuestras vidas y podamos vivir en unidad con El y dar gloria a su nombre.

Porque los que son de Cristo, ellos han aplicado la cruz a sus propias vidas, y eso hace que el mensaje este ungido con el poder de Dios, como menciona Gal 5:24   Pero los que son de Cristo  han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. 

Oremos, Señor nos entregamos a ti reconociendo nuestra necesidad de venir a la cruz, para entregarnos, para rendirnos, para que crucificando nuestra naturaleza carnal podamos cada dia vivir más disfrutando de tu presencia de tu amor y de tu bendición en Cristo, que comprendiendo lo que viviste en la cruz, esta pueda operar con poder en nuestras vidas, y para que entendiendo su significado podamos reconocer con gratitud el sacrificio que realizaste en amor por nosotros. Amen.