A eso de caer y volver a levantarte,
de fracasar y volver a comenzar, de seguir un camino y tener que torcerlo, de
encontrar el dolor y tener que afrontarlo, a eso, no le llames Adversidad, llámale
SABIDURÍA.
A eso de sentir la mano de Dios y
saberte impotente, de fijarte una meta y tener que seguir otra, de huir de una
prueba y tener que encararla, de planear un vuelo y tener que recortarlo, de aspirar
y no poder, de querer y no saber, de avanzar y no llegar, a eso, no le llames
Castigo, llámale ENSEÑANZA.
A
eso de pasar días juntos radiantes, días felices y días tristes, días de
soledad y días de compañía, a eso, no le llames rutina, llámale EXPERIENCIA.
A eso de que tus ojos miren y tus
oídos oigan y tu cerebro funcione y tus manos trabajen y tu alma irradie y tu
sensibilidad sienta y tu corazón ame, a eso, no le llames poder humano, llámale
MILAGRO.
Salmos 23:5 Dispones ante mí un
banquete
en presencia de mis enemigos.
Has ungido con perfume mi cabeza;
has llenado mi copa a rebosar.
No siempre nuestras vidas se parecen a lo que
quisimos o soñamos, pero seguramente podemos contar con una vida mejor de lo
merecemos gracias a Dios. Sin importar cuales sean las circunstancias que vivas
es importante que reconozcamos que todas ellas son usadas por Dios para nuestro
bien. Con ellas Dios conforma nuestro carácter al de Cristo y se nos permite
descubrir la belleza en la sencillez, la sabiduría que hay en la humildad, y la
oportunidad de amar que se esconde en nuestro enemigo. Dios sabe disponer de un
banquete delante de nuestras angustias para que nos descubramos ungidos por su
gracia y llenos del contentamiento que solo Dios puede dar, aun en las más difíciles
circunstancias. Hay muchas cosas que quiero y aun no tengo, y otras que
probablemente jamás tendré, pero me conformo con saber que Dios es soberano y
su soberanía se muestra en mi vida, pues prefiero su soberanía a su ira.
GUIA DE ESTUDIO
¿Lo que vives glorifica a Dios?
¿Te está enseñando algo lo que estás viviendo?
¿Hay una lección que aprender?
¿Te sientes frustrado?
A eso de encontrar esta reflexión no le llamo casualidad, le llamo manifestación.
ResponderBorrarAmen
ResponderBorrar