ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe
Jas 5:1 Ahora escuchen, ustedes los ricos: ¡lloren a gritos por las calamidades que se
les vienen encima!
Pablo no
teme a los ricos, ni a los poderosos, y por ello les confronta por su accionar.
Su llamado aún persiste para con aquellos que solo buscan las riquezas
materiales.
Jas 5:2
Se ha podrido su riqueza, y sus
ropas están comidas por la polilla.
Jas 5:3
Se han oxidado su oro y su plata.
Ese óxido dará testimonio contra ustedes y consumirá como fuego sus
cuerpos. Han amontonado riquezas, ¡y eso que estamos en los últimos tiempos!
Santiago hace referencia a lo que
habrá de ocurrir con la segunda venida de nuestro Señor, en donde se encontrara
que la riqueza se pudre ante su nulo valor, y los bellos ropajes y vestimentas
serán carcomidos por la polilla, el oro y la plata se oxidaran ante su desuso,
todo lo que acumularon se volverá en su contra y les consumirá como fuego.
Jas 5:4
Oigan cómo clama contra ustedes el salario no pagado a los obreros que
les trabajaron sus campos. El clamor de
esos trabajadores ha llegado a oídos del Señor Todopoderoso.
Mientas acumulaban riquezas dejaban
de pagar un salario justo o aun peor no lo pagaban, y Dios ha oído el clamor de
los que sufren, pues él está cercano a los humildes. La retención del sueldo
era, de parte de los ricos, virtualmente un acto de “fraude”, porque los pobres
jornaleros no eran pagados puntualmente. Santiago se refiere a Deu_24:14-15:
“En su día le darás su jornal, y no se pondrá el sol sin dárselo… porque no
clame contra ti a Jehová, y sea a ti pecado”. Muchos pecados reclaman venganza
al cielo, de los que los hombres claramente no toman en cuenta, como la impureza
y la injusticia.
Jas 5:5
Ustedes han llevado en este mundo una vida de lujo y de placer
desenfrenado. Lo que han hecho es
engordar para el día de la matanza.*
Su lujo dependía de los pobres
quienes eran estafados con la no paga de su justo salario, y junto con ello
vivían una vida de lujuria y placer desenfrenado. La riqueza debe ser
administrada con justicia, porque el no hacerlo te hace culpable ante Dios. La
riqueza sin justicia es causa de oprobio y destrucción, ella sin sabiduría es
una puerta de entrada al placer desenfrenado e insaciable.
Jas 5:6
Han condenado y matado al justo sin que él les ofreciera resistencia.
Muchos ricos y poderosos usan sus
influencias para hacer justicia a su acomodo, atropellando y hasta dando por
muerto a personas justas en su camino de codicia y avaricia. Pero no piensen
que porque logran todo lo que quieren sus vidas no serán objeto del justo
juicio de Dios.
Jas 5:7
Por tanto, hermanos, tengan paciencia hasta la venida del
Señor. Miren cómo espera el agricultor a
que la tierra dé su precioso fruto y con qué paciencia aguarda las temporadas
de lluvia.
Puede que sus vidas sean muestra de
opulencia, de grandeza, de vanidad, de orgullo y de renombre, pero ello solo es
pasajero, no permanecerá pues no es eterno. Con la venida del Señor serán expuestas
las obras de nuestras vidas, de modo que con paciencia esperaremos la justicia
divina, pues la de los hombres puede ser manipulada y controlada, pero la de
Dios es justa y verdadera.
Jas 5:8
Así también ustedes, manténganse
firmes y aguarden con paciencia la venida del Señor, que ya se acerca.
Santiago nos exhorta a mantenernos
firmes sobre la roca, aguardando con paciencia y perseverancia en la obra
encomendada, pues la venida del Señor siempre está presente en el corazón del
creyentes, y aunque hayan pasado algo menos de 2000 años desde que estas
palabras fueron mencionadas, siguen y seguirán están presentes en el corazón
del creyente.
Jas 5:9
No se quejen unos de otros,
hermanos, para que no sean
juzgados. ¡El juez ya está a la puerta!
Abandonemos la queja que no tiene
fruto y solo conforma nuestro corazón y sentimientos hacia el vacío de la
desesperación, además al dejar de lado la queja podemos ver y amar a nuestros
hermanos en la fe tal cual Dios los ve y ama.
Jas 5:10
Hermanos, tomen como ejemplo de
sufrimiento y de paciencia a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.
La vida de los profetas siempre ha
servido de ejemplo al pueblo de Dios, aunque escogidos por Dios, vivieron y
sufrieron con paciencia, esperando el cumplimiento de los tiempos.
Jas 5:11
En verdad, consideramos dichosos
a los que perseveraron. Ustedes han oído
hablar de la perseverancia de Job, y han
visto lo que al final le dio el Señor.
Es que el Señor es muy compasivo y misericordioso.
La perseverancia de Job es tomada
aquí como ejemplo de virtud y entrega a la voluntad divina, para que el final
se cumpliera lo que el Señor dispuso. Cuanta compasión y misericordia ha tenido
Dios para con nosotros, no podemos más que glorificar su nombre y esperar en
él, nuestra justicia, nuestra bendición y nuestro todo.
Jas 5:12
Sobre todo, hermanos míos, no juren ni por el cielo ni por la tierra ni
por ninguna otra cosa. Que su "sí" sea
"sí", y su "no", "no", para que no sean condenados.
De nuevo se nos exhorta a tener en
cuenta lo que decimos, que nuestro si provenga de una convicción sincera, para
que un sí o un no sean verdaderamente un sí o un no, y no un tal vez, o alguna
otra cosa.
Jas 5:13
¿Está afligido alguno entre ustedes?
Que ore. ¿Está alguno de buen
ánimo? Que cante alabanzas.
Si alguno vive en su experiencia
aflicción o se siente de buen ánimo, entonces que no se quede quieto, que
aproveche la oportunidad para acercarse a Dios, desde la oración, o desde la
alabanza, pero que su corazón no permita que el fuego se apague, sino que sea
avivada la llama que arde en nuestro corazón por el amor a Dios.
Jas 5:14
¿Está enfermo alguno de ustedes?
Haga llamar a los ancianos de la iglesia para que oren por él y lo unjan
con aceite en el nombre del Señor.
Si alguno experimenta enfermedad en
su cuerpo, entonces permita que los ancianos, los líderes, los servidores de la
iglesia oren por él, y que el unjan con aceite consagrado al Señor, para que en
el nombre del Señor sea sanado. El aceite es una tipología de la presencia del
Espíritu Santo en la vida del creyente, no hay misticismo alguno en hacerlo o
no hacerlo, al final lo que cuenta es la fe con la que se ora al Padre en el
nombre de Jesús.
Jas 5:15
La oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará. Y si ha pecado, su pecado se le perdonará.
La oración fiel y confiada sana al
enfermo, y si también reconoce su pecado este le será perdonado. La oración y el
reconocimiento de nuestro pecado siempre deben ir de la mano, pues por la
oración y la palabra somos purificados.
Jas 5:16
Por eso, confiésense unos a otros
sus pecados, y oren unos por otros, para que sean sanados. La oración del justo es poderosa y eficaz.
La oración de aquel que ha sido
justificado por la obra redentora de Cristo, es poderosa y eficaz. La confesión
de nuestras faltas debe ser continua y reiterada en caso de que hayamos caído,
entonces podremos ser sanados y salvados.
Jas 5:17
Elías era un hombre con debilidades como las nuestras. Con fervor oró que no lloviera, y no llovió sobre la tierra durante tres años
y medio.
Jas 5:18
Volvió a orar, y el cielo dio su
lluvia y la tierra produjo sus frutos.
Elías no era especial, era igual a
nosotros, con nuestras mismas debilidades, pero con fervor oro a Dios y Dios le
concedió lo que pidió, ello confirmo el poder de Dios y obro cambios poderosos,
pero siempre la oración y su respuesta tienen un propósito. Nuestra oración no
es escuchada por nuestra santidad y pureza, es escuchada por la fe con la que
es hecha y la fe siempre está disponible para el creyente.
Jas 5:19
Hermanos míos, si alguno de
ustedes se extravía de la verdad, y otro
lo hace volver a ella,
Jas 5:20
recuerden que quien hace volver a un pecador de su extravío, lo salvará de la muerte y cubrirá muchísimos
pecados.
Es fácil que alguien que ha
conocido la verdad pueda extraviarse y pecar de nuevo, pero si Dios dispone de
la oportunidad para compartirle y exhortarle a seguir la verdad, para que
vuelva su corazón a Dios y deje de pecar, con ello le salvaras de morir y
cubrirás muchos pecados.
muchas gracias
ResponderBorrarMuchas Gracias Por Su Estudio
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