lunes, 10 de marzo de 2014

TIEMPO DE REFLEXION



Esta es la historia de un muchachito que tenía muy mal carácter. Su padre le dio una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdiera la paciencia, debería clavar un clavo detrás de la puerta.

El primer día, el muchacho clavó 37 clavos detrás de la puerta. Las semanas que siguieron, a medida que él aprendía a controlar su genio, clavaba cada vez menos clavos detrás de la puerta. Des­cubrió que era más fácil controlar su genio que clavar clavos de­trás de la puerta. Llegó el día en que pudo controlar su carácter durante todo el día. Después de informar a su padre, éste le sugi­rió que retirara un clavo cada día que lograra controlar su carácter. Los días pasaron y el joven pudo finalmente anunciar a su padre que no quedaban más clavos para retirar de la puerta.

Su padre lo tomó de la mano y lo llevó hasta la puerta. Le dijo: "Has trabajado duro, hijo mío, pero mira todos esos hoyos en la puerta. Nunca más será la misma. Cada vez que tú pierdes la paciencia, dejas cicatrices exactamente como las que aquí ves. Tú puedes insultar a alguien y retirar lo dicho, pero del modo como se lo digas lo devastará y la cicatriz perdurará para siempre. Una ofensa verbal es tan dañina como una ofensa física".

Jer 6:14  Curan por encima la herida de mi pueblo,

 y les desean: ¡*Paz, paz!,

 cuando en realidad no hay paz.

El mundo vive en un caos, en donde la hipocresía, la mentira, el engaño, la ira, y el mal carácter reinan, y aun peor, creen que es normal vivir así, hemos permitido durante años, que este engaño conforme nuestras vidas y la vida de millones de personas en el mundo, tergiversamos, el tener un carácter firme, con un carácter airado, tenemos líderes que oprimen al mundo en base a este mismo carácter y lo seguimos permitiendo, cuando deberíamos tener líderes que nos afirmen en la verdad, que tuviesen, el mismo carácter dócil y manso de Cristo; el mundo idolatra el mal carácter de los ídolos o estrellas del mundo de la farándula y nos parece normal, que lastima, debemos empezar, a cambiar nuestra forma de pensar; todo empieza, con la reflexión a través de la escritura para que ella pueda moldear nuestro carácter a imagen de Cristo, si tienes mal carácter, si tienes tendencia a la ira, o mal genio, si practicas la hipocresía, el engaño, o la mentira, es tiempo de permitir que la escritura permee tu ser, para que puedas ser trasformado y puedas mostrar en tu vida, el carácter de un hijo de Dios, que vive para dar gloria a Su nombre. La historia de hoy, nos lleva a reflexionar sobre nuestras acciones diarias, y más sobre aquellas, en las cuales nos dejamos llevar por la rabia, la emoción, el dolor y la angustia; lo cual siempre redunda en una herida para nuestro prójimo; son muchas las parejas, que no cuidan lo que dicen y después se ven en dificultades para mantener una relación, son muchos los amigos que por el mal carácter o el orgullo se pierden, son muchos los que dicen creer en Dios, pero están llenos de impaciencia, y de ira, mostrando lo lejos que aún están de ser perfeccionados en Cristo, ¿cuál es tu carácter?, ¿Qué dirían de ti tus familiares y amigos?, no necesitas que otros te digan quien eres, pero a veces, su opinión puede ayudarte a ver cosas que tu no puede ver, permite que Dios al igual que el padre de esta historia, te guie, te enseñe y que el dolor ajeno que has causado por tu mal carácter, te lleve a ser trasformado en el poder de Dios. El versículo de hoy, nos muestra que solo decir ¡paz, paz!, no sana las heridas de aquellos que han sido heridos por nuestras palabras o acciones, la paz completa de nuestro ser, solo puede ser alcanzada mediante el perdón de Dios y la sanidad que el obra en nuestro interior cuando nos entregamos a él, y le entregamos toda carga emocional, él es nuestro reposo, nuestra sanidad, nuestro descanso, nuestra justicia; cuando lo comprendas podrás perdonar de corazón, y dejar la ofensa, para vivir en libertad, un estado en el que hay paz verdadera y vida en Cristo.

GUIA DE ESTUDIO

¿Cuál es tu carácter?

¿Qué dirían de ti tus amigos y familiares?

 ¿Por qué crees que es tan difícil cambiar nuestro carácter?

¿De donde crees que proviene tu carácter?, no digo sobre tu herencia familiar, sino, ¿será que depende de alguna herida del pasado?

¿Has permitido que Dios quebrante tu carácter y lo moldee?

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