lunes, 6 de agosto de 2012

TIEMPO DE REFLEXION


¿NO TE PARECE EXTRAÑO?

Como un billete de 10.000 parece tan grande cuando lo llevas a la Iglesia y tan pequeño cuando lo llevas a las tiendas.
Cuán larga parece una hora cuando servimos a Dios, pero qué corta cuando vemos nuestro programa favorito.
Qué difícil nos vienen las palabras al orar y cuán fácil cuando charlamos con un amigo.
Cuánto nos emocionamos cuando un partido de fútbol se extiende por definición a penales y cuánto nos quejamos cuando un servicio en la iglesia es más largo de lo usual.
Lo difícil que es leer un capítulo de la Biblia, pero qué fácil leemos100 páginas de una revista popular o de un periódico deportivo.
Cómo las personas desean los asientos del frente en cualquier juego o concierto, pero cómo hasta se esfuerzan para buscar asientos en la parte de atrás de la Iglesia.
Qué necesitemos 2 ó 3 semanas de aviso para responder a un evento de la Iglesia pero ajustamos nuestros compromisos sin previo aviso para otros eventos aunque sea en el último momento.
Lo difícil que es aprender una verdad simple del Evangelio para compartirla con otros, pero qué fácil que es para la misma persona entender y repetir un chisme.
Cómo creemos lo que dicen los periódicos pero cuestionamos lo que dice la Biblia.
Que muchos sean tan cuidadosos para escoger lo que entra en su estómago pero no se preocupan de lo que entra en su mente o en su corazón.
Que todos quieran ir al cielo y pocos se preocupan de vivir las exigencias del evangelio necesarias para lograrlo. Es extraño, ¿no te parece?
1Co_1:18  Me explico:  El mensaje de la cruz es una locura para los que se pierden;  en cambio,  para los que se salvan,  es decir,  para nosotros,  este mensaje es el poder de Dios.
El mensaje de Dios es vida eterna para quienes lo hallan, pero para lo que no entienden o no creen parece una locura, pero así lo ha hecho Dios para que el orgullo de la humanidad no les permita ver. Cuán difícil nos parece llevar una vida recta, con valores y principios como la que Dios nos invita a llevar, pero que fácil es entregar nuestra vida a placeres perecederos que nos destruyen y nos alejan de Dios. La gran mayoría de las cosas en este  mundo tienen el propósito de alejarte de una vida plena en Dios, la televisión nos satura con bellas imágenes, estimulantes sensaciones y emociones que nos llevan codiciar, envidiar, odiar y a querer lograr cosas que no son verdaderamente importantes para nosotros, las revistas nos muestran imágenes exuberantes, hombres y mujeres perfectos que nos hacen añorar cosas que no son importantes en realidad, vivimos en un mundo donde se alaban los cuerpos esculturales, el dinero y el poder, es fácil criticar, juzgar y condenar a todos sin importar las consecuencias, ni el dolor o lo que le pasa a los demás, el egoísmo se ha tomado nuestra sociedad y ya no importa lo que le suceda a nuestro prójimo. No te digo que debemos de dejar de ver televisión, aunque si puedes hazlo, no te digo que si dejas de leer revistas todo cambiara, pero si puedes hazlo, te aliento a dejar los comentarios y críticas,  y así dejes de ver la paja en el ojo ajeno y te pongas más cuidado a ti mismo y a los que te rodean, te aseguro que esto te hará vivir una vida más plena, sin afanes, sin codicia, ni envidia y llevara a un nuevo nivel de comunión con Dios. Anhelamos ver un mundo mejor, pero creemos que con criticar, juzgar y condenar es suficiente, si quieres ver un cambio empieza por hacerlo en tu vida, así podrás enseñar a otros que si es posible. Revisa cuanto tiempo pasas con Dios en oración?, vas a la iglesia por costumbre o por un encuentro personal con Jesús?, que ocupa más tu tiempo, tu familia, la televisión, el trabajo?, das para ayudar a los demás?.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por compartir con nosotros. Bendiciones