PREDICA DOMINICAL
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe
ES MÁS DIFÍCIL SACAR A EGIPTO DEL PUEBLO DE DIOS
QUE SACAR AL PUEBLO DE DIOS DE EGIPTO
2Ki 21:15 por
cuanto han hecho lo malo ante mis ojos, y me han provocado a ira, desde el día
que sus padres salieron de Egipto hasta hoy.
INTRODUCCIÓN
Hace poco le escuché a alguien esta frase o no sé
si la leí, pero me impacto muchísimo. el pueblo de Dios experimento de primera
mano los portentosos milagros que Dios dispuso que fueran hechos por mano de
Moisés para mostrar a faraón su gran poder y que al notar su impotencia
entonces diera libertad a Israel quien ya llevaba más de 400 años de esclavitud
en Egipto.
Pero Israel no fue liberada por un esclavo, Dios
preparo de antemano a uno de su pueblo para que fuese criado de forma
diferente, y entonces dispuso que la hermana de faraón encontrara a Moisés
sobre las aguas y le rescatara. Moisés fue criado como egipcio, y no como
esclavo, y luego de perderlo todo por defender a su pueblo y matar a un
egipcio, sale para vivir en el desierto por 40 años, que es donde conoce al
Señor de su pueblo y este le llama para sacar a Israel de Egipto.
DESARROLLO
Todos creeríamos que la batalla más grande fue el
enfrentamiento que Moisés tuvo con Faraón por la libertad de Israel, pero creo
que el libro de Éxodo muestra otra cosa. El enfrentamiento más grande que
Moisés tuvo que sortear fue sacar a Egipto de los israelitas.
El pueblo se había acostumbrado a tener una mentalidad
de esclavos, ya nadie se cuestionaba su lugar en Egipto y se habían
acostumbrado a depender de los egipcios a pesar de que estos los abusaran y
sometieran. Y esto sigue pasando hoy en día, el creyente sale del mundo por el
poder de Dios, y la libertad que fue pagada por nuestro Señor Jesucristo, pero
a pesar de haber salido de la esclavitud del pecado, la costumbre que ha
generado en aquella vida, sigue pesando sobre su forma de actuar y pensar.
El pueblo de Israel había conocido el poder de Dios
de primera mano al hacer tremendas señales para conseguir su libertad, pero
aunque salieron de Egipto, Egipto no salió de ellos, seguían discutiendo y
teniendo conflictos que se de desarrollan durante todo el éxodo, un día se
quejan de haber salido cuando los perseguían los egipcios con su ejército y
Dios abre el mar rojo y nuevamente muestra su poder, pero con eso no acabo todo
luego de se quejan del hambre y nuevamente quieren volver, luego de la sed, y
hasta del liderazgo de Moisés su libertador.
Así mismo actúa el pueblo de Dios. Dios les liberta
en Cristo del yugo que el pecado ponía sobre sus vidas, y cuando empiezan a
experimentar alguna contrariedad, entonces quieren volver a Egipto, volver a
ser esclavos, sin importar el precio que fue pagado por ellos.
De allí surge la cuestión, de que es más difícil
sacar a Israel de Egipto que a Egipto de Israel, pues porque a pesar de que
fueron liberados, su mente y sus emociones aún siguen conectadas con la
esclavitud, con la mentalidad de esclavo que prefiere depender, que hacer o
buscar la salida, que prefiere pelar, antes de buscar una solución, que
prefiere criticar antes de orar a Dios.
CONCLUSIÓN
Muchos
aún persisten en Egipto, siguen robando, mintiendo, engañando, pecando,
fornicando, adulterando, esclavos del pecado que domina sus vidas, (Rom
6:16 ¿Acaso no saben ustedes que, cuando se entregan a alguien para obedecerlo,
son esclavos de aquel a quien obedecen?
Claro que lo son, ya sea del pecado que lleva a la muerte, o de la
obediencia que lleva a la justicia) y esto no puede
seguir así.
La tarea que tenemos como siervos de Dios, es sacar
Egipto (el pecado, el pasado, la vieja naturaleza) de la mente y la vida de los
nuevos creyentes, sacar todo aquello que aun los liga con esa mentalidad de
esclavos que supone el pecado, para que sean verdaderamente libres y puedan
llegar a poseer la tierra prometida.
La persona cuya mente aún persiste en Egipto,
es un siervo inútil, que no da fruto y que se puede devolver en cualquier
momento.
Es necesario que Dios nos guíe para que podamos
eliminar cualquier rastro de Egipto de nuestras vidas y de la vida de aquellos
a quienes guiamos en Dios, para que puedan disfrutar de una vida rica en la
gracia y el amor divinos.
Oremos, Señor ayúdanos a sacar todo rasgo que quede
en nosotros de la esclavitud en la cual estábamos, que vayamos en pos de
aquella tierra prometida de salvación, sabiendo que implica el esfuerzo de
conquistarla por tu gracia y tu poder, amen.
wow, cuan buen mensaje, por mas de que como creyente me se la historia de Moises, nunca relacione aquella historia con la forma de vida de muchos creyentes.
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