EL
HARÁ VOLVER EL CORAZÓN DE LOS PADRES HACIA LOS HIJOS, Y EL CORAZÓN DE LOS HIJOS HACIA LOS PADRES
Malaquías
46 El hará volver el corazón de los
padres hacia los hijos, y el corazón de
los hijos hacia los padres
INTRODUCCIÓN
La
paternidad es muy importante para Dios y para el hombre, descubrirla, vivirla y
entenderla de la manera correcta puede cambiar la forma en que vemos a Dios, y
nos permitirá ir mas allá en nuestra relación con Dios.
Un
padre es un ser especial, él ha sido dispuesto por Dios para ejercer una
influencia que se nota desde la concepción, el hombre a diferencia de la mujer
tiene un cromosoma Y y uno X, mientras la mujer tiene XX, esto ha sido
estudiado durante años por la medicina moderna y una de las cosas que se han
podido determinar es que este cromosoma Y define la sexualidad del bebe. Yo
creo que tiene una influencia mayor que solo la sexualidad.
La
madre es un ser sencillamente especial, su capacidad de amar es maravillosa,
pero sin el padre la definición de familia, queda sin sustento bíblico. La
familia de hoy es una familia carente de paternidad, aun cuando el padre esté
presente en el hogar. El hombre cada día mas ha perdido el diseño divino de la
paternidad, el abandono de los hijos, la falta de amor, disciplina y entrega
por el hogar ha formado una generación sin padres, cada día es más común ver
jóvenes que a quien dan las gracias el día del padre es a su mama, quien asumió
el rol de padre y madre debido a la irresponsabilidad del padre, al abandono, o
a la muerte del cónyuge.
DESARROLLO
Una
generación sin paternidad es lo que vivimos hoy en día, y por eso el versículo
de hoy nos revela el diseño de Dios, lo que Dios quiere hacer en las familias y
sociedades que han perdido el diseño divino. Su intención es la de hacer volver
el corazón de los padres hacia los hijos, y el de los hijos a los padres,
porque?, porque están lejos el uno del otro. Los padres de hoy solo piensan en sí
mismos, su egoísmo es determinante en sus decisiones sin pensar en las implicaciones
que tienen sus comportamientos y palabras sobre las vidas de sus hijos.
Es
muy importante que todo hombre que llega a Dios vuelva a descubrir la
paternidad, pero desde el diseño divino, no bajo sus propios prejuicios. Padre
no es aquel que engendra una criatura, sino aquel que la guía, enseña,
disciplina y ama en su desarrollo. La figura del padre es diferente única como
la de la madre, pero su disposición divina es distinta porque ella implica que
el corazón del hijo estará en el lugar correcto en el que debe estar. Un hijo
que no ha vuelto su corazón al padre vive desubicado, sin propósito, sin
sentido.
Por
eso cuando el hombre vuelve a Dios una de las cosas más importantes que sucede
es que la paternidad carente, indiferente o insulsa que se experimentó, empieza
a ser trasformada por el diseño divino del Padre celestial, porque el corazón
del Padre se ha vuelto hacia nosotros, y ahora nuestros corazones responden a
ese amor, volviéndose hacia él.
CONCLUSIÓN
Un
hijo necesita de un padre, puede que no lo tengas a tu lado porque murió, te
abandono, o nunca fue ese padre ejemplar, entonces es tiempo de dejar de mirar
a tu padre terrenal y mirar a Dios, tu Padre celestial, y suplir en el todas
las carencias que sufriste.
Si
lo tuviste y siguió el ejemplo de Dios, entonces sabrás de lo que te hablo, sabrás
que tu vida tiene un sentido claro de propósito, que solo es visible cuando la
paternidad hace su aparición en nuestras vidas y toca nuestros corazones.
Necesitas
volver tu corazón a tu padre celestial, para que puedas ver a tu padre como
Dios lo ve, y cuando lo hagas podrás amarlo aunque nunca haya aparecido, aunque
el dolor por su rechazo y abandono te hayan debilitado; podrás perdonar, amar y
honrar a ese ser maravilloso que Dios dispuso en lo terrenal para darte vida.
Padre,
ayúdanos a reconocer en ti las falencias que tenemos como padres, a
perfeccionar bajo tu guía la paternidad que tanto necesita esta sociedad,
gracias por volver tu corazón hacia nosotros, y ayúdanos a volver nuestros
corazones hacia ti cada día, para seguir tu consejo, guía y amor, amen.
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