miércoles, 26 de diciembre de 2012

ESTUDIO BIBLICO ROMANOS 4



ESTUDIO BIBLICO
Por: Camilo Sastoque

Rom 4:1  Entonces,  ¿qué diremos en el caso de nuestro antepasado Abraham?* para complementar su disertación o explicación sobre la fe hace referencia al padre de la fe, Abraham.

Rom 4:2  En realidad,  si Abraham hubiera sido justificado por las obras,  habría tenido de qué jactarse,  pero no delante de Dios. No tendría Abraham de que jactarse para con nosotros? De su obediencia?, de escuchar a Dios? Pero ni el mismo lo hizo delante de Dios.

Rom 4:3  Pues  ¿qué dice la Escritura?  "Creyó Abraham a Dios,  y esto se le tomó en cuenta como justicia." La escritura misma menciona que Abraham tuvo que confiar en Dios y creer que existía para seguirle y esto le justifico, no su obra, sino su fe, fue la que lo justifico. La fe es un estado o cualidad de conexión con Dios que permite rebajar o reducir el alma (su orgullo, confianza en sí mismo, vanidad, dominio, ego, arrogancia) del hombre al estado de sujeción que se encontraba en la creación, para que de nuevo el espíritu que está en comunión con Dios pueda vivir y manifestarle a Él en nosotros.

Rom 4:4  Ahora bien,  cuando alguien trabaja,  no se le toma en cuenta el salario como un favor sino como una deuda. El dinero que se le paga a alguien por un trabajo no es ningún regalo ni un favor, sino algo que se le debe, es algo a lo cual tiene derecho y se le debe. Esto para hacer referencia a aquellos que obran, entonces pueden participar de los derechos de su justo pago, mas no de la gracia y la justificación que son las que salvan.

Rom 4:5  Sin embargo,  al que no trabaja,  sino que cree en el que justifica al malvado,  se le toma en cuenta la fe como justicia. Aquí el que no trabaja es aquel que ha dejado de confiar en que Dios lo aceptara por sus obras, sino que más bien pone su confianza en Cristo, esta fe se le toma como justicia (haciéndole justo ante los ojos de Dios).

Rom 4:6  David dice lo mismo cuando habla de la dicha de aquel a quien Dios le atribuye justicia sin la mediación de las obras: Sigue su explicación mostrando como en las escrituras como autoridad y aquellos hombres de Dios que los judíos mismos exaltaban conocían esta verdad, que para ellos no era evidente.

Rom 4:7  "¡Dichosos aquellos a quienes se les perdonan las transgresiones y se les cubren los pecados!

Rom 4:8  ¡Dichoso aquel cuyo pecado el Señor no tomará en cuenta!"* (Psa_32:1-2) David declaro proféticamente lo que habría de ocurrir con la venida de Cristo, su crucifixión y su resurrección, dichosos quienes nos encontramos en estos tiempos en donde la gracia y el favor de Dios vienen por fe, y recibimos el perdón de Dios, la sangre que cubre multitud de pecados, y el hecho de que ese pecado no será tomado en cuenta en el juicio venidero.

Rom 4:9  ¿Acaso se ha reservado esta dicha sólo para los que están circuncidados?  ¿Acaso no es también para los gentiles?* Hemos dicho que a Abraham se le tomó en cuenta la fe como justicia. Acaso Dios ha reservado la dicha de la salvación solo para los judíos circuncidados?, no nos muestra la escritura la realidad de la justificación, donde la fe perfecciona las obras y nos acerca a Dios? Sin importar nuestro origen o costumbre?

Rom 4:10  ¿Bajo qué circunstancias sucedió esto?  ¿Fue antes o después de ser circuncidado?  ¡Antes,  y no después! Pablo continua señalando el hecho de que la circuncisión no es más que una mera señal de lo que haría el espíritu en nuestra naturaleza carnal y almática al circuncidar nuestra mente y corazón para recibir lo que proviene de Dios.

Rom 4:11  Es más,  cuando todavía no estaba circuncidado,  recibió la señal de la circuncisión como sello de la justicia que se le había tomado en cuenta por la fe.  Por tanto,  Abraham es padre de todos los que creen,  aunque no hayan sido circuncidados,  y a éstos se les toma en cuenta su fe como justicia. Dios toma en cuenta hasta el último detalle, Abraham había sido justificado por la fe, mucho antes de que recibiera por señal la circuncisión como sello de la justicia tomada por la fe. De allí que Abraham sea el padre de la fe, y padre de todos los que creen y aunque no hayan recibido la señal de la circuncisión a estos la fe en Cristo se les cuenta como justicia.

Rom 4:12  Y también es padre de aquellos que,  además de haber sido circuncidados,  siguen las huellas de nuestro padre Abraham,  quien creyó cuando todavía era incircunciso. Aquí hace referencia a aquellos que a pesar de haber sido circuncidados siguen por fe al hijo de Dios y que no toman la seguridad de su salvación por la señal sino mediante la obediencia a la fe.

Rom 4:13  En efecto,  no fue mediante la ley como Abraham y su descendencia recibieron la promesa de que él sería heredero del mundo,  sino mediante la fe,  la cual se le tomó en cuenta como justicia. Nos muestra que aun el cumplimiento de las promesas como la que recibió Abraham se recibe mediante la fe que opera en los que siendo justificados por Cristo obran y toman acción más no por la ley.

Rom 4:14  Porque si los que viven por la ley fueran los herederos,  entonces la fe no tendría ya ningún valor y la promesa no serviría de nada. Porque si la ley determinara los herederos, nadie podría recibir las promesas, ya ninguno por medio de la ley pudo mantenerse alejado del pecado, así que la fe dispone un mejor camino, no más sencillo, pero si agrega un valor más profundo al sacrificio y resurrección que operan en nuestro ser para creer.

Rom 4:15  La ley,  en efecto,  acarrea castigo.  Pero donde no hay ley,  tampoco hay transgresión. La ley como tal en si misma trae consigo castigo, así que la ley en operación conduce al castigo, pero donde la ley ha sido superada por la fe, ya no hay transgresión, estos versículos explican la implicación legal en el reino de la ley, pero también explican como la fe funciona en efecto con la ley.

Rom 4:16  Por eso la promesa viene por la fe,  a fin de que por la gracia quede garantizada para toda la descendencia de Abraham;  esta promesa no es sólo para los que son de la ley sino para los que son también de la fe de Abraham,  quien es el padre que tenemos en común de allí que la promesa no opere en la ley sino por la fe, pues por la ley no habría posibilidad de recibirla, pero en la fe la promesas vienen a consecuencia de esta fe que opera en nuestros corazones para salvación y que la gracia sea garantizada para lo que creen. Abraham al creer y confiar en Dios se traspasó las barreras del tiempo y espacio que dividen la fe natural de la sobrenatural, y lo convirtió en padre no solo de Isaac, sino de todos aquellos que por fe reciben al Señor como su salvador, así fueron justificados por la justicia de Dios que es Cristo.

Rom 4:17  delante de Dios,  tal como está escrito:  "Te he hecho padre de muchas naciones."* Así que Abraham creyó en el Dios que da vida a los muertos y que llama las cosas que no son como si ya existieran. Aquí se hace una declaración extraordinaria de Dios, quien da vida a los muertos, con el fin de expresar su naturaleza de dador, también como aquel que da vida espiritual a los que no la poseen, y que llama las cosas que no son, que no existen en el plano natural, como si ya fueran un hecho, reales en un presente. La fe nos comunica con ese estado de Dios en el cual las cosas que no son o que aún no existen en la fe, ya están hechas, solo esperan las acciones decididas para que puedan ser manifestadas en la realidad consciente del ser.

Rom 4:18  Contra toda esperanza,  Abraham creyó y esperó,  y de este modo llegó a ser padre de muchas naciones,  tal como se le había dicho:  "Así de numerosa será tu descendencia."* Al creer Abraham lo que Dios le dijo, puso su fe en acción para que esta operara más allá de su entendimiento llevándolo a esperar una promesa mayor que la de recibir un hijo natural, sino que llego a ser padre de multitudes de naciones, conforme a la palabra.

Rom 4:19  Su fe no flaqueó,  aunque reconocía que su cuerpo estaba como muerto,  pues ya tenía unos cien años, y que también estaba muerta la matriz de Sara. Esta fe, como capacidad sobrenatural de Dios, le permitió a Abraham que aunque estaba consciente de lo difícil o imposible que sería por su estado natural, poder continuar creyendo aunque todo pareciera contrario en lo natural.

Rom 4:20  Ante la promesa de Dios no vaciló como un incrédulo,  sino que se reafirmó en su fe y dio gloria a Dios, ante el desafío implantado por la promesa en la vida de Abraham, el no vacilo, sino que se mantuvo firme en la fe, con lo cual glorifico a Dios, pues la ley no da gloria a Dios, sino hasta cuando esta ópera en el creyente por la fe.

Rom 4:21  plenamente convencido de que Dios tenía poder para cumplir lo que había prometido. Abraham sin verle, estuvo plenamente convencido de que Dios podía cumplir lo que le había prometido, aun cuando pareciera que no se daría.

Rom 4:22  Por eso se le tomó en cuenta su fe como justicia. Es allí donde su fe es reafirmada y tomada en cuenta, no es la fe que genera resultados siempre, o la que obtiene con frecuencia una respuesta a la oración la que da gloria a Dios, la fe que da verdadera gloria a Dios, es aquella que probada bajo el fuego y la inclemencia de las circunstancias adversas se mantiene firme, aunque la esperanza parezca perdida por completo. Allí se forma la verdadera fe.

Rom 4:23  Y esto de que  "se le tomó en cuenta"  no se escribió sólo para Abraham,

Rom 4:24  sino también para nosotros.  Dios tomará en cuenta nuestra fe como justicia,  pues creemos en aquel que levantó de entre los muertos a Jesús nuestro Señor. este versículo de la escritura no solo fue escrito en la palabra para Abraham, pues aunque en el contexto parezca que estaba dirigido a Él, Pablo nos revela el verdadero sentido, al revelarnos que nuestra fe en Cristo es tomada como justicia para Dios.

Rom 4:25  Él fue entregado a la muerte por nuestros pecados,  y resucitó para nuestra justificación. La muerte que vivió Jesús representa la muerte en la que vivíamos espiritualmente  apartados de Dios por nuestros pecados, ya que El mismo se hizo maldición por nuestros pecados y los llevo en la cruz, para podernos dar vida e su resurrección en la cual se completó la muerte de nuestro yo y la de nuestra naturaleza de pecado, la cual se lleva a cabo durante nuestra existencia luego de recibir la justificación en Cristo, al recibirle por fe y tomar su fe como la nuestra.

9 comentarios:

  1. muy buena! interpretación me gusto muchas bendiciones!

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  2. Mucha gracias , por el estudio de Romanos, Dios los bendiga abundantemente,un abrazo.

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  3. Dios te bendiga siempre mi hermano estoy agradecida de Dios por la sabiduría que te ha dado y la comparte con nosotros a través de este medio. He aprendido mucho de los estudios que nos regalado. Un fuerte abrazo.

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  4. Buenas noches amado. Muchas gracias por este articulo. El Señor me lo ha mostrado en un momento en el que pareciera que los que peor actuan, y ni quieren saber nada con Dios, prosperan en lo que hacen, Dios justifica al malvado...?.. no logro comprender. Si por el hecho de que no obren, de acuerdo a la voluntad de Dios, cómo pueden ser justificados? Asi solo con la fe En Jesus basta, sin importar que seamos malvados?. Ayudeme por favor a comprenderlo, abro mi corazon. Muchas gracias desde ya. Un abrazo

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  5. Apreciado hermano, este capitulo nos recuerda que la justificacion viene luego de la fe, y la fe nos compele a obrar bien. Siendo malvados fuimos justificados por la fe en Jesucristo, luego de arrepentirnos. Nadie que persista en la maldad en verdad se ha arrepentido por lo cual no habria justificación. Bendiciones

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  6. Muy agradecido Camilo por este espacio donde se explica y da luz a las Escrituras. Hacen falta sitios como éste en habla hispana. Dios lo siga iluminando con la ayuda del Espíritu Santo en el nombre de Jesús. Gracias.

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  7. Muy buena la pude entender bendiciones

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  8. Dios el Padre entrego a su Hijo para que el pagara nuestra culpa al morir en la cruz; cuando el Padre resucito a su Hijo, lo hizo por que acepto su sacrificio, por nuestros pecados( ron 4:24,25) somos justificados al aceptar esta gran verdad.

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Gracias por compartir con nosotros. Bendiciones