domingo, 24 de mayo de 2015

PREDICA DOMINICAL - LA VERDADERA OBEDIENCIA


LA VERDADERA OBEDIENCIA

PASAJE
2Co 9:13  En efecto,  al recibir esta demostración de servicio,  ellos alabarán a Dios por la obediencia con que ustedes acompañan la confesión del evangelio de Cristo,  y por su generosa solidaridad con ellos y con todos.

INTRODUCCIÓN

El mundo vive en total desobediencia para con Dios, muchos aun dicen amar a Dios y le desobedecen flagrantemente, viven sus vidas dando rienda suelta a sus pasiones y deseos. Dentro de la misma iglesia muchos viven igualmente que es lo más triste, parece que desconocen que el amor a Dios se evidencia mediante la obediencia a sus mandamientos (2  Juan 1:10).
El mundo eleva y exalta la desobediencia, la obediencia es menospreciada como debilidad de carácter, como algo sin valor, pero el mundo y la iglesia desconocen la importancia de la obediencia en la vida del hombre. Con la obediencia se reconstruye el ser del hombre y se instituye la verdad en su corazón, nadie en desobediencia es capaz de conocer por sí mismo la verdad, en cambio cuando vivimos sujetos en obediencia a Dios podemos conocerle.

DESARROLLO

Pero que es la obediencia de la que hablan las escrituras?, es simplemente obedecer órdenes?, obedecer a nuestras autoridades? O es más que eso?. La obediencia parece acompañar de manera natural la obra del evangelio en nuestras vidas, pero cómo es esto posible? Si poco o nada nos hemos hecho para lograrlo?, la obediencia de la que hablan las escrituras es un estado de inocencia, aquel que perdimos en el Edén.
Eva convenció a Adán para que probaran el fruto prohibido, su desobediencia surgió cuando sus mentes fueron confrontadas por la posibilidad del conocimiento, todo ser humano al igual que Adán y Eva han pasado por este momento que se instauro en el ADN de nuestro ser y nos impulsa a ir por el conocimiento, pero el saber es una barrera para la sabiduría. La serpiente corrompió la inocencia de estos seres despertando en ellos la insaciabilidad del saber.
A través de la sabiduría del mundo es imposible conocer la verdad, ella parece oculta y misteriosa a los ojos de los conocedores, de los intelectuales por eso muchos de ellos son ateos o agnósticos. De allí urge la enseñanza de cristo de que nadie puede entrar al Reino de los cielos si no es como un niño (Marcos 10:15). 
Cuando conocemos la verdad ocurre lo que menciona el versículo del comienzo, empezamos de manera natural a obedecer aunque antes nos parecía imposible, nuestra confesión de la verdad viene acompañado con ello. Por eso un falso creyente no puede ser obediente, siempre será piedra de tropiezo a la verdad, de manera que la obediencia surge solo cuando somos expuestos a la verdad y recuperamos la inocencia perdida.
La obediencia que se nos presenta en las escrituras no viene por someterse a una religión, o vivir de manera religiosa, o por cumplir con lo que la ley estipula, esta obediencia trasciende todo ello, para recuperar esa inocencia que solo pudo retornar a través de Cristo, pues solo el deshizo lo que había hecho Adán. Vivimos en una sociedad religiosa, entendida e ilustrada pero ello no ha contribuido a mejorar nuestra condición, vivimos en un estado de mentes corruptas, astutas, listas pero corruptas y eso no va a mejorar a menos que por la gracia divina decidamos abandonar todo conocimiento y ver la vida tal cual Dios nos la presenta, aceptando la realidad tal como es.

CONCLUSIÓN

Si meditamos con atención en las escrituras llegaremos a la misma conclusión, es imposible conocer a Dios a través del conocimiento limitado del hombre. Si la evolución o el big bang fueran verdades absolutas ellas generarían por si solas saciedad en el corazón del hombre que busca. Pero como no lo son la búsqueda sigue y continuara por mucho tiempo. Solo aquel que se expone a la verdad por la gracia divina, puede reconocer lo equivocado que estaba, la insuficiencia del conocimiento y la necesidad de la verdad, pero ahora lo hace a través de la inocencia restaurada en su ser.
Alguien que ha sido restaurado en su inocencia interior ahora percibe la verdad, puede entenderla y vivir por ella. En la desobediencia el corazón del hombre se aparta de la verdad, mientras en la obediencia el corazón se desarrolla en Dios y puede comprender aquello que antes parecía imposible, locura.

Oremos, Señor te pedimos que restaures en nosotros la inocencia que perdimos al ir en búsqueda del conocimiento falso, que podamos ser obedientes a tu voluntad aceptándola sin quejas ni desobediencia, permítenos adentrarnos en ti para conocerte de manera verdadera, en el nombre de Jesús, amén.

Por: Camilo A. Sastoque M.
Ministerio Unidad de la Fe

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por compartir con nosotros. Bendiciones