ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe
Act 21:1 Después de
separarnos de ellos, zarpamos y
navegamos directamente a Cos. Al día
siguiente fuimos a Rodas, y de allí a Pátara.
Act 21:2 Como encontramos un barco que iba para
Fenicia, subimos a bordo y zarpamos.
Act 21:3 Después de
avistar Chipre y de pasar al sur de la isla,
navegamos hacia Siria y llegamos a Tiro,
donde el barco tenía que descargar.
Los viajes de Pablo implicaban largos
trayectos a pie, en barco lo que genera un gran desgaste y cansancio, pero
Pablo no se amilana ante la tarea, siguiendo la guía del Espíritu Santo.
Act 21:4 Allí
encontramos a los discípulos y nos quedamos con ellos siete días. Ellos, por medio del Espíritu, exhortaron a
Pablo a que no subiera a Jerusalén.
Sus viajes también estaban plagados de
encuentros con discípulos quienes seguramente se regocijaban al encontrar a su
apóstol en el ejercicio de su llamado, así mismo él cómo su maestro. Los
discípulos proféticamente por medio del Espíritu Santo exhortaron a Pablo para
que no subiera Jerusalén pues era una clara advertencia de lo que le esperaba
al apóstol allí.
Act 21:5 Pero al cabo de algunos días, partimos y
continuamos nuestro viaje. Todos los
discípulos, incluso las mujeres y los
niños, nos acompañaron hasta las afueras
de la ciudad, y allí en la playa nos
arrodillamos y oramos.
Antes de viajar o hacer algo la iglesia
siempre oraba, pues encomendaba sus planes a Dios y confiaba en su voluntad
para realizarlos. Esto muestra un alto grado de dependencia para con Dios.
Act 21:6 Luego de despedirnos, subimos a bordo y ellos regresaron a sus
hogares.
Act 21:7 Nosotros continuamos nuestro viaje en barco
desde Tiro y arribamos a Tolemaida,
donde saludamos a los hermanos y nos quedamos con ellos un día.
Era común que Pablo se quedara junto a
otros discípulos que seguramente querían aprender más de él. Así que le pedían
que se quedara algunos días con ellos para compartir y aprender.
Act 21:8 Al día
siguiente salimos y llegamos a Cesarea,
y nos hospedamos en casa de Felipe el evangelista, que era uno de los siete
Act 21:9 y tenía
cuatro hijas solteras que profetizaban.
Aquí encontramos a Felipe quien se ha
ganado por su empeño en evangelizar a toda esta región el título de
evangelista. También es mencionado como uno de los siete, algunos creen que es
una referencia a Hechos 6:5 como uno de los que ayudaron, otros creen que hace
alusión a los discípulos que aun vivían y otros que era una referencia al
número de ancianos de esta región. Además, se nos comenta que tenía ya para
esos días cuatro hijas que profetizaban, una clara evidencia de la continuidad
del don profético en medio de la iglesia algo que no todos aceptan.
Act 21:10 Llevábamos
allí varios días, cuando bajó de Judea
un profeta llamado Ágabo.
Ahora nos encontramos con otro punto
bien interesante, la aparición de un profeta. Hay una gran discusión por parte
de algunas denominaciones sobre el si los ministerios de la iglesia siguieron o
terminaron con los apóstoles y la primera iglesia. Este es otro punto a favor
de la continuidad de los ministerios, pues podemos encontrar a un personaje
cuyo ministerio era el profético y por el cual era reconocido por todos, así
como hace un momento encontramos a Felipe siendo llamado el evangelista por su
ministerio para con la iglesia.
Act 21:11 Éste
vino a vernos y, tomando el cinturón de
Pablo, se ató con él de pies y manos, y dijo:
--Así dice el Espíritu Santo: 'De
esta manera atarán los judíos de Jerusalén al dueño de este cinturón, y lo entregarán en manos de los gentiles.'
El hombre que se llamaba Ágabo y era
conocido como profeta por la iglesia expone por revelación divina el futuro de
Pablo, quien habría de sufrir cárceles y ataduras por el nombre de Cristo. Esta
profecía pudo ser corroborada como verdadera por la iglesia posterior a su
entrega, lo que nos muestra que la profecía es un don vivo dentro de la iglesia
neotestamentaria, pero que se daba bajo la guía del Espíritu Santo y con la
seriedad que ello implicaba. Recordemos que la profecía no le dice que debe
hacer, solo le revela lo que sucederá si sube a Jerusalén, así que la decisión
sigue siendo de Pablo de hacerlo o no, de modo que la profecía jamás debe
manipular el libre albedrio de la persona u obligarle a hacer algo. Esta es una
profecía que revela el futuro inmediato de Pablo, pero la profecía también
tenía la intensión de exhortarle para que viera claramente las consecuencias de
seguir con su empeño de dar a conocer la verdad.
Act 21:12 Al oír
esto, nosotros y los de aquel lugar le
rogamos a Pablo que no subiera a Jerusalén.
Sabiendo lo que sucedería por revelación
divina la iglesia allí reunida junto a Pablo le pide que no suba a Jerusalén,
pues sabían que Pablo tenía la firme intención de ir a ese lugar sin importar
las consecuencias.
Act 21:13 --¿Por
qué lloran? ¡Me parten el alma! --respondió Pablo--. Por el nombre del Señor Jesús estoy dispuesto
no sólo a ser atado sino también a morir en Jerusalén.
Fue tal el impacto de la profecía que
soltó Ágabo que muchos de los que estaban allí y amaban a Pablo no querían
verle sufrir tal humillación y desolador futuro. A lo que Pablo responde que se
siente abrumado ante su reacción. Mas él tenía la clara convicción de hacer lo
que Dios le había enviado a hacer. L disposición de Pablo para ir hasta las
últimas consecuencias nos muestra la firme convicción de Pablo de entregar su
vida por causa de su amor por Cristo.
Act 21:14 Como no se dejaba convencer, desistimos exclamando: --¡Que se
haga la voluntad del Señor!
Nadie pudo convencer la férrea
convicción de Pablo a pesar de su duro futuro por enfrentar. Así que decidieron
dejar el asunto bajo la voluntad de Dios. Nadie quiere que un hermano en la fe
sufra y menos uno cercano, por lo que debemos confiar como hombres de fe en la
voluntad buena, perfecta y agradable de Dios sin importar lo que nuestro
hermano(a) pueda llegar a tener que enfrentar.
Act 21:15 Después de
esto, acabamos los preparativos y
subimos a Jerusalén.
Así que terminado el asunto en Cesarea y
a pesar de las advertencias proféticas se dispusieron para enfrentar lo
inevitable. Muchas veces Dios permite que conozcamos nuestro futuro por sueños
y profecía para que sepamos a que atenernos y no vernos confundidos ante la
prueba de nuestra fe. Así que debemos prestar atención a las señales por las
que Dios quiere hablarnos de lo que ha de acontecer para seguir firmes en
nuestro propósito de adorarle siempre.
Act 21:16 Algunos de los discípulos de Cesarea nos acompañaron y nos llevaron a la
casa de Mnasón, donde íbamos a
alojarnos. Éste era de Chipre, y uno de los primeros discípulos.
El hermano Mnasón es mencionado como uno
de los primeros discípulos, aunque no sabemos si de Cristo, de Pablo o de algún
apóstol en particular, algunos se inclinan a pensar que fue uno de los primeros
convertidos de Pablo. Quien termina por alojarle en Jerusalén y brindarle lo
necesario para su estadía junto a los discípulos que le acompañan. La iglesia
vivía en la práctica la hospitalidad, pues siempre estaban atentos a las
necesidades de sus líderes, apóstoles y maestros para brindarles lo que
estuviera a su alcance para ayudarles en su propósito.
Act 21:17 Cuando llegamos a Jerusalén, los
creyentes nos recibieron calurosamente.
La koinonia (comunión) entre los
creyentes era más que evidente, mostrándose siempre fervorosa en el amor al
prójimo.
Act 21:18 Al día
siguiente Pablo fue con nosotros a ver a Jacobo, y todos los ancianos estaban presentes.
Pablo se encuentra con el apóstol Jacobo
uno de los que eran considerados columnas de la iglesia en Jerusalén, junto a
Pedro y Juan (Gal. 2:9). En la reunión también podemos ver que no solo estaba él
sino que le acompañaban todos los ancianos o referentes de la fe en Jerusalén.
La iglesia tempranamente empieza a conformarse como una estructura que se
cimentaba en los ancianos (lideres firmes y de testimonio que conocían la
palabra y el mensaje predicado por los apóstoles), quienes luego recibirían el
liderazgo de los apóstoles para dirigir y guiar a la iglesia.
Act 21:19 Después de
saludarlos, Pablo les relató
detalladamente lo que Dios había hecho entre los gentiles por medio de su
ministerio.
Pablo les comparte a sus hermanos en la
fe lo que Dios ha hecho por medio de su ministerio, lo que nos recuerda que
Pablo en ningún momento se toma alguna atribución por lo que ha hecho, pues
entiende que todo es por la gracia de Dios. Obras como sanidades, evangelismo,
enseñanza y poder de Dios fueron evidentes a todos durante todo su ministerio,
así que quienes estaba con el fueron testigos y no le permitirían llegar a
mentir o autoexaltarse más allá de la verdad.
Act 21:20 Al oírlo, alabaron a Dios. Luego le dijeron a Pablo: "Ya ves,
hermano, cuántos miles de judíos
han creído, y todos ellos siguen aferrados
a la ley.
Escuchar a Pablo debió ser algo
sorprendente debido a la cantidad de historias y relatos de sus viajes. A lo
que sigue la intervención de los hermanos que se hallaban en Jerusalén quienes
le comentan que todos los convertidos del judaísmo aún persisten en el apego
que tienen de la ley y sus costumbres.
Act 21:21 Ahora bien,
han oído decir que tú enseñas
que se aparten de Moisés todos los judíos que viven entre los gentiles. Les recomiendas que no circunciden a sus
hijos ni vivan según nuestras costumbres.
Al parecer a oídos de ellos habían
llegado las enseñanzas de Pablo quien según ellos les recomendaba a los nuevos
convertidos judíos apartarse de las enseñanzas de Moisés no siguiendo el ritual
de la circuncisión, ni vivir en las costumbres judías.
Act 21:22 ¿Qué
vamos a hacer? Sin duda se van a enterar
de que has llegado.
Estos creyentes parecen más interesados
en agradar a los creyentes judíos que estaba n a favor de que los nuevos
convertidos siguieran todas las costumbres judías. Algo que luego fue aclarado
en una discusión entre el apóstol Pedro y Pablo.
Act 21:23 Por eso,
será mejor que sigas nuestro
consejo. Hay aquí entre nosotros cuatro
hombres que tienen que cumplir un voto.
Tratando de que Pablo no quedara
expuesto ante los judíos que defendían la postura judaizante, le envían a
llevar a cuatro hombres para que cumplan un voto que pertenecía claramente a
las tradiciones judías, como una forma de congraciarse con ellos.
Act 21:24 Llévatelos, toma parte en sus ritos de purificación y
paga los gastos que corresponden al voto de rasurarse la cabeza. Así todos sabrán que no son ciertos esos
informes acerca de ti, sino que tú también
vives en obediencia a la ley.
Aquí terminamos por comprender el
propósito por el que Pablo fue enviado a cumplir con un voto tradicional judío,
para que los que habían oído que Pablo no seguía las tradiciones pensaran que
todo eso era falso.
Act 21:25 En cuanto a los creyentes gentiles, ya les hemos comunicado por escrito nuestra
decisión de que se abstengan de
lo sacrificado a los ídolos, de
sangre, de la carne de animales
estrangulados y de la inmoralidad sexual."
Parece ser que unas enseñanzas eran para
judíos convertidos y otras para los gentiles convertidos, pues a los judíos se
quería que continuaran con sus tradiciones y lo ordenado por la ley. No se nos
deja saber hasta qué punto Pablo estuvo de acuerdo con ellos o no, pero lo
cierto es que termino por hacerlo, aunque sabia y entendía que ya no estaba
bajo la ley sino bajo la gracia. Es probable que la explicación a obedecer este
mandato de la iglesia fuera por lo que escribió luego a los Corintios, miremos:
1 Corintios
9:20: Me
he hecho a los judíos como judío, para ganar a los judíos; a los que están
sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la ley) como sujeto a la ley, para
ganar a los que están sujetos a la ley. La iglesia en Jerusalén parece haber establecido un código para los
creyentes gentiles obligándoles a estos a abstenerse de lo sacrificado a los
ídolos, de todo aquello que contuviera sangre, de comer de aquellos animales
que hubieran muerto por estrangulación, y los comportamientos sexuales que se
apartaban de la moral judía.
Act 21:26 Al día
siguiente Pablo se llevó a los hombres y se purificó con ellos. Luego entró en el templo para dar aviso de la
fecha en que vencería el plazo de la purificación y se haría la ofrenda por
cada uno de ellos.
Como hombre sujeto a la autoridad
eclesial Pablo lleva a estos hombres para que cumplan sus rituales de
purificación en el templo, algo que seguramente sabia era osado debido a su
estatus de convertido que todos ya sabían.
Act 21:27 Cuando estaban a punto de cumplirse los siete
días,
unos judíos de la provincia de Asia vieron a Pablo en el templo. Alborotaron a toda la multitud y le echaron
mano,
Act 21:28 gritando:
"¡Israelitas! ¡Ayúdennos!
Éste es el individuo que anda por todas partes enseñando a toda la gente
contra nuestro pueblo, nuestra ley y
este lugar. Además, hasta ha metido a unos griegos en el
templo, y ha profanado este lugar
santo."
El ritual duraba siete días en el templo
lo cual terminó por exponerlo a unos judíos que le reconocieron y de inmediato
alborotaron el lugar para echarle mano. Sus argumentos en contra de Pablo eran
que este hombre se había convertido en un instigador en contra del pueblo
judío, así como alguien que había profanado el templo al entrar a este con
griegos, cosa que era totalmente falsa.
Act 21:29 Ya antes habían
visto en la ciudad a Trófimo el efesio en compañía de Pablo, y suponían que Pablo lo había metido en el
templo.
Todo porque habían visto a Pablo junto a
Trófimo un hombre de Éfeso que le acompañaba todo el tiempo, por lo que
suponían que también lo había metido al templo, lo cual no era cierto de
ninguna manera.
Act 21:30 Toda la ciudad se alborotó. La gente se
precipitó en masa, agarró a Pablo y lo
sacó del templo a rastras, e
inmediatamente se cerraron las puertas.
Tal fue lo acontecido que toda la ciudad
sufrió el alboroto porque todos se precipitaron en masa para sacar a Pablo del
templo.
Act 21:31 Estaban por matarlo, cuando se le informó al comandante del batallón romano que toda la ciudad
de Jerusalén estaba amotinada.
Act 21:32 En seguida tomó
algunos centuriones con sus tropas, y
bajó corriendo hacia la multitud. Al ver
al comandante y a sus soldados, los
amotinados dejaron de golpear a Pablo.
Pablo recibió tal golpiza que el
escritor menciona que estuvieron por matarle si no es porque llega el
comandante romano del batallón junto con sus soldados.
Act 21:33 El comandante se abrió paso, lo
arrestó y ordenó que lo sujetaran con dos cadenas. Luego preguntó quién era y qué había hecho.
Act 21:34 Entre la multitud cada uno gritaba una cosa
distinta. Como
el comandante no pudo averiguar la verdad a causa del alboroto, mandó que
condujeran a Pablo al cuartel.
Act 21:35 Cuando Pablo llegó a las gradas,
los soldados tuvieron que llevárselo en vilo debido a la violencia de la
turba.
Act 21:36 El pueblo en masa iba detrás gritando:
"¡Que lo maten!"
El punto alcanzo tal nivel de violencia
que la gente seguía a Pablo para que lo mataran los romanos, quienes al no
saber cuáles eran los verdaderos cargos por los que lo querían matar se lo
llevaron al cuartel.
Act 21:37 Cuando los soldados estaban a punto de
meterlo en el cuartel, Pablo le preguntó al comandante:
--¿Me permite decirle algo?
--¿Hablas griego? --replicó el
comandante--.
Act 21:38 ¿No eres el
egipcio que hace algún tiempo
provocó una rebelión y llevó al desierto a cuatro mil guerrilleros?
Act 21:39 --No,
yo soy judío, natural de Tarso, una ciudad muy importante de Cilicia --le
respondió Pablo--. Por favor, permítame hablarle al pueblo.
Act 21:40 Con el permiso del comandante, Pablo se puso de pie en las gradas e hizo una
señal con la mano a la multitud. Cuando todos guardaron silencio, les dijo en arameo:
Al recuperarse de la golpiza Pablo pudo
hablar con el comandante quien descubre que este hombre habla griego y no es
quien se imaginaba, un rebelde egipcio guerrillero, por lo que le pidió la
oportunidad de poder hablar frente a la multitud para hablar en su defensa. Es
interesante notar que fueron los romanos quienes protegieron la vida de Pablo
impidiéndoles a los judíos matarle, a veces Dios usa a nuestro adversario para
hacer cumplir su propósito.