Páginas

domingo, 7 de agosto de 2016

PREDICA DOMINICAL - NO TE QUEDES CON LA LETRA DE LA LEY, QUÉDATE CON EL ESPÍRITU DE LA LEY

PREDICA DOMINICAL
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

NO TE QUEDES CON LA LETRA DE LA LEY, QUÉDATE CON EL ESPÍRITU DE LA LEY

Rom 7:6 Pero ahora, al morir a lo que nos tenía subyugados, hemos quedado libres de la ley, a fin de servir a Dios con el nuevo poder que nos da el Espíritu, y no por medio del antiguo mandamiento escrito.

INTRODUCCIÓN

Cada vez que estudio las escrituras y que leo más y más libros, tengo que ser frecuentemente confrontado con una verdad, me quedo con la letra o sigo al Espíritu de la ley. Puede que no comprendas de lo que te estoy hablando, pero es algo que toda persona que se dedica al estudio acucioso de las escrituras puede llegar a vivir.

El pueblo judío en tiempos de Jesús se había aprendido a quedar con la letra de la ley, pero en sus corazones no había cabida para el Espíritu de la ley, ellos se habían quedado en la formalidad del cumplimiento de las normas que les habían impuesto sus maestros espirituales, pero habían dejado de lado la verdadera intensión de la ley de Dios.
Por eso cuando Jesús llega a la tierra, su mayor conflicto es con los fariseos religiosos que aunque conocían la ley con su mente, no percibían en su corazón el Espíritu de Dios que les movía a ella.

DESARROLLO

El sentido judío del aprendizaje o de su teología es la práctica de la verdad, por eso era mas fácil para algunos quedarse con la letra de la ley y no con su Espíritu. Porque si guardas la letra ella te dará la falsa impresión de que lo cumples todo, mientras que si miras en tu interior tu conciencia te hará caer en cuenta de la verdad, que mientes y te engañas a ti mismo. Pero quien se queda con la letra, solo va a la superficie y no va a lo profundo, se deja guiar tan solo por lo exterior. Y lo exterior es tan falso, tan aparente, todos podemos dar apariencia de bondad, pero pocos son los que la ponen por obra, sencillamente porque para ponerla en práctica ella debe habitar en nosotros.


Si guardas el Espíritu de la ley no estarás bajo la letra de la ley, porque este es un pacto que se ha perfeccionado para dejar de ser algo externo, para volverse al interior del hombre y transformarlo todo desde allí.
Las escrituras dicen:
Salmos 37:31 La *ley de Dios está en su corazón,
 y sus pies jamás resbalan.
Gal 5:18 Pero si los guía el Espíritu, no están bajo la ley.
Rom 2:15 mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos,
Todos estos versículos nos hablan de una ley escrita en nuestro corazón que va al interior del hombre para que no resbalemos en el engaño y la mentira. Pero que tampoco nos somete al cumplimiento estricto de un cumulo de cosas por hacer, para que no se convierta en una carga pesada. 
Recordemos lo que sabiamente las escrituras nos muestran:
2Co 3:6 el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, más el espíritu vivifica.
Este nuevo pacto no es por letra, es por medio del Espíritu de Dios, bienaventurados los llamados a vivir por el Espíritu. 

CONCLUSIÓN

Son muchos los que engañados por falsos maestros están haciendo volver a los indoctos al cumplimiento estricto de ella, pero olvidan que la ley tuvo su cumplimiento en Cristo, y que ahora vivimos por el Espíritu Sato de Dios que nos conduce por un nuevo pacto de vida, que deja lo exterior para volverse a lo interior.

No te quedes en la letra, conócela, vívela, pero no te quedes estancado sobre ella, para que tu vida no se convierta en un montón de letra muerta, sino que esta se convierta en vida sobre ti. Permite que el Espíritu Santo te guie a toda verdad y aprende a discernir lo espiritual con madurez.

Oremos, Señor clamamos porque tu Espíritu Santo permanezca en nosotros para que dejemos de basar nuestra vida en las reglas exteriores y empecemos a obedecerte desde el interior para vivir una vida consagrada a ti, amen.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por compartir con nosotros. Bendiciones