PREDICA DOMINICAL - POR MEDIO DE LA LEY ES EL CONOCIMIENTO DEL PECADO

PREDICA DOMINICAL

Por: Camilo Sastoque

Ministerio Unidad de la Fe

POR MEDIO DE LA LEY ES EL CONOCIMIENTO DEL PECADO

Rom 3:20 ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado. 

INTRODUCCIÓN

La ley de Dios es el camino a la justicia verdadera en la cual no hay sombra de duda. Sin la ley de Dios no hay conocimiento del pecado que hemos cometido contra Dios.

El pueblo de Dios cree que ahora la ley no necesita ser cumplida porque Cristo murió por nuestros pecados, entonces muchos la han abandonado para predica de la gracia, el amor y la bendición de Dios olvidando lo que la misma escritura enseña, que sin la ley no hay conciencia de pecado.

Sin la ley, no podríamos reconocer nuestro pecado, ni sabríamos identificarlo. Jesús mismo dijo: “No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir” (Mat 5:17). De modo que no dejo la ley, sino que vino a enseñar lo que esta realmente significa.

DESARROLLO

No puede haber una genuina conversión, un verdadero arrepentimiento sin conocimiento de la ley, muchos desconocen la ley de Dios, sus mandamientos y aun peor otros los conocen pero no los practican.

Vivimos en un mundo en donde la iglesia parece desconocer los principios de la ley de Dios en los que se fundamenta el amor que decimos tener por él, pues la escritura dice: 1Jn 5:3 “Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos” y luego dice Juan 2Jn 1:6 “Y este es el amor, que andemos según sus mandamientos”. Si el amor a Dios se muestra al cumplir con sus mandamientos y estos no son gravosos de cumplir para el que está en Cristo, entonces ¿porque los olvidamos?, ¿porque les restamos importancia?, ¿no deberían seguir siendo importantes? Creo firmemente que sí.

Solo mediante la ley nos volvemos conscientes del pecado que hemos cometido, por eso Cristo en su enseñanza, vuelve a tocar lo concerniente a la ley, y nos habla del adulterio, de la mentira, de la codicia, del matar u odiar, explicándonos la forma correcta de interpretar la ley y de su cumplimiento, el cual proviene de la intención del corazón y no solo de las acciones.

Antes de conocer de Cristo éramos dominados por la ley del pecado, pero ahora la ley se ha revelado para transformar nuestra conciencia y llevarnos a la práctica de la verdad.

CONCLUSIÓN

Recordemos lo que dice Pablo a los romanos: “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.” (Rom 8:1-2). ¿Andas conforme a la verdad?, ¿conforme a la ley de Dios? Si lo haces vives conforme al Espíritu, si no lo haces vives conforme a la carne y si vives por ella cosecharas sus frutos.

Dios ha dispuesto la ley como un camino para conducirte hacia él, librándote de la ley del pecado y de la muerte, para salvación y vida eterna en Cristo.

Oremos, señor revela tu ley a tus hijos, para que en nuestro corazón y espíritu surjan la intención firme de seguirlas siempre y en todo lugar, que podamos mostrar el amor que te tenemos conforme seguimos tus mandamientos y amamos tu ley como la vida misma, amen.