PREDICA DOMINICAL - CUANDO EL MIEDO GANA PODER EN NOSOTROS

CUANDO EL MIEDO GANA PODER EN NOSOTROS

Pro 29:25 El temor del hombre pondrá lazo;

Más el que confía en Jehová será exaltado.

INTRODUCCIÓN

El miedo y el temor son emociones fuertes que manipulan el comportamiento del hombre, si lo miramos con detenimiento muchas cosas las hemos dejado por el temor que nos produce enfrentarnos a ese miedo.

La iglesia en particular es detenida, manipulada y menguada por el temor. El miedo o temor es usado por muchos predicadores insanamente para manipular a las ovejas a dar más dinero, algunos para abusar de la confianza o para satisfacer sus propios deseos. Otros creyentes son detenidos en su crecimiento pues tienen la falsa idea de que al consagrar sus vidas más a Dios, les sobrevendrán cosas malas, no se imaginan a cuantas personas detiene este temor. Otros creyentes al enfrentas dificultades por la fe, temen ser abandonados por sus parejas, por sus amigos o dejar sus trabajos por lo que terminan abandonando la fe y volviéndose al mundo.

DESARROLLO

Si tememos a algo es porque no hay entendimiento, si un creyente teme al demonio, a la manipulación de su líder, al sufrimiento, a perderlo todo es porque no entienden.

La iglesia necesita comprender aquello a lo que teme, para que este temor insano salga de nuestras vidas. Cuando éramos niños y temíamos a la oscuridad, la única forma de que ese temor se fuera era trayendo luz a ese lugar, así mismo debemos atacar el temor, este se aumenta de la oscuridad que hay, esto significa que hay falta de entendimiento sobre algo en particular. Si tememos a satanás es porque no hemos comprendido que Dios es mayor, que fue vencido en la cruz y que el poder de satanás no tiene efecto sobre el creyente a menos que este se lo permita, comprender esto es liberador porque nos lleva a ser conscientes de que su poder no está por encima del de Dios, y que ya está vencido, nada puede hacer, aunque tocara con destrucción y muerte nuestra vida, no puede quitarnos lo más importante, nuestra fe en Jesús. Quien no comprende esto, va a batallar toda su vida por el temor a las tinieblas y a su poder, escucho a muchos creyentes teniendo miedo a la brujería, a los brujos, a los satanistas a tantas personas, que no tienen poder, y si lo tienen este no puede en contra del poder de Dios. Lo que si deberíamos temer es no andar como Jesús anduvo, pues es allí donde el creyente pierde poder y es inútil.

Si tememos a la muerte es porque aún no comprendemos que somos seres eternos, claro, experimentaremos la muerte física, pero seremos resucitados con Cristo y viviremos por siempre, esto es maravilloso, pero necesita ser comprendido para que el temor desaparezca, de igual forma el temor a perder a un familiar amado, si ellos han confiado su vida al Señor no hay porque temer. Eso no quiere decir que no nos duela, claro que dolerá, pero nuestra confianza esta puesta en la vida eterna.

Otro temor es el que mencione anteriormente, muchos temen servir a Dios, ser usados por Dios porque temen el rechazo, perder su trabajo, amigos, pareja, hijos, en fin tantas cosas. La única forma en que este temor desaparecerá es que te enamores profundamente de Dios y reconozcas que todas las cosas nos ayudan a bien (Rom 8:28). 

Otro temor que surge en los creyentes es el que aparece por la manipulación de algunos líderes inescrupulosos, que atemorizan a los creyentes con mentiras y engaños para sacar provecho de ellos, este temor puede ser fácilmente controlado si leemos y estudiamos diligentemente las escrituras, allí desaparece toda manipulación y engaño. Manipulaciones como ser la única iglesia, el infierno para los que no obedecen al líder, el castigo, lealtad sumisa a un falso profeta, pastor o maestro, la separación de la familia, son cosas que hasta el día de hoy se ven, pero no todos caen en cuenta.

CONCLUSION

Aquí no estamos hablando del temor del Señor, este es un temor reverente que nos aparta del mal y que nos lleva a madurar en la fe para ser perfeccionados. El temor o miedo del que hablamos es el producido por la ignorancia, la insensatez, el engaño que el enemigo, que es padre de mentiras suscita en los creyentes para mantener a la gloriosa iglesia de Cristo apartada de la verdad y la fe.

Recordemos que el temor gana poder en la ignorancia y la falta de entendimiento, por eso debemos traer luz a cada aspecto para que el temor que produce el adversario desaparezca.

Fortalezcamos nuestra fe en la oración, el ayuno, y la consagración de nuestras vidas a Dios para conocer su voluntad y seguirla con valor.

Oremos, Señor ayúdanos en medio del temor, hemos vivido llenos de temores que manipulan nuestras vidas a mal, ahora abandonamos todo temor y abrazamos la luz en el entendimiento de tu verdad y amor, permítenos salir airosos de cada prueba que confirma y afirma nuestra fe y entendimiento de la verdad en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, amen.