Páginas

domingo, 31 de julio de 2016

PREDICA DOMINICAL - LA PATERNIDAD DE DIOS


PREDICA DOMINICAL
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la fe

LA PATERNIDAD DE DIOS

Salmos 68:5  Padre de huérfanos y defensor de viudas
 Es Dios en su santa morada.

INTRODUCCIÓN

Cuantos de nosotros pueden decir que tienen un padre perfecto, que no falla, creo que si somos sinceros, no serán muchos. La paternidad es una figura que nos recuerda el diseño que Dios dispuso para el hombre en el hogar. Pero en una sociedad en donde el hombre es cada vez menos un buen padre, o pocos asumen este rol, nuestra sociedad se desmorona en medio de la incertidumbre de familias sin verdaderos padres.

¿Qué es la paternidad? El diccionario define paternidad como la cualidad de un padre o progenitor masculino, otro la define como una institución socio-cultural de filiación, otro dice que es la relación que se establece con los hijos. Dios ha dispuesto que sea el varón quien fecunde a la hembra para que la gestación pueda tener comienzo.

En el pueblo de Dios la paternidad siempre ha tenido un lugar preponderante, es tanto así, que cuando nombra las generaciones de Jesús, hace referencia a todos los hombres, de igual manera las tribus de Israel se diseminaron por medio de los hijos varones de Jacob. Y Siempre en la historia del hombre que nos muestran las escrituras vemos al varón como cabeza de la mujer, desde Adán, hasta José y María el varón ha cumplido una tarea esencial en la familia, la sociedad y la visión de Dios para su pueblo.

DESARROLLO

¿Porque escogería Dios usar la figura del Padre, en vez de la de la madre?, yo creo que hay una respuesta para ello, y se esconde en lo recóndito de nuestro ser. Para todos sería más fácil si Dios se presentara como madre, porque con la madre el ser humano tiene un vínculo cercano, una relación que se forma desde la concepción y los 9 meses del desarrollo del bebe dentro del vientre de la madre, que hacen que el hijo pueda reconocerla siempre, con su voz, o su olor. Pero con el padre sucede de forma diferente, al Padre no se le conoce, y eso es algo necesario, para que padre pueda ser presentado y creído mediante la fe, ya que sin fe es imposible agradar a Dios. Fue de esta forma perfecta para que pudiéramos solo por fe, conocer a aquel que nos ha adoptado como Padre. La paternidad es un acto de fe que genera un vínculo poderoso, trasformador y que hace la diferencia.

Mientras la madre es más permisiva, más amorosa, ejercer disciplina le queda difícil, corregir tampoco se le da muy bien, el hijo puede aprovechar para manipular, cambiar las reglas y hacer la vida algo complicada, pero al padre que ahora reconoce como funciona la verdadera paternidad, hace que la disciplina sea mejor, que aunque haya amor, también hay corrección, no hay cabida para la manipulación y la vida se torna armoniosa.

El hijo encuentra en el padre una visión del Padre celestial, es por ello que muchos creyentes tienen hoy problemas en su relación con Dios. Ellos ven los defectos de su padre terrenal en el celestial, si fueron abandonados, entonces conciben un Dios que los abandona por cualquier motivo, si no tuvieron la figura paterna entonces, tienden a concebir a Dios como un falso, alguien que los abandono. De allí, que tener una percepción verdadera de la paternidad es necesaria para el creyente de modo que pueda ver a Dios como el realmente es y no como nuestros prejuicios lo han mostrado.
En un mundo en el que hay hijos abandonados, hombres que no se comprometen, padres que maltratan y abusan, padres que no cumplen su rol, y mujeres frustradas por tratar de hacer lo que corresponde al hombre. Dios se levanta en medio como un padre que recoge a sus hijos y les restaura a la medida del Hijo de Dios.

CONCLUSIÓN

Jesús vino para enseñarnos sobre un Padre que estaba dispuesto a adoptarnos a pesar de nuestros errores o equivocaciones, a pesar de no contar con un padre terrenal, o a pesar de tener una idea equivocada de lo que es ser padre, vino para restaurar la paternidad que el hombre perdió y que en el Padre puede ser descubierta para vida.
Es tiempo de reconocer la paternidad divina, de sabernos adoptados por amor, de dejar de ver a Dios en los defectos de nuestros padres terrenales y perfeccionarnos en su amor por medio de la fe.

La sociedad y nuestros hijos naturales y espirituales necesitan hoy de verdaderos padres, sustentadores, guías, que ejerzan la disciplina con amor, que apoyen a sus esposas e hijos que los necesitan.
Hoy existe una sociedad que a la que urgen padres comprometidos, casados, que honren a Dios, que hablen verdad, que no sean egoístas, que amen a sus esposas, y que prediquen con su ejemplo.

Levantémonos como padres espirituales y terrenales firmes en la verdad, comprometidos con nuestras parejas y familias, listos para confrontar el error y animar cuando sea necesario, es tiempo de cambiar el paradigma de una sociedad que relego todo a la mujer, para que el hombre vuelva a tomar el lugar que nunca debió perder y que por la maldad de su corazón permitió que fuera usurpado.


Oremos, Señor permítenos ser buenos padres, que nuestro ejemplo hable más fuerte que nuestras palabras, que nuestro cariño, comprensión, ayuda y servicio sea primero para con nuestras familias y luego para con la iglesia y la sociedad que nos necesita, levanta la paternidad conforme al diseño tuyo, que seamos padres como tu, y que te amemos por sobre todo, para mostrar ese amor a los hijos y las parejas, amen.

martes, 26 de julio de 2016

ESTUDIO BÍBLICO HEBREOS 6

ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

Heb 6:1  Por eso,  dejando a un lado las enseñanzas elementales acerca de Cristo,  avancemos hacia la madurez.  No volvamos a poner los fundamentos,  tales como el arrepentimiento de las obras que conducen a la muerte,  la fe en Dios,
Es muy importante que conozcamos las enseñanzas elementales o básicas de nuestra fe, y estos versículos en particular nos las enseñan o muestran, porque no las profundiza, y empieza con la más importante el arrepentimiento, continua con la fe, son ellos pilares y fundamentos de nuestra confianza en Dios, sin ellos nuestra confianza no tiene fundamento en la fe.
Heb 6:2  la instrucción sobre bautismos,  la imposición de manos,  la resurrección de los muertos y el juicio eterno.
Continua con la instrucción sobre el bautismo, la imposición de manos, la resurrección de los muertos y el juicio eterno, los conoces?, sino es importante que ahondes en su entendimiento y los medites en oración para que estos conceptos dejen de ser un concepto y se vuelvan una realidad en nuestras vidas.
Heb 6:3  Así procederemos,  si Dios lo permite.
Es aquí en donde la iglesia falla porque no se plantea dar el conocimiento en base al crecimiento del creyente, si no en base a nuestra propio entendimiento. Son muchos los creyentes confundidos y mal nutridos por recibir enseñanzas que no están acordes a su conocimiento y experiencia en la verdad. Debemos proceder según el concejo de las escrituras, para que podamos formar creyentes maduros que sean hacedores y no tan solo oidores.
Heb 6:4  Es imposible que renueven su arrepentimiento aquellos que han sido una vez iluminados,  que han saboreado el don celestial,
Heb 6:5  que han tenido parte en el Espíritu Santo y que han experimentado la buena palabra de Dios y los poderes del mundo venidero,  y después de todo esto se han apartado.
Aquí no se habla de aquel que cae en pecado o que se equivoca habiendo vivido una vida piadosa y se arrepiente, sino de aquel que se aparta del todo de la presencia de Dios negando su fe y el poder que ha obrado para salvación, quien después de haber vivido un arrepentimiento verdadero, iluminado por su Espíritu, saboreado el don de la vida eterna, han tenido parte con el Espíritu, han experimentado la palabra de Dios y los poderes del mundo  venidero se apartan. Es interesante notar lo que ocurre en el creyente que ha experimentado el poder de Dios, son seis cosas las que ocurren mencionadas anteriormente.
Heb 6:6  Es imposible,  porque así vuelven a crucificar,  para su propio mal,  al Hijo de Dios,  y lo exponen a la vergüenza pública.
Es imposible que aquel que apostata de la fe y la verdad luego de haberla probado vuelva a Dios pues el apartarse por completo del Señor significa una completa y voluntaria apostasía, y no crucificando al mundo para sí, expone en vergüenza lo nacido de la divinidad.
Heb 6:7  Cuando la tierra bebe la lluvia que con frecuencia cae sobre ella,  y produce una buena cosecha para los que la cultivan,  recibe bendición de Dios.
Quien bebe del don de Dios recibe de su bendición, su amor y gracia, pues con ella produce una buena cosecha, da buenos frutos. El agua es tipología del bautismo y de la palabra que han sido entregadas a la iglesia y a la humanidad para que el hombre pueda vivir plenamente y dar fruto. La tierra es tipología del hombre quien recibe la lluvia de bendición sobre su ser.
Heb 6:8  En cambio,  cuando produce espinos y cardos,  no vale nada;  está a punto de ser maldecida,  y acabará por ser quemada.
Esta lluvia también cae sobre cardos y espinos, no solo sobre tierra que da fruto, los cardos y espinas representan a hombres cuyos corazones han recibido la palabra pero que esta ha sido ahogada por estas plantas que no dejan dar fruto de bendición, por lo que termina bajo maldición y destrucción. Los cardos y espinos son los frutos de una vida apartada del Señor, en donde el engaño, la mentira, el dolor, la soledad y el apartarse de la presencia de Dios son la consecuencia final que resulta de la falta a la verdad.
Heb 6:9  En cuanto a ustedes,  queridos hermanos,  aunque nos expresamos así,  estamos seguros de que les espera lo mejor,  es decir,  lo que atañe a la salvación.
En cuanto a aquellos que son fieles a la verdad y aunque puedan caer sin apartarse de Dios, se sostienen de la gracia y el amor de Dios, todos aquellos que aman a Dios y le obedecen pueden estar seguros de su salvación, su libertad y su victoria sobre las tinieblas, y sobre la mentira.
Heb 6:10  Porque Dios no es injusto como para olvidarse de las obras y del amor que,  para su gloria,* ustedes han mostrado sirviendo a los santos,  como lo siguen haciendo.
La justicia de Dios es la máxima para su obrar, de cierto que no olvida todo lo bueno que por la fe y el amor que emana de ella hayamos podido obrar, por servicio y devoción para con los hermanos en la fe y para con los mas necesitados.
Heb 6:11  Deseamos,  sin embargo,  que cada uno de ustedes siga mostrando ese mismo empeño hasta la realización final y completa de su esperanza.
Como seres en perfeccionamiento continuo debemos proseguir con empeño, para que sea consumada la realización final, perfecta y completa de nuestra esperanza que es Cristo.
Heb 6:12  No sean perezosos;  más bien,  imiten a quienes por su fe y paciencia heredan las promesas.
La pereza es la falta del ejercicio del dominio propio, que puede llevarnos a perdición, por eso tengamos en cuenta a quienes por su fe y perseverancia han sido llamados herederos de Dios. Nosotros no imitamos un comportamiento, porque hacerlo sería hacer algo externo que no pertenece al interior, imitamos la virtud, el amor y la devoción para experimentar por nosotros mismos las profundidades de nuestro amado.
Heb 6:13  Cuando Dios hizo su promesa a Abraham,  como no tenía a nadie superior por quien jurar,  juró por sí mismo,
Cuando Dios prometió a Abraham bendecirle y darle descendencia, conjuro su promesa por medio de si mismo, para darle validez y certeza a su palabra.
Heb 6:14  y dijo:  "Te aseguro que te bendeciré y te daré muchos descendientes."*
Dios no habla por hablar, cuando dice algo, eso es verdadero y se cumple, la escritura es fiel testimonio del cumplimiento de su voluntad.
Heb 6:15  Y así,  después de esperar con paciencia,  Abraham recibió lo que se le había prometido.
Y aunque como a Abraham pueda tardarse el cumplimiento de la promesa, debemos esperar con paciencia, y perseverancia, como aquel que confía con certeza en la voluntad de su Padre para recibir lo que a su tiempo ha de darse.
Heb 6:16  Los seres humanos juran por alguien superior a ellos mismos,  y el juramento,  al confirmar lo que se ha dicho,  pone punto final a toda discusión.
Nosotros tratamos de dar validez a nuestras palabras o promesas por medio de algo superior o mayor a nosotros mismos, para que al confirmarlo podamos dar por terminado o dar por confirmado toda discusión, controversia o disputa.
Heb 6:17  Por eso Dios,  queriendo demostrar claramente a los herederos de la promesa que su propósito es inmutable,  la confirmó con un juramento.
Dios entendiendo la forma de pensar del hombre, y queriendo evitar controversias o disputas ante la verdad y su propósito eterno e inmutable, lo aseguro por medio de sí mismo, una palabra que nos sirve de salvaguarda, un juramento que no cambia.
Heb 6:18  Lo hizo así para que,  mediante la promesa y el juramento,  que son dos realidades inmutables en las cuales es imposible que Dios mienta,  tengamos un estímulo poderoso los que,  buscando refugio,  nos aferramos a la esperanza que está delante de nosotros.
El hombre necesita un estímulo frecuente para que su alma pueda perseverar en lograr algo, por lo que Dios usa una promesa y un juramento, por medio de sí mismo para que sean eternas, reales y no cambien, para que la mentira no encuentre cabida, y podamos aferrarnos a una sustancia que nos permite esperar confiados en lo que no vemos, y que es real.
Heb 6:19  Tenemos como firme y segura ancla del alma una esperanza que penetra hasta detrás de la cortina del santuario,
No es fácil soportar los embates de las olas de incredulidad, los avances de la mentira y el engaño en el mundo en que vivimos, por eso Dios conociendo de antemano lo que el hombre tendría que soportar, dispuso de un ancla que es firme y segura, firme porque se mantiene inamovible, y segura porque nos trasmite la tranquilidad y la paz que solo se encuentran en los lugares seguros, para que nuestra alma que va y viene en los vaivenes de la vida, pueda sostenerse en medio del lugar santísimo, el lugar al cual solo accedía el sumo sacerdote, y en donde la presencia de Dios se derramaba con poder. Esta ancla es Jesús, nuestro sumo sacerdote, rey de reyes y señor de señores, en donde reposan nuestra esperanza, amor y vida.
Heb 6:20  hasta donde Jesús,  el precursor, entró por nosotros,  llegando a ser sumo sacerdote para siempre,  según el orden de Melquisedec.

Jesús al morir en la cruz rompió la cortina que impedía el acceso de alguien diferente al sumo sacerdote, ahora el cómo sumo sacerdote de un orden más antiguo, más extenso, que abarca a todo el género humano, ha entrado al lugar santísimo y nos ha abierto el camino para que nosotros seguros y confiados en su amor, podamos entrar y habitar en el reposo de la eternidad, en unidad con el Padre y el Hijo.

lunes, 25 de julio de 2016

TIEMPO DE REFLEXIÓN

FRACASO NO SIGNIFICA QUE SOMOS UNOS FRACASADOS. Significa que todavía no hemos tenido buen éxito.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE NO HEMOS LOGRADO NADA. Significa que hemos aprendido algo.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE HEMOS ACTUADO COMO NE­CIOS. Significa que hemos tenido mucha fe.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE HEMOS SUFRIDO EL DESCRE­DITO. Significa que estuvimos dispuestos a probar.
FRACASO NO SIGNIFICA FALTA DE CAPACIDAD. Significa que debemos hacer las cosas de distinta manera.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE SOMOS INFERIORES. Significa que no somos perfectos.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE HEMOS PERDIDO NUESTRA VIDA. Significa que tenemos buenas razones para empezar de nuevo.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE DEBEMOS ECHARNOS ATRÁS. Significa que tenemos que luchar con mayor ahínco.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE JAMAS LOGRAREMOS NUESTRAS METAS. Significa que tardaremos un poco más en alcanzarlas.
FRACASO NO SIGNIFICA QUE DIOS NOS HA ABANDONADO. ¡Significa que Dios tiene una mejor idea y un plan de salvación mejor para nosotros!

2Co 10:10 pues algunos dicen: "Sus cartas son duras y fuertes, pero él en persona no impresiona a nadie, y como orador es un fracaso."

Pablo también fue considerado un fracaso, su predicación aunque cargada de la unción de Dios, no era la mejor y fue fuertemente criticado por ello por una parte de la iglesia. Quien pensaría eso de un ser como Pablo quien inspirado por Dios escribió gran parte de lo que conocemos como el nuevo testamento, quien guía hoy en día lo que se enseña y predica en nuestras congregaciones. Para muchos Pablo era un predicador fracasado, pero para Dios Pablo era su escogido para traer a las naciones gentiles a sus pies, cuan diferente es lo que piensa el hombre de lo que piensa Dios. La historia de hoy nos recuerda que el fracaso es solo una cuestión de perspectiva, de la forma en que decidimos ver las cosas. Mientras fracasas para el mundo, Dios te enseña, te transforma, y te disciplina. No te dejes abatir cuando creas que has fracasado según los preceptos del mundo, más bien renueva tu mente en la palabra de Dios y confía en él, para que veas como el usa tu fracaso para glorificarse a el mismo y bendecir a muchos. No te inquietes por las dificultades de la vida, por sus altibajos, por sus decepciones, o su porvenir. Quiere tú, lo que Dios quiere. Ofrécele en medio de inquietudes y dificul­tades el sacrificio de tu alma sencilla que, pese a todo, acepta los designios de su Providencia. Poco importa que te consideres un fracasado, si Dios te considera plenamente realizado a su gusto. Piérdete confiado ciegamente en ese Dios que te quiere para sí y que llegará a ti, aunque no lo veas. Piensa que estás en sus ma­nos, tanto más fuertemente cogido, cuánto más decaído y triste te sientas. Vive feliz, vive en paz, que nada te altere, que nada sea capaz de quitarte tu paz, ni la fatiga, ni tus fallos. Haz que brote y conserva siempre sobre tu rostro, una dulce sonrisa, reflejo de la que el Señor, continuamente te dirige. Y en el fondo de tu alma coloca, antes que nada todo aquello que te llene de la paz de Dios. Adora y confía.

GUÍA DE ESTUDIO

¿Te sientes un fracasado?
¿Has fracasado en algo y sabes lo que se siente?
¿Crees que los demás piensan que eres un fracasado?

¿Sabes lo que Dios piensa de ti?

domingo, 24 de julio de 2016

PREDICA DOMINICAL - LAS ESCRITURAS PUEDEN DARTE LA SABIDURÍA NECESARIA PARA LA SALVACION



PREDICA DOMINICAL
Por: Camilo A. Sastoque M.
Ministerio Unidad de la Fe

LAS ESCRITURAS PUEDEN DARTE LA SABIDURÍA NECESARIA PARA LA SALVACIÓN

2Ti 3:15 Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús.

INTRODUCCIÓN

La iglesia protestante inicio una revolución completa en el cristianismo llamando a sus fieles a volver a las sagradas escrituras, pues cree y confía en que allí se encuentra el consejo y la verdad necesarias para que el hombre pueda conocer a Dios. Su nacimiento se dio en medio de la persecución, la mentira y el engaño, pero ha permanecido a pesar de todo.

Todo comienza cuando algunos sacerdotes o estudiosos de las escrituras empiezan a traducir las escrituras al lenguaje de sus pueblos, por lo cual son llamados herejes, otros ahondan más en su conocimiento y empiezan a descubrir que lo que se enseña no concuerda con lo que está en las escrituras, y luego se dan cuenta que al predicar las escrituras, sus enseñanzas empiezan a ser transmitidas y puestas en práctica por muchos de sus fieles, transformándoles por completo.

DESARROLLO

Lejos de la religiosidad tradicional, la escritura revoluciono a la cristiandad, todo aquel que las ha leído guiado por el Espíritu Santo ha encontrado vida, transformación, consuelo y bendición en sus palabras. Ellas han revolucionado a la cristiandad y hoy debido a valientes esforzados, se encuentra traducida en muchos idiomas diseminados por el mundo.
En ello se cumple lo que Cristo dijo: Juan 6:63 “las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida”. Quienes hemos hallado sus palabras, hemos encontrado esa vida espiritual que ha enriquecido nuestro ser, hemos hallado bendición, sanidad, entendimiento, consuelo, descanso, y amor en todo su contenido.

Timoteo, fiel discípulo de Pablo conoció las escrituras desde su niñez, de modo que nos recuerda la importancia de enseñar a nuestros niños la palabra de Dios, pues Pablo entendía que ellas podían darle la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. El Espíritu Santo usa las escrituras para llamarnos la atención, para exhortarnos, para liberarnos, para instruirnos, para aumentar nuestra fe, para transformarnos, de modo que sea indispensable en la vida del creyente, la lectura frecuente, ojala diaria de la biblia, y su estudio.

CONCLUSIÓN

Si no estudiamos las escrituras estamos perdiendo la oportunidad de ser conformados a la verdad, nos perdemos de la comunión que ellas nos llevan a tener con Dios, nuestra fe se estanca, y nos enfriamos como témpanos en la soledad y el tedio. Por eso no debemos descuidar nuestro deber para con las escrituras de leer, estudiar y aprenderlas para que siempre estén presentes en nuestra mente y corazón para poner por obra la verdad que en ellas se esconde.

¿Qué tanto lees la biblia?, ¿la has leído completa?, ¿estudias aquello que no entiendes? Pablo nos exhorta a aprender las escrituras para que ellas nos guíen como han guiado a miles de hombres y mujeres para entregar nuestras vidas en amor y devoción para con Dios.

Oremos, Señor ayúdanos a perseverar en el estudio acucioso de las escrituras, a permanecer en su compañía para que tu Espíritu hable a nuestros corazones, ayúdanos a encontrar en ella lo necesario para crecer espiritualmente y alcanzar la madurez, amen.


miércoles, 20 de julio de 2016

ESTUDIO BÍBLICO HEBREOS 5


ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

Heb 5:1  Todo sumo sacerdote es escogido de entre los hombres.  Él mismo es nombrado para representar a su pueblo ante Dios,  y ofrecer dones y sacrificios por los pecados.
Ahora el escritor nos describe lo que el sumo sacerdote es, lo que representa ante Dios y lo que hace, para introducirnos a Cristo, como un sumo sacerdote que no fue ordenado o escogido por los hombres, sino que Dios mismo lo dispuso, también representa al pueblo de Dios, pero ahora con Cristo su representación abarca a toda la humanidad. Cristo se ofreció a sí mismo como único sacrificio para expiar a la humanidad de su pecado, y con ello ofreció dones inefables a los hombres, que solo se descubren y entienden desde la fe.
Heb 5:2  Puede tratar con paciencia a los ignorantes y extraviados,  ya que él mismo está sujeto a las debilidades humanas.
A diferencia del A.T. en donde Dios no toleraba la naturaleza carnal del hombre, ahora por la intermediación de Cristo como sumo sacerdote, los ignorantes y extraviados de la verdad, pueden ser tratados con paciencia pues Jesús vivió en su propia existencia las debilidades de la humanidad.
Heb 5:3  Por tal razón se ve obligado a ofrecer sacrificios por sus propios pecados,  como también por los del pueblo.
Conociendo nuestra debilidad de primera mano, reconoce la necesidad de ser entregado como sacrificio vivo por nuestros pecados.
Heb 5:4  Nadie ocupa ese cargo por iniciativa propia;  más bien,  lo ocupa el que es llamado por Dios,  como sucedió con Aarón.
Todo puesto, ocupación y lugar que ocupamos en la vida, ha sido dispuesto por Dios de antemano, Jesús no se hizo cargo del pecado de la humanidad porque hubiese sido una elección personal y diferente, sino que como unido al padre, reconoce la necesidad de salvación del género humano y es llamado a servir, tal como sucedió con Aarón el sumo sacerdote en tiempos de Moisés.
Heb 5:5  Tampoco Cristo se glorificó a sí mismo haciéndose sumo sacerdote,  sino que Dios le dijo:  "Tú eres mi hijo;  hoy mismo te he engendrado."*
Heb 5:6  Y en otro pasaje dice:  "Tú eres sacerdote para siempre,  según el orden de Melquisedec."*
Para argumentar con escritos proféticos la obra redentora y sacerdotal de Cristo, el escritor se dispone a usar las escrituras para demostrarlo y usa (Salmo 110:4), .El que el escritor escogiera como tipo de Cristo a uno que no fuese de la línea de Abrahán (de quien los judíos se enorgullecían), es una sugestión del universalismo mesiánico.
Heb 5:7  En los días de su vida mortal,  Jesús ofreció oraciones y súplicas con fuerte clamor y lágrimas al que podía salvarlo de la muerte,  y fue escuchado por su reverente sumisión.
En vida como sumo sacerdote se ofreció a sí mismo en oración y ruego al Padre, el único que habría podido cambiar su destino, y aunque su destino no cambio, siempre fue escuchado por su prodigiosa devoción y entrega. Recordemos que la sumisión y entrega en devoción completa a Dios, es la que hace que podamos ser escuchados sin estorbos.
Heb 5:8  Aunque era Hijo,  mediante el sufrimiento aprendió a obedecer;
Que maravillosa declaración, que debe servir de enseñanza para todos los creyentes, solo el sufrimiento nos desprende del amor egoísta que sentimos por nosotros mismos, para que podamos entender el propósito divino, solo el sufrimiento puede hacernos crecer a imagen del hijo, disfrutemos de nuestros sufrimientos porque ellos nos perfeccionan para que podamos obedecer los mandatos divinos. Si el hijo de Dios tuvo que soportarlos, porque hemos nosotros de renegar en medio del sufrimiento, sino que confiados en su mano poderosa podamos entregarnos a vivir con amor y devoción cada circunstancia que él disponga.
Heb 5:9  y consumada su perfección,  llegó a ser autor de salvación eterna para todos los que le obedecen,
Perfeccionado en medio del sufrimiento asumiendo la muerte en la cruz, vino a ser autor de salvación y libertad en lo eterno para aquellos que le obedecen o se conforman bajo su autoridad.
Heb 5:10  y Dios lo nombró sumo sacerdote según el orden de Melquisedec.
Y habiendo sido profetizado que el orden por el cual llegaría el sumo sacerdote que habría de ser autor de la salvación debía ser por el de Melquisedec, se cumplió. Melquisedec aparece en Gen 14:18, como rey y sacerdote de Dios sobre Salem quien recibió con pan y vino, y también recibió los diezmos de todo de parte de Abraham cuando volvía de rescatar a su sobrino Lot luego de haber sido tomado prisionero, de igual manera Dios en Cristo ha establecido un rey y sacerdote que no pertenece al orden de la familia de Levi que fue la establecida para el pueblo de Israel, sino a una más antigua que soportaba a todos los pueblos.
Heb 5:11  Sobre este tema tenemos mucho que decir aunque es difícil explicarlo,  porque a ustedes lo que les entra por un oído les sale por el otro.*
El escritor reconoce lo difícil que es explicar la obra de Cristo y el fundamento bíblico para sostenerlo, porque es fácil que el hombre olvide lo que ha escuchado, por mejor fundamento y explicación que se le haya dado.
Heb 5:12  En realidad,  a estas alturas ya deberían ser maestros,  y sin embargo necesitan que alguien vuelva a enseñarles las verdades más elementales de la palabra de Dios.  Dicho de otro modo,  necesitan leche en vez de alimento sólido.
Es necesario que todo creyente busque conocer los fundamentos de su fe, no para que sea un maestro, sino para que su fe se sostenga y mantenga por el alimento que esta representa para sus espíritus y almas, pero no pueden pretender quedarse solo en los fundamentos, sino que se debe ahondar en el conocimiento de la verdad para alimentarse con el alimento sólido que es la puesta en práctica de la verdad.
Heb 5:13  El que sólo se alimenta de leche es inexperto en el mensaje de justicia;  es como un niño de pecho.
El crecimiento espiritual en la escritura se menciona similar al crecimiento natural del hombre, y de igual manera a como un ser humano se alimenta, el ser del hombre también necesita de un alimento, que inicia como la leche materna en un comienzo, una leche que representa a la palabra y sus fundamentos en los que se sostiene nuestra fe, es nutritiva y deliciosa para esa edad, pero cuando se crece el niño, ya no continua tomándola porque sus nutrientes ya no son suficientes para su actividad, y ya no sabe igual, se necesita de un alimento más sólido con nutrientes mejores o más efectivos para que el creyente pueda poner en práctica lo que entiende y es referente a su fe.
Heb 5:14  En cambio,  el alimento sólido es para los adultos,  para los que tienen la capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo,  pues han ejercitado su facultad de percepción espiritual.

Cuando hemos conocido los fundamentos de nuestra fe, no podemos quedarnos inermes en nuestro desarrollo, sino que al igual como un niño crece y se convierte en un adulto, el creyente debe dejar la inmadurez y conducirse hacia el perfeccionamiento por medio del alimento básico de la palabra y la práctica continua de las disciplinas espirituales que nos afirman en la verdad, como son la oración, el ayuno y el dar. El signo primordial del creyente maduro o perfecto es el discernimiento o sentido de lo mejor o lo que no lo es. Lo espiritual se percibe por medio de la intuición que es el sentido espiritual.

lunes, 18 de julio de 2016

TIEMPO DE REFLEXIÓN

Había una vez un rey muy triste que tenía un sirviente que era muy feliz. Todas las mañanas llegaba a traer el desayuno y des­pertaba al rey, cantando y tarareando alegres canciones de jugla­res. Una sonrisa se dibujaba en su distendida cara y su actitud para con la vida era siempre serena y alegre.
Un día el rey lo mandó a llamar. "Paje -le dijo-. ¿Cuál es el secre­to?". -"¿Qué secreto, majestad?". -"¿Cuál es el secreto de tu ale­gría?". -"No hay ningún secreto, alteza". -"No me mientas, paje. He mandado a cortar cabezas por ofensas menores que una men­tira". -"No le miento, alteza, no guardo ningún secreto". -"¿Por qué está siempre alegre y feliz? Eh, ¿por qué?". -"Majestad, no tengo razones para estar triste. Su alteza me honra permitiéndo­me atenderlo. Tengo mi esposa y mis hijos viviendo en la casa que la Corte nos ha asignado, somos vestidos y alimentados y ade­más, su alteza me premia de vez en cuando con algunas mone­das para darnos algunos gustos. ¿Cómo no estar feliz?". "Si no me dices ya mismo el secreto, te haré decapitar -dijo el rey-. Nadie puede ser feliz por esas razones que has dado". -"Pero, majestad, no hay secreto. Nada me gustaría más que complacerlo, pero no hay nada que yo esté ocultando...". -"¡Vete, vete antes de que llame al verdugo!". El sirviente sonrió, hizo una reverencia y salió de la habitación.
El rey estaba como loco. No consiguió explicarse cómo el paje estaba feliz viviendo de prestado, vistiendo ropa usada y alimentándose con las sobras de los cortesanos. Cuando se calmó, llamó al más sabio de sus asesores y le contó su conversación de la mañana: ¿Por qué él es feliz? -"Ah, majestad, lo que sucede es que él está fuera del círculo. -"¿Fuera del círculo?". -"Así es", "¿Y eso es lo que lo hace feliz?". -"No, Majestad, eso es lo que no lo hace infeliz". -"A ver si entiendo, estar en el circulo te hace infeliz". -"Así es". -"¿Y como salió?"-. -"Nunca entró". -"¿Qué círculo es ese?". -"El círculo del 99". -"Verdaderamente, no te entiendo nada". -"La única manera para que entendieras, seria mostrártelo con hechos". -"¿Cómo?", -"Haciendo entrar a tu paje en el círculo". -"Eso, obliguémoslo a entrar", -"No, alteza, nadie puede obligar a nadie a entrar en el círculo". -"Entonces habrá que engañarlo". -"No hace falta, su majestad. Si le damos la oportunidad, él entrará solito". "¿Solito? Pero, ¿él no se dará cuenta de que eso es su infelicidad?". "Sí se dará cuenta". -"¡Entonces no entrará!" "No lo podrá evitar", -"¿Dices que él se dará cuenta de la infelicidad que le causará entrar en ese ridículo círculo, y de todos modos entrará en él y no podrá salir?". -Tal cual Majestad. ¿Estás dispuesto a perder un excelente sirviente para poder entender la estructura del círculo?". -"Sí". -"Bien, esta noche te pasaré a buscar. Debes tener preparada una bolsa de cuero con 99 monedas de oro, ni una más ni una menos". -"!99! ¿Qué más? ¿Llevo los guardias por si acaso?". -"Nada más que la bolsa de cuero. Majestad, hasta la noche...".
Así fue. Esa noche, el sabio pasó a buscar al rey. Juntos cruzaron los patios del palacio y se ocultaron, junto a la casa del paje. Allí esperaron el alba. Cuando dentro de la casa se encendió la primera vela, el hombre sabio agarró la bolsa y le pegó un papel que decía: "Este tesoro es tuyo. Es el premio por ser un buen hombre. Disfrútalo y no cuentes a nadie cómo lo encontraste". Cuando el paje salió, el sabio y el rey espiaban, para ver lo que sucedía. El 'sirviente vio la bolsa, leyó el papel, agitó la bolsa y al escuchar sonido metálico se estremeció, apretó la bolsa contra el pecho, miró hacia todos lados y cerró la puerta. El rey y el sabio se arrimaron a la ventana para ver la escena. El sirviente había tirado todo lo que había sobre la mesa y dejado solo la vela. Se había sentado y había vaciado el contenido en la mesa. Sus ojos no podían creer lo que veían. ¡Eran una montaña de monedas de oro! Él, que nunca había tocado una de estas monedas, tenía ahora una montaña de ellas para él. El paje las tocaba y amontonaba, las acariciaba y hacía brillar la luz de la vela sobre ellas. Las juntaba y desparramaba, hacía pilas de monedas. Así, jugando y jugando empezó a hacer pilas de 10 monedas. Una pila de diez, dos pilas de diez, tres pilas, cuatro, cinco... Y mientras sumaba 10, 20,30, 40, 50, 60... hasta que formó la última pila: i99 monedas! Su mirada recorrió la mesa primero, buscando una moneda más; luego en el piso y finalmente en la bolsa. "No puede ser", pensó. Puso la última pila al lado de las otras y confirmó que era más baja. "¡Me robaron -gritó- me robaron, malditos!". Una vez más buscó en la mesa, en el piso, en la bolsa, en sus ropas, sus bolsillos, corrió los muebles, pero no encontró lo que buscaba. Sobre la mesa, como burlándose de él, una montañita resplandeciente le recordaba que había 99 monedas de oro "sólo 99". "99 monedas. Es mucho dinero -pensó-. Pero me falta una moneda. Noventa y nueve no es un número completo. Cien es un número completo pero noventa y nueve, no". El rey y su asesor miraban por la ventana. La cara del paje ya no era la misma, estaba con  el ceño fruncido y los rasgos tiesos, los ojos se habían vuelto pequeños y arrugados y la boca mostraba un horrible rictus.
El sirviente guardó las monedas en la bolsa y mirando para todos lados para ver si alguien de la casa lo veía, escondió la bolsa entra la leña. Tomó papel y pluma y se sentó a hacer cálculos. ¿Cuánto tiempo tendría que ahorrar el sirviente para comprar su moneda número cien? Todo el tiempo hablaba solo, en voz alta. Estaba dispuesto a trabajar duro hasta conseguirla. Después, quizás no necesitara trabajar más. Con cien monedas de oro, un hombre puede dejar de trabajar. Con cien monedas de oro un hombre es rico. Con cien monedas se puede vivir tranquilo. Sacó el cálculo. Si trabajaba y ahorraba su salario y algún dinero extra que recibía, en once o doce años juntaría lo necesario. Sacó las cuentas: Sumando su trabajo en el pueblo y el de su esposa, en siete años reuniría el dinero. ¡Era demasiado tiempo! Quizás pudiera llevar al pueblo lo que quedaba de comidas todas las noches y venderlo por unas monedas. De hecho, cuanto menos comieran, más comida habría para vender... Vender... Vender... Estaba haciendo calor. ¿Para qué tanta ropa de invierno, para qué más de un par de zapatos? Era un sacrificio, pero en cuatro años de sacrificios llegaría a su moneda cien.
El rey y el sabio volvieron al palacio. El paje había entrado en el círculo del 99. Durante los siguientes meses, el sirviente siguió sus planes tal como se le ocurrieron aquella noche. Una mañana, el paje entró a la alcoba real golpeando las puertas, refunfuñando de pocas pulgas. "¿Qué te pasa?", preguntó el rey de buen modo. "Nada me pasa, nada me pasa". -"Antes, no hace mucho, reías y cantabas todo el tiempo". -"Hago mi trabajo, ¿no? ¿Qué querría su alteza, que fuera su bufón y su juglar también?". No pasó mu­cho tiempo antes de que el rey despidiera al sirviente. No era agradable tener un paje que estuviera siempre de mal humor.

Salmos 23:1  El Señor es mi *pastor,  nada me falta;

Todos hemos sido programados para pensar que siempre nos falta algo para estar completos, y que sólo estando com­pletos se puede gozar de lo que se tiene. Por lo tanto, se nos enseñó, que la felicidad se alcanza al completar lo que hace falta. Y como siempre parece que nos falta algo, la idea impide al hombre disfrutar del presente, en pos de un futuro que aún no se ha alcanzado y que no sabemos si se alcanzará. Qué tal si Dios abriera nuestros ojos para ver y nos diéramos cuenta, que nues­tras 99 monedas son el todo del tesoro, que no nos falta nada, que estamos completos, que nadie se quedó con lo nuestro. El mundo y sus riquezas, fama y vanagloria nos conducen a una trampa para que nunca disfrutemos del presente y que todo siga igual. El pasaje de la escritura nos recuerda que Dios quiere ayudarnos a despertar para que podamos disfrutar nuestro presente, aquellas bendiciones que ya nos fueron concedidas y en las que ni siquiera pensamos por estar sumergido tras las distracciones de este mundo. Dios está aquí y ahora, en el nada nos falta, en él estamos completos, es en su presencia que podemos descubrirnos tal cual hemos sido creados, sin faltantes, sin falsas necesidades.

GUÍA DE ESTUDIO
¿Aun crees que algo te falta?
¿Porque crees que has caído en ese juego?
¿Qué te impulsa a creer que necesitas más cosas?

¿Cuáles son tus verdaderas necesidades?

TIEMPO DE REFLEXIÓN
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

domingo, 17 de julio de 2016

PREDICA DOMINICAL - LAS ESCRITURAS PUEDEN DARTE LA SABIDURÍA NECESARIA PARA LA SALVACIÓN

LAS ESCRITURAS PUEDEN DARTE LA SABIDURÍA NECESARIA PARA LA SALVACIÓN

2Ti 3:15 Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús.

INTRODUCCIÓN

La iglesia protestante inicio una revolución completa en el cristianismo llamando a sus fieles a volver a las sagradas escrituras, pues cree y confía en que allí se encuentra el consejo y la verdad necesarias para que el hombre pueda conocer a Dios. Su nacimiento se dio en medio de la persecución, la mentira y el engaño, pero ha permanecido a pesar de todo.

Todo comienza cuando algunos sacerdotes o estudiosos de las escrituras empiezan a traducir las escrituras al lenguaje de sus pueblos, por lo cual son llamados herejes, otros ahondan más en su conocimiento y empiezan a descubrir que lo que se enseña no concuerda con lo que está en las escrituras, y luego se dan cuenta que al predicar las escrituras, sus enseñanzas empiezan a ser transmitidas y puestas en práctica por muchos de sus fieles, transformándoles por completo.

DESARROLLO

Lejos de la religiosidad tradicional, la escritura revoluciono a la cristiandad, todo aquel que las ha leído guiado por el Espíritu Santo ha encontrado vida, transformación, consuelo y bendición en sus palabras. Ellas han revolucionado a la cristiandad y hoy debido a valientes esforzados, se encuentra traducida en muchos idiomas diseminados por el mundo.

En ello se cumple lo que Cristo dijo: Juan 6:63 “las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida”. Quienes hemos hallado sus palabras, hemos encontrado esa vida espiritual que ha enriquecido nuestro ser, hemos hallado bendición, sanidad, entendimiento, consuelo, descanso, y amor en todo su contenido.

Timoteo, fiel discípulo de Pablo conoció las escrituras desde su niñez, de modo que nos recuerda la importancia de enseñar a nuestros niños la palabra de Dios, pues Pablo entendía que ellas podían darle la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. El Espíritu Santo usa las escrituras para llamarnos la atención, para exhortarnos, para liberarnos, para instruirnos, para aumentar nuestra fe, para transformarnos, de modo que sea indispensable en la vida del creyente, la lectura frecuente, ojala diaria de la biblia, y su estudio.

CONCLUSIÓN

Si no estudiamos las escrituras estamos perdiendo la oportunidad de ser conformados a la verdad, nos perdemos de la comunión que ellas nos llevan a tener con Dios, nuestra fe se estanca, y nos enfriamos como témpanos en la soledad y el tedio. Por eso no debemos descuidar nuestro deber para con las escrituras de leer, estudiar y aprenderlas para que siempre estén presentes en nuestra mente y corazón para poner por obra la verdad que en ellas se esconde.
¿Qué tanto lees la biblia?, ¿la has leído completa?, ¿estudias aquello que no entiendes? Pablo nos exhorta a aprender las escrituras para que ellas nos guíen como han guiado a miles de hombres y mujeres para entregar nuestras vidas en amor y devoción para con Dios.

Oremos, Señor ayúdanos a perseverar en el estudio acucioso de las escrituras, a permanecer en su compañía para que tu Espíritu hable a nuestros corazones, ayúdanos a encontrar en ella lo necesario para crecer espiritualmente y alcanzar la madurez, amen.


lunes, 11 de julio de 2016

TIEMPO DE REFLEXIÓN


TIEMPO DE REFLEXIÓN
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

Jerry era el tipo de persona que siempre estaba de buen humor y siempre tenía algo positivo que decir. Cuando alguien le preguntaba cómo le iba, él respondía: "Si pudiera estar mejor, tendría un gemelo".
Era un gerente único porque tenía varias meseras que lo habían seguido de restaurante en restaurante. La razón por la que las meseras seguían a Jerry era por su actitud. Era un motivador na­tural: Si un empleado tenía un mal día, Jerry estaba ahí para decir­le al empleado cómo ver el lado positivo de la situación.
Ver este estilo realmente me causó curiosidad, así que un día fui a buscar a Jerry y le pregunté: "No lo entiendo... no es posible ser una persona positiva todo el tiempo... cómo lo haces...".
Jerry respondió: "Cada mañana me despierto y me digo a mí mismo: Jerry, tienes dos opciones hoy: Puedes escoger estar de buen humor o puedes escoger estar de mal humor. Escojo estar de buen humor. Cada vez que sucede algo malo, puedo escoger entre ser una vícti­ma o aprender de ello. Escojo aprender de ello. Cada vez que alguien viene a mí para quejarse, puedo aceptar su queja o puedo señalare el lado positivo de la vida. Escojo el lado positivo de la vida".
"Sí... claro... pero no es tan fácil", protesté.
"Sí lo es -dijo Jerry-. Todo en la vida es acerca de elecciones. Cuando quitas todo lo demás, cada situación es una elección. Tú eliges como reaccionas a cada situación. Tú eliges como la gente afectará tu estado de ánimo. Tú eliges estar de buen humor o mal humor. En resumen: TÚ ELIGES CÓMO VIVIR LA VIDA".
Reflexioné en lo que Jerry me dijo. Poco tiempo después, dejé la industria de los restaurantes para iniciar mi propio negocio. Perdimos contacto, pero con frecuencia pensaba en Jerry cuando tenía que hacer una elección en la vida en vez de reaccionar a ella.
Varios años más tarde, me enteré que Jerry hizo algo que nunca debe hacerse en un negocio de restaurante. Dejó la puerta de atrás abierta una mañana y fue asaltado por 3 ladrones armados.
Mientras trataba de abrir la caja fuerte, su mano temblando por el nerviosismo, resbaló de la combinación. Los asaltantes sintieron pánico y le dispararon. Con mucha suerte, Jerry fue encontrado relativamente pronto y llevado de emergencia a una clínica. Después de 18 horas de cirugía y semanas de terapia intensiva, Jerry fue dado de alta aun con fragmentos de bala en su cuerpo.
Me encontré con Jerry seis meses después del accidente y cuando le pregunté cómo estaba, me respondió: "Si pudiera estar mejor, tendría un gemelo".
Le pregunté qué pasó por su mente en el momento del asalto. Contestó: "Lo primero que vino a mi mente fue que debí haber cerrado con llave la puerta de atrás. Cuando estaba tirado en el piso recordé que tenía dos opciones: Podía elegir vivir o podía elegir morir. Elegí vivir".
"¿No sentiste miedo?", le pregunté.
Jerry continuó: "Los médicos fueron geniales. No dejaban de decirme que iba a estar bien. Pero cuando me llevaron al quirófano y vi las expresiones en las caras de médicos y enfermeras, realmente me asusté... podía leer en sus ojos: Es hombre muerto. Supe entonces que debía tomar acción...".
"Qué hiciste", le pregunté.
"Bueno... uno de los médicos me preguntó si era alérgico a algo y respirando profundo grité: ¡Sí, a las balas! Mientras reían les dije: ‘Estoy escogiendo vivir... opérenme como si estuviera vivo, no muerto"'.
Jerry vivió por la maestría de los médicos pero sobre todo por su asombrosa actitud. Aprendí de que cada día tenemos la elección de vivir plenamente. La actitud, al final, lo es todo.
Dios nos dio la libertad de elegir. Elige la mejor parte. Él siempre estará contigo.

Deu 30:19 "Hoy pongo al cielo y a la tierra por testigos contra ti, de que te he dado a elegir entre la vida y la muerte, entre la bendición y la maldición. Elige, pues, la vida, para que vivan tú y tus descendientes.

¿Quién verdaderamente sabe elegir?, se puede contar entre los hombres a alguien que de verdad pueda elegir con sabiduría lo bueno por sobre lo malo?, con seguridad no. Solo aquellos que son llamados por Dios a su gracia y amor, pueden descubrir la mentira que se cierne sobre la humanidad, con la cual muchos han sido engañados para perseguir sueños y placeres pasajeros. La historia nos recuerda que la vida está hecha de las elecciones que hagamos, aunque parezca que no lo hacemos, solo no optar por elegir, es elegir lo contrario, cuando no elegimos lo bueno, por ende, estamos dando cabida a lo malo, por eso quienes aprenden a discernir la verdad deben tener en cuenta que la vida se conformara según sus propias decisiones. El versículo habla sobre la capacidad de elegir que Dios ha concedido al hombre para que él pueda elegir aquello que da vida, sobre aquello que produce muerte.

GUÍA DE ESTUDIO

¿Qué estas eligiendo para tu vida, vida o muerte?
¿Qué crees que produce vida en ti?
¿Qué crees que produce muerte?

¿Porque el hombre tiende a elegir aquello que produce muerte?