MATRIMONIOS - TRABAJEMOS EN EQUIPO

MATRIMONIOS

Por: Camilo Sastoque

Ministerio Unidad de la Fe

TRABAJEMOS EN EQUIPO

Eclesiastés 4:9 Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo.

INTRODUCCIÓN

El trabajo en equipo es la fórmula del éxito en las grandes empresas y compañías del mundo, cada día se pagan miles de millones en capacitaciones para que los equipos de trabajo funcionen de forma adecuada y generen los resultados que se quieren.

No vamos a decir que el matrimonio es un negocio, pero si se parece a una empresa que necesita consolidarse con buenas herramientas de trabajo y una de ellas es el trabajo en equipo.

Un buen equipo genera resultados grandiosos en el hogar, un equipo que no trabaja unido solo genera frustración, impaciencia y cansancio.

DESARROLLO

Todos somos diferentes eso es innegable, pero cuando se trata de trabajar en equipo si nos quedamos en las diferencias no iremos a ningún lado, necesitamos encontrar lo que nos une, lo que es común para los dos cónyuges para que podamos seguir adelante y sacar avante esta empresa matrimonial.

La escritura siempre sabia nos recuerda que mejor son dos que uno, ¿porque tienen mejor paga de su trabajo?, ¿qué quiere decir esto? Que si nos unimos como pareja podremos sin lugar a dudas obtener mejores resultados que si cada uno trabaja por su propia cuenta. Esto se ve reflejado en muchos aspectos, no es lo mismo que un solo cónyuge mantenga el hogar, si los dos aportan se disminuirán las cargas y se harán más llevaderas; no es lo mismo que un solo cónyuge haga todos los oficios del hogar, lo mejor es que nos apoyemos y nos ayudemos, uno cocina, el otro lava, uno hace aseo, el otro cuida los niños, uno está cansado, el otro trabaja para que descanse y así se hace fácil las labores del hogar y se hace llevadero el matrimonio. Cuando dos cónyuges trabajan por los mismos objetivos, estos se logran rápidamente, organizadamente y no se imponen cargas difíciles de sostener, pero si esto no se logra, cada uno llevara una carga tan pesada que al final terminara generando más problemas al matrimonio.

Para formar un equipo de trabajo con su cónyuge primero aprovechen las habilidades y talentos que cada uno tiene, si uno es mejor administrador entonces que administre, si el otro produce más dinero, entonces que ahorre, procuren siempre trabajar por sueños en común, su casa, sus cosas, eso sí, siempre a la par, no solo pensando en uno mismo. Si uno es mejor con los niños entonces que ayude, pero el otro cónyuge nunca debe desentenderse de cualquier labor del hogar, si recargamos todo en alguien, este siempre terminara cansado y cargado. Otras cosas que pueden ayudarnos es que aprendamos a definir las tareas y roles del hogar de forma equitativa, que sepamos comunicarnos asertivamente con nuestro cónyuge, no a los gritos, ni de mal genio, la comunicación puede ayudarnos a crecer como pareja.

CONCLUSIÓN

Si no formamos un equipo vencedor, podemos vernos fracasando en la empresa más importante que Dios nos ha encomendado, nuestro primer o único ministerio para algunos. Dios preparo el matrimonio para hacernos madurar, crecer y amar, tú decides como conformar tu equipo.

Los equipos victoriosos siempre están bien conformados para las tareas y desafíos que enfrentaran, ¿sabes que tendrás que enfrentar conflictos, malas decisiones, heridas, problemas financieros, indecisión, conformismo, pereza, orgullo, jactancia, cosas que te irritan, derroche, mentira, injusticia?

No somos un equipo de futbol, ni una empresa para solo generar ganancias financieras, somos un equipo de amor, diseñado para respetar, servir, entregar, completar y amar a nuestro cónyuge, ¿estás dispuesto a conformar el mejor equipo de trabajo y lograr la mejor paga por nuestro trabajo? Entonces empieza a trabajar en las falencias y diferencias de tu equipo y se con tu pareja el mejor equipo que Dios les permita llegar a ser.

Oremos, Señor tu nos has enseñado que son mejores dos que uno, y queremos que eso sea una realidad en nuestras vidas, queremos ser mejores cónyuges, mejores administradores, mejores amigos, mejores escuchas, mejores siervos para nuestro cónyuge, amarlo como tu amaste a la iglesia y que podamos dar la vida en ello, amen.