domingo, 21 de febrero de 2016

PREDICA DOMINICAL - LA DOCTRINA DE LA CRUZ




PREDICA DOMINICAL
Por: Camilo A. Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

LA DOCTRINA DE LA CRUZ

Mat 10:38 y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.

INTRODUCCIÓN

Morir no es algo que el hombre conciba como normal y el morir a sus pasiones y deseos es aún peor. Sin embargo, es necesario comprender el mensaje oculto en la cruz porque sobre ella esta cimentada nuestra salvación.
La cruz es escándalo para judíos y locura para los gentiles, pues es incomprensible para la mente humana usar un elemento de tortura y muerte como un elemento para dar vida. Por eso encontramos a Pablo escribiendo a los Corintios:
1Co 1:23 pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura.
Nadie que quiera ir a Dios puede negar la cruz y la necesidad de que esta obre en la vida del creyente, pero ¿qué es la cruz? es tan solo el objeto de tortura con el que muchos reinos impartían justicia, muerte y miedo sobre sus adversarios? pues es más que eso, porque al Cristo morir en la cruz, unió cielos y tierra, así como la cruz es la union de lo vertical (lo divino), con lo horizontal (lo terrenal).

DESARROLLO

Toda la vida cristiana consiste en tomar la cruz y morir en ella. No hay otro camino para la vida y la verdadera paz interior. No existe un camino más elevado, más complejo, ni más difícil que la cruz.
Miremos lo que Pablo les menciona a los corintios antes:
1Co 1:18 Me explico: El mensaje de la cruz es una locura para los que se pierden; en cambio, para los que se salvan, es decir, para nosotros, este mensaje es el poder de Dios. 
Es contrario a la naturaleza humana llevar la cruz, amar la cruz, someter nuestro cuerpo al dominio propio, huir de los honores, sufrir las injurias, despreciarse a sí mismo y que nada de este mundo sea más importante que Dios. Pero si confías en Dios y tomas la cruz cada día, la carga te será ligera, la mansedumbre te acompañará, la obediencia será tu guía y él te dará las fuerzas para que puedas someterte a llevar la cruz.
Cuando nos sometemos a llevar la cruz con gusto y por voluntad propia, todo el peso de su carga cambia en consuelo, perseverancia y paz, que nos ayuda a sujetar nuestra naturaleza carnal de modo que esta mengue y la naturaleza divina surja.
Cuando llevamos la cruz, toda deuda que nos era contraria por el pecado desaparece, miremos:
Col 2:14 y anular la deuda* que teníamos pendiente por los requisitos de la ley.  Él anuló esa deuda que nos era adversa, clavándola en la cruz. 
Miremos lo que dice la carta a los efesios:
Efesios 2:13-18 "Pero ahora, unidos a Cristo Jesús por la sangre que él derramó, vosotros, que antes estabais lejos, habéis sido acercados. Cristo es nuestra paz. Él ha hecho de judíos y no judíos un solo pueblo, destruyendo el muro de enemistad que los separaba. En su propio cuerpo, Cristo ha puesto fin a la ley consistente en mandatos y reglamentaciones, y de ambos pueblos ha formado uno solo, nuevo y unido a él. Así ha hecho la paz. Por su muerte en la cruz, Cristo ha dado fin a las luchas entre ambos pueblos y los ha reconciliado con Dios, haciendo de ellos un solo cuerpo. Cristo ha venido a traer buenas noticias de paz a todos, tanto a vosotros, que estabais lejos de Dios, como a los que estaban cerca. Pues por medio de Cristo, unos y otros podemos acercarnos al Padre por un mismo Espíritu".
Cristo a través de la cruz a dado a fin a las luchas que existían entre aquellos que tenían la ley y aquellos que ahora reciben la gracia, para reconciliación de los hombres para con Dios y hacer de todos un solos cuerpo, su iglesia.
La cruz es símbolo de obediencia y sumisión, veamos el ejemplo de Cristo:
Filipenses 2:8 se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, hasta la muerte en la cruz.
Quien no se somete a la voluntad divina por su propio gusto a través del llevar la cruz, entonces no será capaz de morir al pecado, veamos lo que dice Pedro:
1Pe 2:24 Él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, para que nosotros muramos al pecado y vivamos una vida de rectitud. Cristo fue herido para que vosotros fuerais sanados. 

CONCLUSIÓN

Este instrumento de tortura y muerte ahora es instrumento para vida, una vida espiritual rica en amor, paz y gozo que está disponible solo para aquellos que voluntariamente toman la cruz y le siguen sin importar las consecuencias.

Esta cruz ha unido cielos y tierra, abriendo un camino para que el hombre pueda alcanzar la salvación de su alma y una eternidad en su presencia.
No podemos más que ser diligentes en la toma diaria de la cruz, con sus conflictos, dificultades, sufrimientos y dolencias para aferrarnos con gozo a una vida abundante en el espíritu, que espera por aquellos que mueren a si mismos y se entregan con devoción.

Oremos, Señor que la cruz sea símbolo de tu victoria y de nuestro deseo de alcanzar tu presencia, que podamos tomarla cada día con gozo para hacer manifiesta tu gloria a todos en nuestro ser, que ella culmine la obra poderosa de transformación que empezaste en nosotros y que tu sacrificio no quede en vano sobre nuestro ser, que la entrega sea total y despreciemos este mundo como lo que es, algo pasajero, en pos de lo eterno, amen.


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