lunes, 29 de abril de 2013

TIEMPO DE REFLEXIÓN



La familia Corona era una familia de seis hijos. El padre la mante­nía unida por medio del amor y la comprensión, pero de un día para otro el papá faltó. Con la gran pena que tenían todos, dejaron que uno de los hijos arreglara los papeles del testamento y de­más. Sin que se dieran cuenta el muchacho se apoderó de los negocios del padre, y no le importó dejar a la mamá sin nada. La familia no entendió a este hermano, y desde entonces vio con tristeza cómo su vida era totalmente vacía e incomprendida por los demás, pues lo único que lo movía era el dinero y la ambición de ser muy rico. Para él cada peso era un peso, y se las ingeniaba para averiguar la manera de despedir a sus trabajadores sin liqui­dación alguna, y cobraba lo que él llamaba favores, descontando el sueldo o de alguna otra manera. Su mamá se le acercó a él para decirle que su alma estaba vacía, y que estaba ciego de los dones que Dios le había dado; que se estaba quedando solo, pues la gran inteligencia que tenía la usaba en contra de los demás.
Dios nos da las habilidades para ayudar y ver por el bien de los otros, no para cegarnos creyendo que sólo nosotros importamos y que el mundo es el que está mal. En una reflexión familiar la mamá les dijo a los demás hermanos que los verdaderos ciegos son los que no encuentran la paz, porque ese afán de almacenar y almacenar dinero pese a quien le pese no es más que el vacío que se tiene en el alma, y que no se llenará hasta que se dé cuenta que ése no es el camino, hasta que abra los ojos dejando la ceguera que se ha provocado y encuentre el camino de Dios amando a los además, y entregándose, ayudando a salir adelante a quien más lo necesita, aportando su granito de arena para que todos los que colaboran con él tengan un mejor nivel de vida. La señora Corona pidió a sus hijos ayudar a su hermano a reflexionar cómo debe­mos ser con los demás, y por lo tanto, con nuestra familia, y a ver que esto depende de nosotros. Si entendemos que nuestro her­mano está ciego, ayudémoslo como ayudaríamos a un ciego a cruzar la calle y sigamos el ejemplo de Jesús, que nos enseña a amarlos y a ayudarlos.
Lucas 4:18   "El Espíritu del Señor está sobre mí,  porque me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres.  Me ha enviado para proclamar libertad a los presos y dar vista a los ciegos,  para poner en libertad a los oprimidos
Isa 44:18  No saben nada, no entienden nada;
 sus ojos están velados, y no ven;
 su *mente está cerrada, y no entienden.
En Isaías capítulo 44 encontramos la descripción de aquellos hijos que se han apartado del padre (Dios), son hijos que van tras deseos egoístas, que la vanidad les impide ver más allá de sus propios ojos, son tercos por más de que se les diga la verdad no la entienden, viven para satisfacer sus propios deseos sin importar lo que hacen a os demás, pues su mente y visión están bloqueados por el pecado que sobreabunda para destrucción de sus vidas, pero en Cristo encontramos redención y trasformación, en Cristo como menciona Lucas 4, él ha venido para traer libertad a los que están presos por sus deseos, vista a los que están ciegos y necesitan de nuestro amor y comprensión para ser llamados por el amor de Dios, para que dejen la opresión del pecado y puedan ver la luz resplandeciendo sobre sus vidas. Que podamos entender a aquellos que están ciegos por el odio, el rencor, la mentira y la vanidad que este mundo les ha hecho creer,, que podamos dar vista a los ciegos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo para que llenos de su Espíritu Santo demos gloria a su precioso nombre.

domingo, 28 de abril de 2013

PREDICA DOMINICAL - GRACIA Y PAZ A VOSOTROS

TEMA: GRACIA Y PAZ A VOSOTROS

Si alguna vez dijiste o declaraste la paz de Dios sobre tu vida, es tiempo para comprender porque Pablo lo hacia, así como necesitamos entender la gracia de Dios para hacer su soberana voluntad.

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miércoles, 24 de abril de 2013

ESTUDIO BÍBLICO 1 CORINTIOS 3


ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

1Co 3:1  Yo,  hermanos,  no pude dirigirme a ustedes como a espirituales sino como a inmaduros,* apenas niños en Cristo. 
Pablo no puede dirigirse a ellos como a espirituales pues aún eran inmaduros y de seguro no entenderían muchas de las revelación que él podría darles, el crecimiento del creyente debe ser progresivo, pues si no crece se estanca y detiene su desarrollo, impidiendo que la palabra de fruto en su vida o ministerio, además que impedirá el obrar de la escritura en su propia vida. Los inmaduros son aquellos que por ignorancia (falta de revelación) o por amor a sí mismos, sus tradiciones o enseñanzas erróneas no permiten que la escritura les confronte y exhorte a seguir la verdad.
1Co 3:2  Les di leche porque no podían asimilar alimento sólido,  ni pueden todavía, 
Así como los bebes deben ser alimentados con leche pues no pueden asimilar otro tipo de alimentos, sucede de igual manera con aquellos que se mantienen inmaduros solo pueden asimilar las enseñanzas y el alimento para el espíritu que son sencillas, además que dependen y se mantienen en él, mientras que los que maduran ya no dependen de lo que se les da, sino que han sido preparados para que ellos puedan buscar, pedir y recibir la revelación de la escritura sin depender de nadie para ello, sino solo del Espíritu. El alimento solido requiere de un organismo adaptado y maduro que le permita asimilar enseñanzas profundas sin prejuicios.
1Co 3:3  pues aún son inmaduros.  Mientras haya entre ustedes celos y contiendas,  ¿no serán inmaduros?  ¿Acaso no se estarán comportando según criterios meramente humanos? 
Inmaduros son aquellos que aun dependen de alguien para crecer, para mantenerse, que muestran celos ministeriales o por las ovejas, contiendas religiosas mas no por la verdad y que no toleran el alimento solido de la revelación de Dios, pues continúan aferrados a la religiosidad que les absorbe y constriñe, pues han puesto en un alto lugar los criterios humanos por encima de la palabra de Dios.
1Co 3:4  Cuando uno afirma:  "Yo sigo a Pablo",  y otro:  "Yo sigo a Apolos",  ¿no es porque están actuando con criterios humanos? 
Es común que en la iglesia se generen divisiones y contiendas por cosas triviales como a quien seguimos, cuando deberíamos aprender y tomar en cuenta cada ministerio para aprovecharlo en la edificación de la iglesia, seguir un ministerio y apoyarlo o que sea nuestro preferido no está mal, lo malo es juzgar a los otros basados en que nos creemos mejores, porque en ese momento estaremos fortaleciendo la naturaleza carnal, algunos ministerios pueden parecernos tediosos, aburridores, pero en ellos también se esconde la rica sabiduría de Dios, además que no deberíamos guiarnos a escoger un ministerio o iglesia por lo cómodo que nos sintamos o porque nos gusta, porque la iglesia debe predicar cosas que nos exhorten a la verdad, que incomoden nuestra pasividad y comodidad.
1Co 3:5  Después de todo,  ¿qué es Apolos?  ¿Y qué es Pablo?  Nada más que servidores por medio de los cuales ustedes llegaron a creer,  según lo que el Señor le asignó a cada uno. 
Solo los creyentes inmaduros juzgan todo bajo sus propios criterios, prejuicios o intereses, mientras que los que han sido disciplinados para madurar conforme al Espíritu, entonces entienden que somos un cuerpo que cada miembro sin importar su ministerio, función o don sirve al mismo propósito y que cada aporte de un hermano edifica de diferentes maneras la iglesia, además también entienden que no hay vanidad, ni vanagloria en el cumplimiento de lo que han sido llamados a hacer porque es Su gracia la que se debe evidenciar, no los talentos o habilidades de los hombres.
1Co 3:6  Yo sembré,  Apolos regó,  pero Dios ha dado el crecimiento. 
Algunos somos llamados a sembrar en palabra, otros en acciones, y otros en la música pues sembramos una semilla que no es nuestra, a Dios le pertenece, además que su crecimiento también depende de Él, por más que nos esforcemos por tratar de que crezca a nuestra manera o que se discipulen conforme a nuestra forma, lo más seguro es que lo hagan según Dios lo disponga aunque a nosotros no nos parezca.
1Co 3:7  Así que no cuenta ni el que siembra ni el que riega,  sino sólo Dios,  quien es el que hace crecer. 
Tan solo somos instrumentos que no pueden ni deben reclamar gloria alguna pues Dios es el que ha de contar e importar, a El debemos clamar para que crezcan y se mantengan. Pues si hay algún asomo de reclamo, eso pertenece al alma y la necesidad de llevar nuestro ego a la cruz.
1Co 3:8  El que siembra y el que riega están al mismo nivel,  aunque cada uno será recompensado según su propio trabajo. 
Si somos usados para una u otra tarea, aunque parezcan algunas más honrosas o más vistosas a los hombres, es Dios quien las cataloga como del mismo nivel, por eso no debe caber ningún asomo de ego o vanidad, pues la recompensa no proviene de su trabajo pues puede ser mucho o muy poco, sino de la entrega de su corazón con la que realiza la tarea encomendada. Así que dejemos de lado el afán y la activitis que satura nuestras congregaciones para dedicarnos a cultivar la virtud, la fe y el amor para vivir con devoción y entrega incondicional, para dejar de trabajar como obligación y podamos vivir para servir con amor.
1Co 3:9  En efecto,  nosotros somos colaboradores al servicio de Dios;  y ustedes son el campo de cultivo de Dios,  son el edificio de Dios. 
Pablo recalca el hecho de que somos colaboradores de un mismo equipo al servicio de un mismo Señor, y que como campo de cultivo y como edificio de Dios debemos comportarnos y servir; servimos como campo de cultivo cuando evangelizamos y compartimos el mensaje de nuestro Señor Jesucristo, y nos comportamos como su edificio cuando soportados en el fundamento que es Cristo sostenemos y soportamos con paciencia a quienes siguen adelante.
1Co 3:10  Según la gracia que Dios me ha dado,  yo,  como maestro constructor,  eché los cimientos,  y otro construye sobre ellos.  Pero cada uno tenga cuidado de cómo construye, 
Según Su portentosa gracia podemos funcionar como maestros constructores, el maestro está atento del desarrollo del proyecto y corrige los errores que surgen durante la construcción, echa los cimientos y está atento al desarrollo mientras otros construyen sobre ellos bajo la guía de Dios. Pablo nos insta a tener cuidado de como construimos para que no edifiquemos sobre sabiduría humana sino sobre el poder de Dios que es Cristo.
1Co 3:11  porque nadie puede poner un fundamento diferente del que ya está puesto,  que es Jesucristo. 
Si existe algún fundamento diferente a Cristo, la construcción  no perdura, no se mantiene o si crece  y se mantiene lo hace de manera desordenada y confusa, esto es lo que ha sucedido con muchas congregaciones en donde el fundamento dejo de ser Cristo y ahora es el hombre, la confianza en él, sus enseñanzas las que fundamentan la iglesia, lo cual no es correcto y será sacado a la luz tarde o temprano.
1Co 3:12  Si alguien construye sobre este fundamento,  ya sea con oro,  plata y piedras preciosas,  o con madera,  heno y paja, 
De igual manera así el fundamento sea Cristo, si edificamos sobre la confianza en el dinero, el hombre o las estructuras y sistemas que el hombre ha creado y mantenido, entonces también se pierde la esencia de la verdad lo cual terminara siendo descubierto tarde o temprano, pues nada puede soportar el peso de la gloria de Dios sino es por Su mismo poder y gracia.
1Co 3:13  su obra se mostrará tal cual es,  pues el día del juicio la dejará al descubierto.  El fuego la dará a conocer,  y pondrá a prueba la calidad del trabajo de cada uno. 
El juicio eterno de Dios viene desatándose contra toda impiedad desde el principio de los tiempos y sigue haciéndolo ahora, es probable que el juicio sobre estas estructuras alejadas de los principios de Dios caiga bajo Su justo juicio ahora, o al final, como ha sucedido desde el comienzo. El fuego de su presencia que recorre toda la tierra dará a conocer la naturaleza de sus fundamentos y su edificación, el fuego representa la prueba a la que debe ser sometido todo aquello que se acerca o imita la santidad de Dios, pues dependiendo de la calidad o sea la devoción profunda de cada corazón mostrara la calidad del trabajo que cada uno lleva a cabo.
1Co 3:14  Si lo que alguien ha construido permanece,  recibirá su recompensa, 
Muchas congregaciones se mantienen a través de los años a pesar de sus enseñanzas alejadas del fundamento y la edificación que da el Espíritu Santo, pero al final siempre recibirá su justa recompensa sea para bien o para dejar ver la verdad.
1Co 3:15  pero si su obra es consumida por las llamas,  él sufrirá pérdida.  Será salvo,  pero como quien pasa por el fuego. 
Las enseñanzas erróneas y la confianza en los hombres pululan las congragaciones, pero el fuego da a conocer si los fundamentos y la construcción llevan la verdad en su corazón y si no es así, sufrirá perdida pues creyó edificar como era pero solo fue engañado por su propio corazón, y aunque no perderá su salvación, si perderá lo que durante años creyó edificar.
1Co 3:16  ¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes? 
La edificación de la que se habla no es solo la iglesia, sino también de nosotros que somos templo del Espíritu Santo. Hemos de entender que Dios habita en nosotros, no está de visita, ni es un peregrino, sino que habita de continuo en nosotros, de allí que sea importante que podamos mantener y edificar bajo Su guía nuestro ser, dejando la naturaleza carnal para vivir en la espiritual.
1Co 3:17  Si alguno destruye el templo de Dios,  él mismo será destruido por Dios;  porque el templo de Dios es sagrado,  y ustedes son ese templo. 
El templo ya no es más que un lugar de congregación, pero nuestro ser se ha convertido en Su templo y como tal debe mantenerse edificado, cuidado y protegido, por la palabra y la guía de Dios.
1Co 3:18  Que nadie se engañe.  Si alguno de ustedes se cree sabio según las normas de esta época,  hágase ignorante para así llegar a ser sabio. 
Pablo nos dice que si hemos creído que somos sabios según los criterios del hombre, entonces vivimos engañados, más para vivir bajo la sabiduría de Dios, hagámonos ignorantes y dejemos de lado todo asomo de elocuencia y autoconfianza para que podamos ser enseñados y la revelación de Dios para edificación se haga real en nuestras vidas.
1Co 3:19  Porque a los ojos de Dios la sabiduría de este mundo es locura.  Como está escrito:  "Él atrapa a los sabios en su propia astucia", 
Pues para poder verla realidad necesitamos ver con los ojos de Dios, ver como Dios ve las cosas, solo así entenderemos que tratar de edificar o poner fundamentos en nuestras propias fuerzas solo evidencia la locura que vive este mundo apartado de Dios, pues aunque creamos o pretendamos que nuestra astucia puede dar logros extraordinarios, su fuego siempre caerá y dejara ver la realidad.
1Co 3:20  y también dice:  "El Señor sabe que los pensamientos de los sabios son vanos." 
El pensamiento de aquellos que llamamos sabios, son solo la muestra de su propia vanidad, ninguna mente por mas erudita puede llegar a comprender los designios de Dios, solo aquellos que se humillan y reconocen el llamado de Dios, pueden entender.
1Co 3:21  Por lo tanto,  ¡que nadie base su orgullo en el hombre!  Al fin y al cabo,  todo es de ustedes, 
alejémonos de la autoconfianza, del orgullo y la vanidad para que podamos reconocer que la obra no es nuestra es de Dios y si es suya y permanecemos en El entonces somos uno en El y también todo es nuestro en El.
1Co 3:22  ya sea Pablo,  o Apolos,  o Cefas,  o el universo,  o la vida,  o la muerte,  o lo presente o lo por venir;  todo es de ustedes, 
todo es nuestro en unidad con El, pues ya no vivimos como islas Separadas sino como un todo unido que permanece y se mantiene por El y para El, el universo, la vida, la muerte, el tiempo dejan de mantenerse para estar en El.
1Co 3:23  y ustedes son de Cristo,  y Cristo es de Dios. 
Los celos, envidias y contiendas entre los hermanos solo muestra la inmadurez y la necesidad de ser edificados sobre el fundamento, sobre la roca que es Cristo, todo debe ser puesto sobre una confianza pura en El, si esta no existe será en vano lo que se construya o edifique, porque no permanecerá bajo el juicio de Dios, si somos de Cristo, somos de Dios y somos en El, haremos lo que El determina, para gloria y honra de Su nombre.

lunes, 22 de abril de 2013

TIEMPO DE REFLEXIÓN



Dos piedrecitas vivían en medio de otras, en el lecho de un torrente. Se distinguían entre todas porque eran de un intenso color azul. Cuando les llegaba el sol, brillaban como dos pedacitos de cielo caídos al agua. Conversaban sobre lo que serían cuando alguien las descubriera: "Acabaremos en la corona de una reina" se decían.
Un día fueron recogidas por una mano humana. Durante un tiem­po estuvieron sofocándose en diversas cajas, hasta que alguien las tomó y oprimió contra una pared, igual que otras, introducién­dolas en un lecho de cemento pegajoso. Lloraron, suplicaron, insultaron, amenazaron, pero dos golpes de martillo las hundieron todavía más en aquel cemento.
A partir de entonces sólo pensaban en huir. Trabaron amistad con un hilo de agua que, de cuando en cuando, corría por encima de ellas y le decían: "Fíltrate por debajo de nosotras y arráncanos de está maldita pared".
Así lo hizo el hilo de agua y al cabo de unos meses las piedrecitas ya bailaban un poco en su lecho. Finalmente, en una noche húme­da, las dos piedrecitas cayeron al suelo y yaciendo por tierra echa­ron una mirada a lo que había sido su prisión. La luz de la luna iluminaba un espléndido mosaico. Miles de piedrecitas de oro y de colores formaban la figura de Cristo.
Pero en el rostro del Señor había algo raro, estaba ciego. Sus ojos carecían de pupilas. Las dos piedrecitas comprendieron. Eran ellas las pupilas de Cristo. Por la mañana un sacristán distraído tropezó con algo extraño en el suelo. En la penumbra pasó la escoba y las echó al cubo de basura.
Cristo tiene un plan maravilloso para cada uno y, a veces, no lo entendemos y por hacer nuestra propia obra, malogramos lo que él había trazado. Somos las pupilas de Cristo. Él nos necesita para que, a través de nosotros, pueda llevar el amor al mundo.
Eph 1:11  En Cristo también fuimos hechos herederos,* pues fuimos predestinados según el plan de aquel que hace todas las cosas conforme al designio de su voluntad,
La voluntad de Dios parece a veces algo difícil de entender pero no es así, muchas veces batallamos, luchamos y nos incomodamos por las cosas que vivimos, pero si saber la voluntad de Dios que es buena, perfecta y agradable siempre llega a tiempo para gloria y honra de Su nombre. El hombre siempre busca hacer su propio camino, siempre está intentando ser dueño de su destino y así lo es pues el libre albedrío lo permite, el problema de ser dueño de tu destino es que cualquier decisión equivocada también te hará responsable de las consecuencias, Cristo ha dispuesto una herencia para aquellos que siguen el plan que ha trazado para sus vidas que solo se trata de dejarlo fluir, sin más luchas, ni peleas, tan solo mueres para que puedas vivir en El. Tratar de tomar el control nos llena de angustia, afán, envidia y codicia, tratar de tomar el control es cuestión de ego, pues solo intentas mantenerte abrazando lo viejo, cuando Dios te llama a fluir en lo nuevo de su presencia.

domingo, 21 de abril de 2013

PREDICA DOMINICAL - PARA GLORIA DE SU NOMBRE

TEMA: PARA GLORIA DE SU NOMBRE

Muchas veces pensamos que es lo que hacemos aquí , cual es nuestro propósito?, pero en este mensaje encontraras la claridad que has buscado y entenderás que la gloria de Dios manifiesta su presencia y da propósito a nuestras vidas.

Link de descarga:
http://www.4shared.com/music/dGInfVq8/PARA_ALABANZA_DE_SU_GLORIA.html


miércoles, 17 de abril de 2013

ESTUDIO BÍBLICO 1 CORINTIOS 2


ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

1Co 2:1  Así que,  hermanos,  cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios,  no fui con excelencia de palabras o de sabiduría. 
El desarrollo intelectual griego fue un elemento importante en la preparación del camino para el evangelio, pero no logró regenerar al mundo, lo que demostró que para esto hacía falta un poder sobrehumano, por esta razón Pablo y de igual manera nosotros debemos aprender cada día a confiar en Su poder y no en nuestras habilidades o conocimientos, pues la obra no crece por nosotros sino por El.
1Co 2:2  Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo,  y a éste crucificado. Pablo nos da la clave para poder manifestar el poder de Dios, la negación de sí mismo por lo tanto se propuso anunciar el evangelio lejos de sus posibilidades y consagrar su mente y corazón para dar a conocer a Cristo y la cruz.
1Co 2:3  Y estuve entre vosotros con debilidad,  y mucho temor y temblor; 
Cuando Pablo menciona su debilidad hace grande la gracia por la cual fue llamado y redimido en Cristo, reconocer esta verdad es humillarse y someterse a Dios reconociendo su inmenso amor inmerecido. Su temor y temblor eran debidos a la seriedad y compromiso por su misión.
1Co 2:4  y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría,  sino con demostración del Espíritu y de poder, 
Hablar de manera persuasiva es muy eficaz para atraer a las personas, pero no para transformarlas, pues esta última solo depende del poder de Dios en el Espíritu. Ni sus palabras en privado, ni su predicación en público fueron persuasivas en métodos humanos como la retórica o la filosofía, sino por la operación, demostración y manifestación del Espíritu de Dios en él, afectando los corazones y las vidas de sus oyentes de manera permanente.
1Co 2:5  para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres,  sino en el poder de Dios. 
Es decir, para que no deba su origen ni su continuación “a la sabiduría de hombres”. Solo mediante la afectación permanente de los oyentes por el poder de Dios para su transformación puede fundamentar nuestra fe y confianza en el Señor, pues también fortalece sus cimientos para seguir al Señor sin importar las consecuencias.
1Co 2:6  Sin embargo,  hablamos sabiduría entre los que han alcanzado madurez;  y sabiduría,  no de este siglo,  ni de los príncipes de este siglo,  que perecen. 
Sin embargo, la predicación del evangelio, lejos de ser contraria a la verdadera “sabiduría” es una sabiduría infinitamente superior a la de los sabios del mundo. La sabiduría que se menciona allí no consiste en la doctrina sino en los principios y misterios espirituales profundos que son comprendidos y aplicados por los que han madurado en su fe, sólo aquellos que se han perfeccionado en la experiencia y el conocimiento cristianos, pueden comprender la verdadera sabiduría. Los que han sido perfeccionados en Cristo son distintos no solamente de los hombres mundanos y carnales, sino también de los niños en Cristo, que si bien están “en Cristo,” retienen mucho de lo “carnal,” y no pueden por tanto entender las verdades profundas de la escritura.
1Co 2:7  Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio,  la sabiduría oculta,  la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria, 
los misterios y la sabiduría oculta que menciona Pablo son el desenvolvimiento de los tesoros del conocimiento espiritual, una vez escondidos, en los consejos de Dios mas ahora anunciados a todos, los cuales serán comprendidos inteligentemente en proporción a la medida en que la vida interior del oyente sea transformada a la imagen de Cristo. Hablamos de algo que una vez fue oculto, pero que ahora es revelado; está oculto a los que han sido segados por el príncipe de este mundo, pero ha sido revelado a los que por su gracia hoy le reciben como Señor y Salvador para que su gloria sea también la nuestra. Estos misterios no sólo existieron antes que la sabiduría del mundo, sino que han existido eternamente antes que el mundo mismo con sus siglos.
1Co 2:8  la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció;  porque si la hubieran conocido,  nunca habrían crucificado al Señor de gloria. 
Nadie que habiendo conocido o entendido los misterios que se esconden en la escritura acerca de la redención y la salvación que traería Cristo, hubiese permitido que Él hubiese sido crucificado
1Co 2:9  Antes bien,  como está escrito:
 Cosas que ojo no vio,  ni oído oyó,
 Ni han subido en corazón de hombre,
 Son las que Dios ha preparado para los que le aman. 
Esta cita inspirada en Isa 64:4, expresa que nadie, oh Dios, fuera de ti ve o comprende estos misterios, y Dios nos los ha revelado por su Espíritu.
1Co 2:10  Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu;  porque el Espíritu todo lo escudriña,  aun lo profundo de Dios. 
Los secretos de la revelación están velados para algunos, no porque aquellos que los conocen no quieran revelarlos, sino porque aquellos que los escuchan no tienen la voluntad, o el poder, para comprenderlos. Por tanto, sólo aquellos que son enseñados por el Espíritu conocen estos secretos, pues el Espíritu que todo lo escudriña o examina en nuestro ser, aun las profundidades más inhóspitas de Dios las conoce, el Espíritu se deleita en explorar las infinitas profundidades de su propia mente divina para revelárnoslas conforme a nuestra capacidad para comprenderlas. Esto prueba la personalidad y la divinidad del Espíritu Santo. La divinidad no puede ser separada del Espíritu de Dios, así como la humanidad no puede ser separada del espíritu del hombre.
1Co 2:11  Porque  ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre,  sino el espíritu del hombre que está en él?  Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios,  sino el Espíritu de Dios. 
Que hombre conoce las cosas del hombre sino su propio espíritu que está en unidad en él, de igual manera el Espíritu Santo que habita en unidad con el Padre puede conocer la esencia de Dios que está en sí mismo.
1Co 2:12  Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo,  sino el Espíritu que proviene de Dios,  para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, 
y ya que por gracia hemos recibido este precioso don, que es su Espíritu, para que podamos entender lo que nos ha sido concedido como la salvación, la redención, la justificación en Cristo.
1Co 2:13  lo cual también hablamos,  no con palabras enseñadas por sabiduría humana,  sino con las que enseña el Espíritu,  acomodando lo espiritual a lo espiritual. 
Y ya que estos son términos de sabiduría espiritual no solo los hablamos sino que también los comprendemos, de modo que por la enseñanza del Espíritu acomodamos la inspiración y revelación divina aplicando las palabras espirituales a las cosas espirituales. Por eso entender ciertos conceptos espirituales es tan complicado para los que apenas comienzan en la fe o para los que permanecen inmaduros, mientras  que para los han sido perfeccionados por el Espíritu Santo entender o comprender ciertas revelaciones se hace más fácil.
1Co 2:14  Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios,  porque para él son locura,  y no las puede entender,  porque se han de discernir espiritualmente. 
Ser guiado y enseñado por el Espíritu como el apóstol Pablo, requiere sujetar y dar muerte a la naturaleza carnal y a todo argumento, que permanece  en el hombre, para que aprenda a discernir lo espiritual libre de la influencia de la lógica, el pensamiento y la emoción. Para quien trata de percibir la guía del Espíritu mediante la intuición debe aprender a dejar de lado su naturaleza carnal, nadie en quien la naturaleza carnal del hombre domine puede entender o discernir lo espiritual porque para él está fuera de toda lógica y se hacen infructuosos sus intentos por comprenderlo, pues han de ser percibidos por el espíritu del hombre.
1Co 2:15  En cambio el espiritual juzga todas las cosas;  pero él no es juzgado de nadie. 
Mientras el hombre carnal, o sea aquel quien es dominado por su naturaleza carnal no puede ni siquiera discernir y juzgar las intenciones que provienen de su propio corazón como podrá entonces discernir las cosas que provienen del espíritu, en cambio el espiritual lo juzga o discierne todo pues no está sujeto a su vieja naturaleza, sino que en cambio la domina en el Espíritu  y por la guía del Espíritu puede juzgar y discernir la verdad, quien puede entonces juzgarle si lo que él entiende, juzga o discierne es la verdad?. La iglesia y el creyente son infalibles e impecables, sólo en proporción al grado en que sean guiados por el Espíritu. 
1Co 2:16  Porque  ¿quién conoció la mente del Señor?  ¿Quién le instruirá?  Mas nosotros tenemos la mente de Cristo. Quien conoce la verdad?, quien le instruye o enseña? sino el Espíritu que es el único que tiene acceso a ella y nos la puede dar a conocer, por eso solo mediante el crecimiento y disciplina espiritual a la que se somete voluntariamente el creyente puede alcanzar a discernir el pensamiento o la mente de Cristo. 

lunes, 15 de abril de 2013

TIEMPO DE REFLEXIÓN



Siempre estuve segura de que me había tocado la mamá más mala del mundo. Desde que era muy pequeña, me obligaba a desayunar o a tomar algo por la mañana. Antes de ir a la escuela, por lo menos debía tomar leche, mientras que otras madres ni se ocupaban de eso. Me hacía un sándwich o me daba una fruta, cuando los demás niños podían comprar papitas y comer otras cosas ricas. ¡Cómo me molestaba eso! Y también sus palabras: "Come. ¡Anda! i No dejes sin terminar! ¡Acaba! ¡Hazlo bien! ¡Vuelve a hacerlo!". Y así siem­pre... Violó las reglas al poner a trabajar a menores de edad, y me obligaba a tender mi cama, a ayudar en la preparación de la comida y hacer algunos mandados. El más horrible era ir por las tortillas con ese calor y las largas filas. ¡Cuánto trabajo!
Fui creciendo y mi mamá se metía en todo: "¿Quiénes son tus ami­gas? ¿Quiénes son sus mamás? ¿Dónde viven?..". Lo peor fue cuando empecé a tener amigos. Mientras las otras amigas los po­dían ver a escondidas, yo los tenía que pasar a la sala y presentar­los. ¡Era el colmo! Y el interrogatorio de costumbre: "¿Cómo te llamas? ¿Dónde vives? ¿Qué estudias? ¿Trabajas?..". Los quehaceres fueron en aumento... que barre, que arregla el clóset, todo eso era enfadosísimo. Los años también pasaron. Me casé e inicié una nueva familia. Ahora soy madre también, y en este 10 de mayo me he acercado a dar gracias al Señor por mi mamá.
Gracias al cuidado que tuvo con mis alimentos crecí sana y fuerte, y cuando llegué a enfermarme me cuidó con mucho cariño. Gracias a la atención que puso en mis tareas logré terminar mi carrera. Gracias a que me enseñó a hacer labores en la casa ahora tengo mi hogar limpio y ordenado y sé administrar mi hogar. Gracias al cuidado que puso para que yo escogiera a mis amigas aún conservo algunas, que son un verdadero tesoro... Gracias a que conoció a mis amigos, pude darme cuenta quién era el mejor y ahora es mi esposo. "Gracias, Señor", le dije desde el fondo de mi corazón, "por darme' a mi mamá, a mi mamá querida, a quien sólo le vi defectos y no cualidades, a esa mamá, que me ha amado tanto y me formó tan bien. Sólo te pido, Señor, que ahora que tengo mis hijos, me consideren la mamá más mala del mundo".
Heb 12:11  Ciertamente,  ninguna disciplina,  en el momento de recibirla,  parece agradable,  sino más bien penosa;  sin embargo,  después produce una cosecha de justicia y paz para quienes han sido entrenados por ella.
Muchas veces creemos que lo que hacen o hicieron nuestros padres fue o es tan molesto, pero si miramos muchas de las cosas y virtudes que podemos disfrutar hoy como la educación, los valores, los principios y nuestra Fe son debidas a esos años en que queríamos hacer lo que mejor nos parecía y nuestros padres no nos lo permitían sino que intervenían allí para disciplinarnos con cosas que al principio nos parecían tediosas como tender la cama, pero que hoy cuando tiendo mi cama me doy cuenta que fue sencilla la orden siempre ha sido y será importante la disciplina que adquirí al hacerlo, y que aquellas cosas en las que no se me disciplino, me han costado más para poderlas realizar, que clase de padres espirituales y naturales somos, unos alcahuetas o unos padres amorosos pero disciplinadores para formar una generación que cambie el mundo. Como el versículo menciona ninguna disciplina es causa de gozo, o quien es capaz o fue capaz de decir, que gusto tener que levantarse o madrugar para ir al colegio, de seguro “nadie”, pero al final eso nos ha permitido levantarnos temprano para aprevechar el tiempo, o para ser puntuales, y de seguro para muchas otras cosas más, recuerdo que no me gustaba que me pusieran en el colegio a leer libros tediosos, pero hoy cuando disfruto la lectura de un buen libro, me doy cuenta que eso provino de lo que me inculcaron aun en el colegio, que podamos dar y soportar la disciplina que proviene de Dios para perfeccionarnos, y así dar mejores frutos de bendición para la familia, la iglesia y la sociedad. Que aunque nos consideren cansones, aburridos, y otras cosas más, al final entenderán como la chica de la historia, bendiciones.

domingo, 14 de abril de 2013

PREDICA DOMINICAL - USTEDES SON EL CUERPO DE CRISTO

PREDICA DOMINICAL

La iglesia parece aveces todo menos un cuerpo, pues cada uno funciona como le parece, parecen tener visiones diferentes, y el apoyo es algo que se deja para cada denominación, que podamos empezar a funcionar como un cuerpo, que podamos aprovechar cada ministerio, don y talento para edificar a la iglesia de Jesucristo.

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miércoles, 10 de abril de 2013

ESTUDIO BÍBLICO 1 CORINTIOS 1


ESTUDIO BÍBLICO
Por: Camilo Sastoque


1Co 1:1  Pablo,  llamado por la voluntad de Dios a ser apóstol de Cristo Jesús,  y nuestro hermano Sóstenes, El llamamiento de Pablo al ministerio es nombrado por el para sostener que no es por voluntad humana, sino por su infinita gracia y que fue llamado a servir a los creyentes y no a que estos le sirvieran, su definición como apóstol de Cristo tan solo define su fin último que era servir como enviado de Cristo a los que por su gracia y voluntad han sido llamados a alcanzar la salvación, no como mérito propio o por sus acciones sino solamente descansando en el salvador, reconociendo con humildad su dependencia en Cristo. Y hace referencia a Sostenes como hermano en la fe para confirmarlo ante los creyentes que no le conocían.
1Co 1:2  a la iglesia de Dios que está en Corinto,  a los que han sido santificados en Cristo Jesús y llamados a ser su santo pueblo,  junto con todos los que en todas partes invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo,  Señor de ellos y de nosotros: y refiere su carta a los santificados en Cristo, pues han sido separados y apartados,  lavados por su sangre, han sido redimidos del dominio del pecado y ahora le siguen como Señor y Salvador, llamados a conformar su pueblo y reino. Hemos sido llamados a una particular vocación que es la de seguirle mientras somos santificados y perfeccionados en El. Esta es la verdadera iglesia católica (o universal que es la traducción de católica); la que no se compone de los que se llaman de Pablo, ni de Pedro (Cefas), ni de ningún otro eminente líder, sino de todos aquellos que, estén donde estuvieren, invocan a Jesús por Señor suyo en sinceridad de corazón. Además sugiere una unidad general de disciplina y de doctrina en las varias iglesias que eran conformadas por creyentes. El término santificados está en el original como un verbo aoristo, que quiere decir que es una acción continua y permanente, así que la santificación no ocurre por designio humano, sino por la obra permanente del Espíritu Santo en nosotros.
1Co 1:3  Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo les concedan gracia y paz. Gracia y paz son atributos del Espíritu necesarios para establecernos, afirmarnos, conocernos y recibir las bendiciones y la abundancia riqueza en cosas espirituales dispuestas por el Padre para los santificados en Cristo.
1Co 1:4  Siempre doy gracias a Dios por ustedes,  pues él,  en Cristo Jesús,  les ha dado su gracia. La gratitud proviene de un corazón perfeccionado en cada circunstancia por el Espíritu, en quien nos es dada una medida de su gracia para cumplir el propósito al cual somos llamados. Su gracia nos hace reconocer de donde fuimos sacados, nuestra dependencia y necesidad de El para nuestro sustento tanto espiritual como material.
1Co 1:5  Unidos a Cristo ustedes se han llenado de toda riqueza,  tanto en palabra como en conocimiento. La unidad es el estado perfecto en que convivimos con Dios por medio de su Espíritu, en el cual recibimos todo conocimiento de la escritura en nuestras mentes y su entendimiento en nuestro corazón para ponerlo por obra. Aquí se hace referencia clara a que las riquezas que poseemos en Cristo son espirituales y están destinadas a llamar a los elegidos.
1Co 1:6  Así se ha confirmado en ustedes nuestro testimonio acerca de Cristo, Cuando somos unidos en Cristo, el testimonio que recibimos de la palabra se convierte en una realidad que nos confirma y da confianza a nuestro ser de la verdad.
1Co 1:7  de modo que no les falta ningún don espiritual mientras esperan con ansias que se manifieste nuestro Señor Jesucristo. A través de la misma escritura podemos comprender y entender que nos han sido dadas todas las cosas en Cristo, mientras esperamos con paciencia la manifestación de Cristo en nuestras vidas y su segunda venida. El verbo griego para esperar expresa la idea de “aguardar constantemente, no por un tiempo determinado, sino hasta el fin, hasta que acontezca el evento esperado”.
1Co 1:8  Él los mantendrá firmes hasta el fin,  para que sean irreprochables en el día de nuestro Señor Jesucristo. Por medio de nuestra unidad con Cristo en el Espíritu, la cual se perfecciona a través de la oración y el sufrimiento que nace de negarse a sí mismo, podemos ser perfeccionados y mantenernos irreprochables hasta el día de Jesucristo, el cual hace referencia a su segunda venida. Hasta el fin hace referencia hasta el cumplimiento de su propósito en nosotros y con la humanidad.
1Co 1:9  Fiel es Dios,  quien los ha llamado a tener comunión con su Hijo Jesucristo,  nuestro Señor. Digno de confianza es Dios, que nos llamó a tener Koinonia termino griego que significa comunión, que expresa participación, interacción, beneficio, ayuda, compañerismo, comunión, contribución, dispensación, ofrenda, y participación, en El, con sus sufrimientos, en sus promesas y su herencia.
1Co 1:10  Les suplico,  hermanos,  en el nombre de nuestro Señor Jesucristo,  que todos vivan en armonía y que no haya divisiones entre ustedes,  sino que se mantengan unidos en un mismo pensar y en un mismo propósito. Pablo ruega porque en el nombre de Cristo vivamos en armonía, un perfecto orden de prioridades, necesidades y acciones, para que siendo completados unos con otros podamos mantener un mismo pensar y un mismo propósito. Nos habla de un mismo o solo pensar, entendimiento, sentimiento o voluntad, lo cual nos permite entender que esto procede de un sometimiento del alma a la voluntad divina, la cual evitar las divisiones o conflictos, pues no irán por sus propios intereses sino por los de aquel que los envió, y cuando habla de un mismo propósito abarca un mismo parecer, consentimiento, decisión, o consejo que le permita a la iglesia mantenerse bajo los preceptos y la guía divina.
1Co 1:11  Digo esto,  hermanos míos,  porque algunos de la familia de Cloé me han informado que hay rivalidades entre ustedes. Es una estrategia del enemigo despertar en la iglesia, sobre todo en aquellos que son inmaduros en la fe, que se puedan despertar divisiones, conflictos, rivalidades, pues aun no entienden la voluntad del Padre que trabaja con nuestras debilidades para perfeccionarnos, las divisiones conflictos o rivalidades son instigadas a la mente de los creyentes que aún no han sometido sus mentes a su voluntad y dominio propio, para evitar que este tipo de ideas, pensamiento o acciones sean hechas, de allí que la reprensión y la exhortación sean necesarias para llamar a la cordura a los inmaduros que se dejan llevar por esta clase de inconvenientes.
1Co 1:12  Me refiero a que unos dicen:  "Yo sigo a Pablo";  otros afirman:  "Yo,  a Apolos";  otros:  "Yo,  a Cefas";  y otros:  "Yo, a Cristo." Mostrar sus preferencias o aun sus deseos es muestra de un ego que no ha sido sometido a la cruz, que hace valer sus preferencias sin dar lugar a la unidad en el Espíritu Santo, pues si seguimos a uno o al otro de igual manera seguimos al autor y consumador de nuestra salvación que es Cristo, y si en ellos habita Cristo y en el estamos unidos, entonces no deberíamos hacer valer nuestras preferencias. La iglesia buscaba gloriarse en la gloria de aquel a quien preferían, Pablo rehusaba ser adulado por aquellos que usaban su nombre en los partidos, no haciéndose así cómplice en la deshonra hecha a Cristo Estos probablemente eran de los convertidos bajo su ministerio. Pablo aunque no tenía una predicación que cautivara a la audiencia, tenía el poder de Dios que le acompañaba y confirmaba la gracia de su llamado, por lo tanto algunos se valían de ello para definir sus preferencias, otros seguían a Apolos, un discípulo que al parecer tenía una retórica que le gustaba a las masas, por lo que muchos otros le seguían, así mismo Cefas (nombre hebreo de Pedro) era seguido por los judaizantes quienes seguía a Pedro por defender la circuncisión, pero aunque cada uno tuviese una forma diferente de hablar, enseñar y de carisma, todos debían ser uno en Cristo.
1Co 1:13  ¡Cómo!  ¿Está dividido Cristo?  ¿Acaso Pablo fue crucificado por ustedes?  ¿O es que fueron bautizados en el nombre de Pablo? La división, la contienda, y las discusiones se presentan debido a la inmadurez del creyente que no ha sujetado su alma bajo la disciplina del Espíritu, con la cual toda preferencia o egoísmo queda sujeto a muerte. La unidad de su cuerpo no debe ser coartada por aquellos que dividen a los hermanos según sus enseñanzas. La unidad es el estado perfecto entre los hermanos a quienes debemos confirmar la fe. Pablo llama a la sensatez mencionando la cruz y el bautismo, como normas de vida del creyente, quien se bautiza para confirmar su fe en Cristo, y quien lleva la cruz a la cual se somete voluntariamente para hacer la voluntad de Dios.
1Co 1:14  Gracias a Dios que no bauticé a ninguno de ustedes,  excepto a Crispo y a Gayo, El oficio de bautizar tocaba a los diáconos (Act_10:48) más bien que a los apóstoles, cuyo oficio era el de establecer las iglesias y dirigirlas de una manera general. Los diáconos tenían mejor oportunidad para dar la necesaria instrucción preparatoria para el bautismo. De modo que Crispo y Gayo, fueron probablemente de los primeros convertidos, y por tanto fueron bautizados por Pablo mismo, el que fundó la iglesia.
1Co 1:15  de modo que nadie puede decir que fue bautizado en mi nombre. Para que ninguno se gloríe de nada de lo que se haga con los creyentes, ninguna instrucción, ninguna doctrina o enseñanza, ninguna palabra de ánimo o aliento, ninguna sanidad o milagro, ningún predicador es mayor que su Señor quien permite que tengamos todo aquello, de allí que ninguna función cumplida en el ministerio debe ser usada como vanagloria ante los hombres.
1Co 1:16  Bueno,  también bauticé a la familia de Estéfanas;  fuera de éstos,  no recuerdo haber bautizado a ningún otro.
1Co 1:17  Pues Cristo no me envió a bautizar sino a predicar el evangelio,  y eso sin discursos de sabiduría humana,  para que la cruz de Cristo no perdiera su eficacia. Cada uno de nosotros es llamado a una misión específica dentro del cuerpo de Cristo que nos une con todos los que prestan cualquier servicio a la iglesia, Pablo fue llamado a predicar el evangelio y aunque bautizo a algunos como menciona la escritura, sabía que su enfoque ministerial era hacia la predicación y enseñanza de la escritura en los cuales no apelaba a la sabiduría de los hombres como seguramente hacían y siguen haciendo muchos predicadores, pues sabía que apelar a las emociones o el pensamiento del hombre no sirve sino para conseguir falsos seguidores que sin el poder de Dios para arrepentimiento, de nada sirve y hace infructuosa la cruz de Cristo.
1Co 1:18  Me explico:  El mensaje de la cruz es una locura para los que se pierden;  en cambio,  para los que se salvan,  es decir,  para nosotros,  este mensaje es el poder de Dios. Las buenas nuevas o el mensaje de la cruz ante la sabiduría humana no pasa de ser una locura, pues para los que están apartados de Dios la sabiduría humana es la norma o tendencia de vida, mientras que para nosotros que hemos recibido la enorme gracia que nos acerca a Dios, este mensaje contiene y revela el poder de Dios a nuestras vidas. La palabra de la cruz es el poderoso instrumento de la salvación, la más alta demostración del poder de Dios (Rom_1:16). Lo que parece a la gran mayoría insensatez o falta de razonamiento es la forma en que Dios decidió esconder la verdadera sabiduría del mundo que se pierde.
1Co 1:19  Pues está escrito:  "Destruiré la sabiduría de los sabios;  frustraré la inteligencia de los inteligentes."* En Isa_29:14 se revela este pasaje el cual haya cumplimiento en la predicación del evangelio en donde Pablo, por inspiración divina, da la interpretación del pasaje mostrando que el mensaje de Dios destruye todo argumento y sabiduría humana, y frustra la inteligencia de los que el mundo llama iluminados o entendidos. Podemos conocer la escritura pero sin revelación por el poder de Dios esta no es nada, solo es un libro más que contiene maravillosas historias, pero no transformara a menos que Dios de la gracia para entenderlo.
 1Co 1:20  ¿Dónde está el sabio?  ¿Dónde el erudito?  ¿Dónde el filósofo de esta época?  ¿No ha convertido Dios en locura la sabiduría de este mundo? Han sido llamados los sabios de este mundo a develar los secretos escondidos de este libro pero ninguno de ellos ha logrado descifrarlos, sus misterios solo están disponibles para los que por su gracia han sido llamados. Dios no apelo a la sabiduría de los hombres para llamarlos, pues aquellos que dicen o se llaman sabios solo están cegados por su orgullo con el cual es imposible conocerle.
1Co 1:21  Ya que Dios,  en su sabio designio,  dispuso que el mundo no lo conociera mediante la sabiduría humana,  tuvo a bien salvar,  mediante la locura de la predicación,  a los que creen. El mensaje de la cruz ha de llamar a los elegidos, pues aunque suene a locura y a cuento fantástico, es la verdad y con ella se ha destruido todo argumento en contra de la sabiduría de Dios, mientras que la sabiduría de los hombres presenta argumentos y cuestionamientos, la de Dios no tiene cuestionamiento para quienes son llamados. No existe otro mensaje, la cruz y solo la cruz ha de llamar a los que creen, para que nos sean engañados y caigan en los argumentos de vanas filosofías en las que muchos se pierden por su inmadurez.
1Co 1:22  Los judíos piden señales milagrosas y los gentiles buscan sabiduría, Hoy sucede igual los creyentes inmaduros buscan señales que confirmen la fe que dicen profesar, así como los judíos buscaron en Jesús señales y pruebas de su deidad y aunque las tuvieron sin la gracia para poderlas entender y recibir no hay transformación; los gentiles, los ateos, y las otras religiones buscan vanas filosofías o formas de pensar para entender los misterios de la vida, pero sin la fe que proviene de la gracia en Cristo es imposible.
1Co 1:23  mientras que nosotros predicamos a Cristo crucificado.  Este mensaje es motivo de tropiezo para los judíos,  y es locura para los gentiles, Por eso no debemos apelar a las emociones, el pensamiento o la sabiduría humana para llamar a los perdidos, debemos predicar el mensaje de la Cruz, un duro e incomprensible mensaje para el mundo pero dulce manjar para quienes le hayan. La cruz nunca ha sido ni será fácil de predicar, pues parece un hecho ilógico que alguien siendo Dios, decida por amor entregarse en una muerte humillante y despreciable para los mismos judíos, cargando el pecado que apartaba a la humanidad de Dios para abrir una brecha que nos permitiera acercarnos y reconciliarnos con El.
1Co 1:24  pero para los que Dios ha llamado,  lo mismo judíos que gentiles,  Cristo es el poder de Dios y la sabiduría de Dios. Muchos podrían pensar que el poder de Dios está en los milagros o en las señales donde obras maravillosas deslumbran los corazones de los hombres, otros podrían pensar que la sabiduría de Dios se halla en sus palabras, pero debemos comprender que Jesús es el poder y la sabiduría de Dios, dado a los hombres como ofrenda de un Dios de amor. En Jesús se hayan todos los misterios, toda sabiduría y poder, en El están unidos cielos y tierra (Colosenses 1:16-20), en El, por El y para Él se haya todo.
1Co 1:25  Pues la locura de Dios es más sabia que la sabiduría humana,  y la debilidad de Dios es más fuerte que la fuerza humana. La locura de Dios, esto es, su plan de salvación por medio del mensaje de la Cruz, que los hombres juzgan como “locura”, es más sabio que cualquier forma de pensar humana, y lo débil de Dios que es Cristo y su iglesia quienes en debilidad se entregan y consagran para que Dios les perfeccione en amor, es más fuerte que cualquier fuerza humana.
1Co 1:26  Hermanos,  consideren su propio llamamiento:  No muchos de ustedes son sabios,  según criterios meramente humanos;  ni son muchos los poderosos ni muchos los de noble cuna. Lo que el apóstol detalla es la debilidad de los instrumentos que el Señor emplea y seguirá empleando para llamar a los perdidos, toda la historia de la expansión de la iglesia es una victoria progresiva de los ignorantes sobre los eruditos, de los humildes sobre los arrogantes, de los vencidos sobre los vencedores.
1Co 1:27  Pero Dios escogió lo insensato del mundo para avergonzar a los sabios,  y escogió lo débil del mundo para avergonzar a los poderosos. Dios ha escogido aquello que a los ojos del mundo podría llamarse insensato, aquellos que andando antes en pecado ahora han sido liberados para avergonzar y mostrar lo vergonzoso de la sabiduría humana, y aun los que reconocen su debilidad ante el mundo, son usados por Dios para desnudar y avergonzar a los poderosos.
1Co 1:28  También escogió Dios lo más bajo y despreciado,  y lo que no es nada,  para anular lo que es, Dios también escogió lo que parece nada, lo despreciado, lo bajo, lo pobre, lo miserable, lo incomprendido, lo necio y aun a lo terco para anular lo que ante la humanidad parece tener un concepto de verdad.
1Co 1:29  a fin de que en su presencia nadie pueda jactarse. Para que un día cuando todos comparezcamos ante Dios nadie pueda jactarse, para que ninguna obra o argumento presentado por la humanidad tenga acogida en su presencia, pues ha sido apartado de su gracia para deshonrar a los que pusieron su confianza en sí mismos antes que en Dios.
1Co 1:30  Pero gracias a él ustedes están unidos a Cristo Jesús,  a quien Dios ha hecho nuestra sabiduría --es decir,  nuestra justificación,  santificación y redención—No nos gloriamos en nosotros mismos, nos gloriamos en El, unidos a Él, confiados en El, bendecidos en El, pues no nos jactamos de nuestra sabiduría la cual nos apartó en algún tiempo de Él, ahora Él se ha convertido y ha de volverse en todo nuestra sabiduría; en El hemos recibido Justificación que significa que en El somos Justos para no volver a pecar, en El hemos sido santificados que significa que en El somos santos apartados del pecado, y en El hemos recibido redención que significa que El pago el precio por nuestra maldad, solo cuando entendemos y reconocemos nuestra necesidad de estar en unidad con El, allí verdaderamente somos libres en el Espíritu y podemos expresar su sabiduría como nuestra.
1Co 1:31  para que,  como está escrito:  "El que se quiera enorgullecer,  que se enorgullezca en el Señor."* Solo en este estado de unidad reconociéndonos en El, por El y para El, todo argumento de orgullo se desvanece y nuestro única opción para orgullecernos sea El.