lunes, 8 de octubre de 2012

TIEMPO DE REFLEXION



Este era un hombre que se puso a construir un faro en medio del desierto. Todos se burlaban de él y lo llamaban loco. ¿A qué un faro en medio del desierto? El hombre no hacía caso y seguía, callado, su labor. Un día por fin acabó el faro. En la noche sin luna y sin estrellas el espléndido rayo empezó a girar en las tinieblas del aire, como si la vía láctea se hubiera convertido en carrusel. Y sucedió que en el momento que el faro comenzó a dar su luz, surgió de pronto en el desierto un mar, y hubo en el mar buques trasatlánticos, y vuelos de submarinos de ballenas, y puertos con mercaderes de Venecia, y piratas de barba roja, y holandeses errantes, y sirenas. Todos se asombraron, menos el constructor del faro. Sabía él que si alguien enciende una luz en medio de la oscuridad, al brillo de esa luz surgirán... muchas maravillas.
Mat 5:16   Hagan brillar su luz delante de todos,  para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben al Padre que está en el cielo.
Cuando Dios habita en nuestros corazones la luz que proviene de El, hace que sucedan cosas maravillosas a nuestro alrededor, cuando esa luz que inspira amor resplandece en nuestro interior entonces nuestra pareja se siente amada, nuestros familiares y amigos sienten ese amor, y este fluye a los demás; cuando esa luz refleja perdón, entonces las relaciones se fortalecen, la amargura se va de nuestros corazones y el rencor es limpiado de nosotros y luego para con los demás; cuando esa luz refleja paz entonces todos aquellos que están a nuestro alrededor la sentirán y esta se impregnara también en ellos, cuando esa luz refleja obras de ayuda entonces el mundo a tu alrededor y hasta mas allá de lo que te imaginas podrá ser impactado, deja que la luz de Dios que habita en tu interior fluya hacia los demás para que ellos puedan conocer a Dios y puedan alabarle, por lo que ha hecho en nosotros, impactemos el mundo con el mensaje de Salvación y amor que Jesús nos enseño. El mundo esta lleno de oscuridad, ahogado en el consumismo absurdo y sin satisfacción, lleno de las tinieblas que producen el odio, el rencor y el dolor, así que necesitamos hombres y mujeres dispuestos a llevar su luz a las naciones. Seamos como este hombre que aunque todos le llamaban loco, su locura impacto su mundo.

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